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Pérdidas de agua en Cali llegan hasta el 80 % en la ladera; Emcali anunció millonarias obras en acueducto
Carlos Enrique Madriñán, nuevo gerente de Acueducto de Emcali, contó el plan de trabajo y de inversiones de la empresa.
En días recientes, Empresas Municipales de Cali (Emcali) firmó al ingeniero agrícola Carlos Enrique Madriñán como nuevo gerente de la Unidad Estratégica de Acueducto y Alcantarillado, tras la salida de Mauricio Jiménez en junio.
El nuevo gerente conversó con El País y aseguró que la Unidad se encuentra en una situación financiera positiva, dado que el margen EBITDA se ubicó en 44,39 % al cierre de junio, superando la cifra alcanzada en el primer semestre del año pasado, cuando fue de 40,91 %.
Aún así, contó que Emcali viene presentando cifras considerables en pérdidas del recurso hídrico, tanto en la zona urbana como en la zona rural, lo mismo que en las categorías comercial y técnica.
EL PAÍS: En una entrevista reciente, el gerente Roger Mina contó que las pérdidas de agua en la zona plana eran de más del 50 % y en la zona de ladera del 60 %, ¿cuánto se está perdiendo ahora?
CARLOS MADRIÑÁN: En la Red Baja, el Índice de Agua No Contabilizada (IANC), o las pérdidas de agua, oscila entre el 50 % y el 55 %. En la Red Alta, es decir, la ladera, las pérdidas van desde el 70 % y llegan al 80 %. Esto se debe a la presencia de una mayor cantidad de Asentamientos Humanos de Desarrollo Incompleto (AHDI) localizados en esas zonas de ladera, que aún no cuentan con macro medidores y cuyos consumos no son facturados.
Por ello, actualmente se están llevando a cabo mesas de trabajo con la Secretaría de Vivienda Social y Hábitat para comenzar a normalizar o legalizar seis AHDI, en una primera fase.
EP: ¿Cómo están las pérdidas comerciales y técnicas?
CM: Los dos Programas de Recuperación de Pérdidas Técnicas y Comerciales se miden e impactan a través del Índice de Pérdidas por Usuario Facturado (IPUF). En junio de 2024, el comportamiento del indicador fue de 15,78 metros cúbicos por suscriptor por mes. Este resultado todavía se encuentra por debajo de la senda regulatoria.
Es decir que, en promedio, por cada usuario del servicio se pierden 15,78 metros cúbicos (m3) de agua al mes (dentro de la senda, pero por encima del nivel aceptable de 6 m3/suscriptor/mes).
EP: ¿Cómo están buscando reducir esas pérdidas?
CM: Gran parte de las acciones que se ejecutarán, a través del Programa de Pérdidas Técnicas, ayudarán a sostener o conservar el indicador por debajo de la senda regulatoria después de 6 u 8 meses del inicio de la ejecución del contrato de control de fugas no visibles. El contrato se encuentra en trámite en la GAE.
Esperamos rastrear 800 kilómetros de red y detectar y reparar 770 fugas, lo cual contribuirá a recuperar un volumen de agua de 240 a 300 litros por segundo, aproximadamente.
Respecto a las pérdidas comerciales, se realizó el cambio de 17.933 medidores por correctivo, 2272 medidores por avance tecnológico y se han cancelado 1750 por irregularidades.
También, se han recuperado ingresos a través del contrato de SCRR (Suspensiones, cortes, reconexiones del servicio de acueducto) por un valor de más de $7043 millones, con corte al 31 de julio de 2024.
EP: Hablemos de las obras, el Canal de Aducción del río Cali es una de las más importantes, ¿en qué quedó?
CM: La línea de aducción es un proyecto de ciudad y es vital para la prestación del servicio de acueducto a la comunidad y a la red hospitalaria (aproximadamente el 20 % de la ciudad).
Es un proyecto con financiación de la Nación y su desarrollo se está fortaleciendo con una consultoría en proceso de contratación, para tener entregables este año y que permita poner a punto los alcances técnicos, ambientales, metodológicos y presupuestales, entre otros.
