AVION
El avión del norte de Cali que aterrizó en el olvido
Se estima que su completa restauración supera los $400 millones. Fuerza Aérea está interesada en realizar donaciones.
El avión Douglas DC-6 que el 5 de marzo de 1978 paralizó a Cali con su llegada desde Panamá, para convertirse en el centro de atracción de un parque recreativo en el norte de la ciudad, hoy se encuentra devastado por el paso de los años.
Con sus hélices rotas, la cubierta oxidada, la pintura desteñida, con cables y armazones fuera de lugar se encuentra la aeronave en la esquina de la Avenida 2 Norte con Calle 34 en el conocido Parque del Avión, administrado actualmente por la Corporación para la Recreación Popular, CRP.
La aeronave fue traída a Cali por el exiliado periodista cubano José Pardo Llada, tras liderar la construcción de un espacio destinado al esparcimiento de los caleños donde los niños pudieran conocer y tocar una aeronave, la cual fue donada por la empresa Inair Panama.
Para traer el avión hasta la Calle 34 se necesitaron dos grúas y la desinstalación de sus alas para trasladar por tierra las 30 toneladas de peso de avión por los 25 kilómetros por tierra de distancia desde el Aeropuerto Internacional de Palmaseca, a donde había llegado volando desde Panamá, hasta el Parque. En el trascurso superó cuerdas de alta tensión, árboles, postes y cercas.
“Era un niño, recuerdo que fue un evento apoteósico, aglomeraciones de personas emocionadas por que nunca habían visto un avión tan cerca. También recuerdo que cuando no tenía los $5 que costaba entrar a ver las proyecciones de películas que hacían allí, mis amigos y yo nos colábamos por la malla”, recuerda Rafael Reyes, repartidor de diarios de 44 años, quien habita en el barrio Bueno Madrid.
De igual forma, Mercedez Solano de 88, integrante de un grupo de la tercera edad que asiste al Parque actualmente, también compartió la experiencia que vivió por aquellas épocas. “Ese día la ciudad se paralizó, recuerdo le habían desmontado las alas y la cola, en el recorrido hubo que quitar algunos postes, eso fue realmente un acontecimiento importante en Cali. Después también tengo presente que llegué a traer a mi hijo, ahí les daban clases de los colegios” dijo.
Por su parte, María del Pilar Sierra, administradora del Parque del Avión, manifestó que el deterioro del aeroplano se dio porque durante muchos años, incluso antes de que la CRP asumiera la administración del parque, este estuvo a la intemperie y sin protección.
“Los habitantes de la calle que podían ingresar al parque habían tomado el espacio para el consumo de alucinógenos y, poco a poco, se empezaron a llevar sus partes”, aseguró Sierra, quien explicó que se tomó la decisión de restringir el acceso al avión por seguridad de los niños, dado que no se encuentra en condiciones óptimas.
Buscan arreglarlo
Ante el avanzado deterioro del avión, Fernando Marín, gerente de CRP, manifestó intenciones de restaurar este hito de la caleñidad, pero resaltó que la labor no es nada fácil debido a los altos costos que conlleva el proyecto.
“El valor de su restauración supera los $400 millones. Estamos apostando a su reparación y este año ya iniciamos la tarea de tocar las puertas de empresas privadas y públicas interesadas en colaborar. La Fuerza Aérea ya hizo una primera visita para evaluar el estado del avión; además estamos considerando algunas donaciones, como partes de otros aviones, asientos, cabina y escaleras”, comentó Marín.
El investigador de la Escuela Militar de Aviación, José Fernelly Domínguez, considera que este avión significa un hito importante en la memoria de la recreación popular de Cali que debe ser defendido y protegido.
“En otros países esos espacios son fundamentales para la construcción de comunidad, de redes sociales y solidaridades, es por eso que Cali debe seguir defendiendo el propósito principal de Pardo Llada, que era poder brindarle a las clases populares un espacio de recreación y empleo del tiempo libre, pues este es uno de los primeros espacios en que la gente tenía la oportunidad de participar de la recreación en espacios no tradicionales”, afirmó el investigador.
Hoy, según la administradora del parque, los niños aún se acercan a su puerta con el sueño que Pardo Llada les quería cumplir, sentir que puedan volar en un avión.
Los daños
El avión que lleva más de 30 a la intemperie, al llegar a Cali, contaba con todas las características de una aeronave común. Tenía cabina de operación, asientos y escalera de ingreso, hoy su interior está completamente desvalijado y vacío.
La última intervención realizada al avión se hizo hace aproximadamente siete años, cuado se pintó nuevamente.