Las fallas del sistema de salud que vuelve al dengue una enfermedad mortal

El pasado 14 enero , Lizeth Tellez de 24 años, entró por urgencias a un hospital porque tenía malestar general, dolor en el cuello y vómito. Su mamá, Nancy Montoya, quien la acompañó, recuerda que ese día solo le aplicaron un medicamento y le dieron salida. “No le tomaron ningún examen”, asegura.

Al siguiente día, debió regresar al hospital porque sus síntomas persistían con mayor fuerza, ahora también se sentía asfixiada. Por su condición, la remitieron a otra institución. En la ambulancia le dio un paro y le comenzó a salir sangre por la boca y nariz, al llegar a la clínica le dio otro paro. Durante 40 minutos trataron de reanimarla pero no fue posible, Lizeth falleció.

“Se demoraron mucho en atenderla, nunca le dieron un diagnóstico, ni siquiera le tomaron exámenes, si los hubieran hecho se habrían dado cuenta que tenía dengue”, dice Nancy.

Aunque no se ha confirmado que la muerte de esta caleña fue por dengue, “lo que dicen los doctores es que es la causa más probable”, comenta su madre.

Este es uno de los seis casos de muertes probables por dengue que se registraron en Cali en lo que va de este año. Uno ya se descartó. Los cinco casos en estudio son hombres y mujeres entre los 22 y 44 años.

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Además de estos, la secretaria de Salud Departamental, María Cristina Lesmes, asegura que se han notificado dos muertes probables por dengue en Palmira, una en Pradera, y una más del Cauca, que fue atendida en Cali. Así las cifras, el Valle sumaría 10 muertes que están en estudio y un registro de 2784 casos de dengue.

El incremento de los casos de dengue se debe a que desde el 2019 el país está en epidemia. “Es un fenómeno cíclico y ocurre cada tres años, la estábamos esperando desde principios del año”, precisa Lesmes.

En el 2013 se vivió una de las epidemias, el virus causó 12 muertes confirmadas. Uno de estos casos fue el de Luis Fernando Muñoz Amorrocho.

Este joven de 21 años con parálisis cerebral, había sido diagnosticado con dengue seis días antes de su deceso. El primer día que acudió al médico fue evaluado y remitido a su casa con control de plaquetas, pero al siguiente día tuvo que regresar a la IPS porque presentó signos de alarma de dengue grave como sangrado en encías, placas y sarpullido en el cuerpo.

Y aunque su mamá, Luz Stella Amorocho, insistió en que lo dejaran hospitalizado, lo mandaron de nuevo para su casa. Cuando regresó al otro día para el control de plaquetas, “el médico lo iba a mandar otra vez para la casa, pero yo me negué porque ya lo veía muy mal”, recuerda la señora.

Parece que el sexto sentido de mamá no le falló, pues “cuando lo revisó otro médico me preguntó ¿A usted no le han dicho que él tiene dengue hemorrágico, y hepatitis? está delicado”.

Por esto, lo trasladaron a otro hospital. Era lunes a las 9:40 p.m. Luis Fernando entró en coma. El martes a la 1:00 p.m. le dio un paro respiratorio, y tres horas después le dio otro paro que terminó con su vida, el 12 de marzo del 2013.

“La muerte de mi hijo fue todo una cadena de errores. Desde el primer día lo tuvieron que dejar hospitalizado y el manejo no debió ser ambulatorio”, afirma Luz Stella.

Debido a los 10 casos de posibles muertes en el Valle en el 2020 y los 23 casos notificados ya como dengue grave en Cali, es que las secretarías de salud le están poniendo lupa a los protocolos de cuidado para no tener errores mortales en el manejo del dengue.

“Toda persona que llegue con fiebre, debilidad o dolor muscular es sospechoso de dengue, hay que estar alerta más ahora que estamos en epidemia. El protocolo más importante es establecer un diagnóstico, las instituciones tienen unas pruebas específicas que se hacen en la sangre para confirmar si es dengue o no”, explica Cristian Pallares, médico epidemiológo del Centro Médico Imbanaco.

Al respecto, Miyerlandi Torres, secretaria de Salud Municipal, comenta que en Cali se está trabajando para mejorar el protocolo de atención. “Hemos enviado circulares, llamado y visitado las instituciones para hacer revisión de protocolos y guías en el manejo de dengue”, precisó Torres.

Agregó que los casos actuales de dengue grave, “se les hace seguimiento en las IPS para estudiarlos y mirar los posibles malos manejos clínicos, revisar si los médicos han cumplido con los protocolos y las guías de atención, hemos encontrado algunas fallas, pero les hemos solicitado un plan de mejoramiento”, puntualizó.

Por otro lado, la jefe de Salud Municipal, explica que “la confirmación de las muertes se demora alrededor de dos meses porque el laboratorio municipal y departamental no tiene las cepas para realizar el análisis del examen de sangre de proteína C reactiva (PCR), entonces las muestras hay que enviarlas al Instituto Nacional de Salud y allá hacen el análisis. El resultado se demora ese tiempo aunque puede ser menos”.

Todas las víctimas fatales por dengue tienen diferentes motivos, generalmente tienen una causa desencadenante que hace que se agrave.

De hecho, Miyerlandi Torres, comenta que las muertes que están estudio de este año tenían otra patología, “esto nos hace pensar que el dengue se puede complicar cuando hay una enfermedad de base”.

Entre tanto, el infectólogo Fernando Rosso, de la Fundación Valle del Lili, enfatiza que la mayoría de los casos de dengue no se complican, “pero si no se detecta a tiempo el virus y si no son atendidos tempranamente, los enfermos pueden agravarse y eventualmente fallecer”.

De acuerdo con la Secretaria de Salud Municipal se están buscando nuevas estrategias de prevención. “Vamos a invertir en herramientas tecnológicas que nos permitan identificar dónde hay incremento en la poblaciones de vectores para saber realmente hacia dónde deben ser orientadas las acciones como la fumigación”. Además, se va a trabajar en el proyecto wolbachia que es una bacteria que infecta los mosquitos para el control del dengue.

También se va a realizar una Cumbre Internacional, “esperamos que sea en mayo, vamos a traer expertos que nos hablen cuáles son esas nuevas formas de prevención y de tratamiento clínico”, aseguró la funcionaria.