El proyecto de línea de aducción, que irá desde la bocatoma del río Cali a la planta Río Cali, va en una ejecución del 37 %. Como dije, en este momento se encuentra en proceso de contratación la consultoría para la revisión de las condiciones técnicas y financieras del proyecto.
En enero de 2025 se presentará la reformulación al Ministerio y luego se hará el proceso de contratación para continuar; se tiene proyectado reiniciar obra en el segundo semestre de 2025. El costo del proyecto a contratar es de $ 48.000 millones.
EP: En cuanto a la optimización de la PTAR de Cañaveralejo, que también quedó parado, ¿qué se va a hacer?
CM: El proceso de optimización fallido de la planta fue resuelto por el Tribunal de Arbitramento, mediante un acuerdo de pagos entre las partes. Adicional a esto, se han realizado labores de recuperación de los equipos mediante un plan de choque, con lo que se planean poner en funcionamiento dos sedimentadores 6 y 7, dos bombas tornillo 3 y 4, un separador de áreas y el reforzamiento mecánico de los sedimentadores 2 y 3, lo cual culmina a finales de octubre próximo.
Adicionalmente, se está realizando una consultoría para el mejoramiento integral del tratamiento primario para su optimización, lo que estaría terminando a finales de diciembre de este año.
EP: ¿Y darán continuidad al proyecto de la segunda fase de la planta, que se requiere para limpiar los vertimientos al río Cauca?
CM: La segunda fase se refiere al tratamiento secundario que debe realizar la planta. La CVC se encuentra realizando los diseños de detalle para el tratamiento secundario, con el acompañamiento y seguimiento de Emcali. Estos diseños deben estar listos para finales de 2025.
EP: El proyecto del lecho del río iba en un 40 % al mes de marzo. ¿De qué se trata y cómo avanza?
CM: Emcali está construyendo un pozo colector horizontal como sistema de Filtración en Lecho de Río (FLR) para el aseguramiento de la calidad de agua en el Distrito de Santiago de Cali, lo que implica cambios en el proceso del esquema de tratamiento de agua existente, para ayudar con las condiciones variables de carga que provee el río Cauca. A medida que los pozos de producción bombean el agua del acuífero, el agua superficial fluye hacia el subsuelo para recargar el pozo, mientras que los sedimentos sub-superficiales funcionan como un filtro natural que elimina varios contaminantes. Al final, esto produce agua de mayor calidad que el agua de la fuente cruda, lo que se traduce en menores costos de tratamiento y de manejo de lodos.
La remoción de la turbiedad es altamente eficiente a través del uso de la tecnología de FLR como unidad de pretratamiento. La reducción de la turbiedad captada está relacionada con la disminución de los sólidos suspendidos totales y, por lo tanto, con la disminución de la generación de lodos en el tren de tratamiento de las PTAP Puerto Mallarino para la Red Baja (es decir, la zona plana urbana de Cali).
A nivel global, el porcentaje de avance de este proyecto se encuentra en un 44,37 % a junio del 2024.
EP: ¿Qué otras grandes obras están planeando liderar desde la Unidad en estos cuatro años?
CM: Varias. Primero, está la optimización de la Planta de Tratamiento de Agua Potable (PTAP) de La Rivera, también se planea avanzar, en estos cuatro años, en la optimización de las plantas de potabilización Puerto Mallarino, Río Cauca y Río Cali, así como la optimización de la estación de bombeo de aguas lluvias en Paso del Comercio.
Una preocupación de los caleños está en el alcantarillado de Emcali que ya se encuentra viejo y obsoleto. ¿Cuántos kilómetros presentan ese estado y cómo va el proceso de restitución u optimización?
La distancia acumulada para reposición de redes es de 513 kilómetros, lo que equivale al 20 % del total de la ciudad. En las actuales condiciones de mercado y de precios, esto nos representará un costo aproximado de $ 1,5 billones.
