Gremios y concejales también piden que Cali sea incluida en plan de seguridad

Crecen las voces que piden al Gobierno Nacional incluir a Cali en el plan de seguridad nacional que planteó el presidente Gustavo Petro.

La primera en pronunciarse fue la Gobernadora electa, Dilian Francisca Toro, luego el alcalde Alejandro Eder, quienes rechazaron que el Gobierno Nacional hubiera excluido a la capital del Valle del plan de seguridad.

A estas personas se unió el presidente de la Cámara de Comercio de Cali, Luis Fernando Pérez, quien dijo que compartía la preocupación del alcalde electo y “acompaño su llamado para que la seguridad de Cali sea prioritaria para la Nación”.

En su cuenta de X (antes Twitter) explicó que Cali es la capital con la mayor percepción de inseguridad entre los empresarios, pues el 80% de estos califican la seguridad como pésima/mala.

A este llamado se unió el concejal Fernando Tamayo, quien lamentó que el presidente Gustavo Petro desconozca la situación en la capital del Valle y en los municipios de la región, altamente afectados por la presencia de bandas organizadas, incluso transnacionales, dedicadas al narcotráfico, microtráfico, extorsión, gota a gota y hurto calificado.

“Son tres los municipios del Valle del Cauca que aparecen en la deshonrosa lista de las ciudades más peligrosas del mundo: Cali, Palmira y Buenaventura, y el presidente Petro no miró la región para invertir en lo que más necesitamos si de verdad queremos garantizar la tranquilidad de la población y atraer más inversión”, anota el concejal.

Esto, dice el cabildante por el Partido Conservador, va en contravía de los esfuerzos que hizo el Concejo, a petición del nuevo gobierno, de aumentar la destinación de recursos para seguridad.

“En el presupuesto 2024 se quiere dejar una partida de por lo menos $100.000 millones, que si bien se diferenciará de lo que se dejan en partidas iniciales con destino a los programas de seguridad, es insuficiente cuando los secretarios del ramo han dicho que se necesitan, como mínimo, $160.000 millones”, afirma Tamayo.

El concejal explica que los problemas de seguridad se extienden a otros municipios como Jamundí (donde se habla de la presencia de carteles mexicanos de la droga) y Tuluá (donde una banda criminal conocida como La Oficina) afecta el orden público e incluso quiso incidir en las elecciones locales de este municipio.

“Es curioso que con todo lo que pasa no se destinen recursos para Cali o para el Valle. Nos sentimos solos, el Gobierno Nacional no nos mete en la estrategia nueva de seguridad, no destina más recursos, no nos asigna más fuerza pública. Pero en las elecciones nacionales, Petro ganó con amplia diferencia y el pueblo no se ve recompensado por ello”, puntualiza el cabildante.

Hasta el 26 de noviembre, se habían presentado en Cali 909 homicidios y por lo menos 20.000 denuncias por robos.