La extracción ilícita de oro persiste en los Farallones de Cali, según la Procuraduría

El Parque Nacional Natural Farallones de Cali es un espacio de conservación natural que alberga especies animales y vegetales, el que, además, se ha visto afectado por la minería ilegal y otros delitos ambientales.

Por eso, la Procuraduría General de la Nación hizo varias advertencias sobre lo que está pasando Farallones de Cali, con el fin de avanzar con la lucha contra la minería ilegal. Y es que precisamente se trata de un territorio en el que se sigue viendo la extracción ilícita de oro.

Otro tema que alerta a nivel nacional es la continuidad de las actividades de extracción ilícita de minerales, lo que genera una afectación significativa en diferentes fuentes hídricas, incluyendo el río Cali y entre otras que proveen de agua a los acueductos de La Reforma y San Antonio y que benefician a 600 mil habitantes de la capital vallecaucana. Así lo advirtió el Ministerio Público.

El Ministerio Público también se refirió a los recientes estudios realizados por el ente de control que revelan niveles preocupantes de mercurio y arsénico en el río Felidia, y que superan los límites establecidos por la Environmental Protection Agency (EPA), con un registro de 17 y 31 partes por millón (ppm) de mercurio y 23 ppm de arsénico. Este hallazgo subraya el impacto negativo de la minería en el componente hidrográfico y la biodiversidad del área.

Ante este panorama, el Ministerio Público convocó a una mesa territorial bajo la estrategia “Colombia: sin minería ilegal y sin mercurio”, la cual se llevará a cabo desde las 9:00 a. m. del próximo martes, 30 de abril.

La mesa estará financiada por la Sección de Asuntos Antinarcóticos y Aplicación de la Ley (INL por sus siglas en inglés) de la Embajada de Estados Unidos para generar la articulación institucional que permita una respuesta efectiva a la problemática social-ambiental dentro del área protegida.

Por último, el ente de control recalcó mediante comunicado de prensa que “es imperativo garantizar la calidad del agua en estos afluentes para salvaguardar el derecho a la salud de los habitantes de la capital vallecaucana, por lo que continuará supervisando y vigilando las acciones adelantadas por las entidades competentes”.