"No hay inversionistas dispuestos a asumir la nómina de Telco": Cristina Arango

Tras 16 meses de gestiones al frente de la gerencia de Emcali, Cristina Arango, renunció a su cargo. En exclusiva para El País la funcionaria dio detalles de la dimisión a su cargo, cuál será su nuevo puesto en el Gobierno Nacional y por primera vez revela apartes del estudio que definirá el futuro del componente de telecomunicaciones de la compañía. Asimismo, da un balance de su paso por la empresa.

La pregunta de rigor, ¿por qué se va de Emcali?

Tenía que seguir con mi camino laboral. Emcali es una empresa compleja que implica muchas decisiones y riesgos asociados a ella y en este punto me parece conveniente pensar a nivel personal.

¿Actualmente tiene propuestas para irse a laborar en otro logar?

Me voy a trabajar al Gobierno Nacional, voy al Ministerio de Hacienda.

¿Será para un viceministerio?

Solo puedo decir que me voy al Ministerio de Hacienda.

Anuncian como su reemplazo en Emcali a Gustavo Jaramillo, ¿qué consejo le daría?

Yo le diría que Emcali es una empresa que todo el mundo ve como una vaca lechera, que quieren exprimir, y en la medida que se logre controlar y dejar claro que la compañía no es esa vaca, sino que tiene que engordarse y sostenerse por sí misma será sostenible en el mediano plazo.

¿Y qué le recomendó para lidiar con los sindicatos?

Allí lo importante es la comunicación.

¿Se lleva para Minhacienda algún gerente de los componentes de Emcali?

Todos los cinco gerentes presentaron sus renuncias protocolarias para que quien llegue, tome las decisiones al respecto. No me llevo a nadie.

¿Cuál fue su gestión más importante en estos 16 meses?

Se le dio orden a la empresa. Somos más eficientes, tenemos ahorros operativos en los gastos. Por ejemplo: en suspensiones, cortes y reconexiones tuvimos un ahorro de $4000 millones. En seguros se ahorraron $2000 millones, los viáticos se redujeron al 50 %, en gasolina se lograron ahorros en consumo del 12 % en vehículos y del 20 % en plantas.

¿Y qué obras importantes le dejó usted a la ciudad?

El año pasado fue de planeación. La sectorización de acueducto y alcantarillado que nos permite reducir pérdidas después de 16 años. Eso bajó de un año a otro en un 7 %. Perdíamos 165 millones de metros cúbicos de agua, hoy estamos en 155 millones de metros cúbicos. Dejamos avanzados los estudios para el abastecimiento de agua de Cali, también repotencializaremos la Planta de Tratamiento de Agua Residuales.

¿Cuándo se conocerán los resultados del estudio de MBA Lazard para saber sobre el futuro de telecomunicaciones?

Ya está listo. Se analizaron varios escenarios del futuro del componente de telecomunicaciones de Emcali. El primero es escindir (separar) el componente de telecomunicaciones y vender el negocio en marcha, eso no es viable porque no hay inversionista que asuma la nómina. Nadie quiere comprar Telco con las condiciones laborales existentes. No es una opción. Una segunda alternativa es arrendar la infraestructura, es decir, que la parte laboral se quede en la empresa y se arrienda la infraestructura, eso tampoco es viable. Una tercera alternativa es mantener el status quo, que es sostener la empresa como está hoy pero ese escenario da una valoración negativa. Lo otro es vender los activos de Telco, y Emcali se queda con la parte laboral. Eso es viable, el problema es que lo que nos darían por eso activos alcanza para pagar la nómina de los empleados de Telco por un año y medio más o menos.
Y por cuál de esas opciones se definió la Junta Directiva de Emcali.
Lo están analizando. Lo importante es que se puedan renegociar las convenciones colectivas de los empleados para que la empresa sea viable.

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¿Las pérdidas de Telco pueden arrastrar los componentes de Acueducto y Energía?
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En el corto plazo no, en el mediano plazo depende del nivel de ingresos de la empresa.

Cuando hablamos del corto plazo, ¿cuántos años son?

Pueden ser tres años(...) lo importante es que la parte laboral siempre estará suscrita en Emcali, de acuerdo a las convenciones colectivas.

¿Esa carga prestacional de telecomunicaciones es una lastre para la compañía?

Eso implica que lo otros componentes (acueducto y energía) en algún momento tienen que asumirla -la carga prestacional-.

Ese es un problema que le queda al nuevo gerente...
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Es un reto.

Usted es economista, ¿cómo quedó Emcali en sus finanzas tras su gestión?

Las ganancias aumentaron un 13 %, pasamos de $58.000 millones a $65.000 millones. Eso significa que los márgenes de acueducto y alcantarillado aumentaron en utilidad operacional en un 10.6 %, en energía un 14.8 %, en telecomunicaciones la historia es otra, logramos mejorar después de 9 años un 1 %, pero creciendo. En telecomunicaciones, el componente laboral pesa un 30 % frente a los ingresos de la compañía.

¿Logró mejorar en algo el servicio de Emcali a los caleños?

En acueducto y alcantarillado la reducción de pérdidas fue histórica. En fuentes de agua para Cali se avanzó, ya hay unas opciones concretas para la ciudad. En términos de servicio, en acueducto se optimizaron las reparaciones, en el 2015 tuvimos 7 daños de red matriz y terminamos el 2016 con solo 3 daños. Eso se traduce en menos cortes de agua para los caleños por concepto de estos arreglos. En acometidas de agua (daños menores), teníamos un represamiento de solicitudes de 402 daños cuando llegamos. Hoy estamos al día.

En energía logramos estabilidad en los precios porque la compramos a largo plazo. Y estamos cubiertos hasta el 2019, eso garantiza buenos precios. En enero pagamos una de las energías más económicas del país, hoy estamos en precios menores al promedio nacional.
También en energía vamos a desarrollar un plan de expansión. Cali tendrá un mayor nivel de tensión. Eso significa que hay menos cortes por lluvias y otros.

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En Telecomunicaciones crecimos en número de clientes. Mejoramos el servicio de internet; antes, a nivel de ciudad, entregábamos 12 gigas y hoy estamos en 24 gigas. En reparación de daños, en el 2014, nos demorábamos 10 días, hoy solo dos días.

Este año hubo dos señalamientos en su contra en relación con su gestión en Coljuegos cuando era gerente y con el tema de una sanción de la Personería por despedir una trabajadora sindicalizada, ¿eso incidió en su salida?

No, eso es normal en el sector público. Pero tenemos la tranquilidad que todo se realizó de manera correcta. Confiamos en los órganos de control.

¿Qué le quedó faltando por hacer en Emcali?

Los retos están en ejecutar proyectos como la repontecialización de la Ptar, el programa de alumbrado público (Emcali lo asume en el 2018), entamborar los canales Figueroa y Cauquita, que era una petición urgente de la comunidad. También se avanzó en diseños de servicios para la zona de expansión de Cali, eso garantiza que se pueden iniciar todos los proyectos de vivienda en la zona . Hay $300.000 millones destinados para eso.