Cali
Preocupación por el déficit de zonas verdes públicas en Cali
Expertos señalan que la falta de estos espacios verdes impactan negativamente la calidad de vida de los caleños.
Solo 2 de las 22 comunas de la ciudad cumplen con el mínimo de metros cuadrados de zonas verdes por habitantes que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). Según la entidad internacional, todas las ciudades y pueblos deben tener un área mínima de 9 m² de áreas verdes por habitante.
Las únicas comunas que superan el dato son la número 22 con 56,1 m² y la Comuna 17 con 13,6 m² de zonas verdes por habitante. Respecto a las comunas 2, 3, 4, 5, 7,19 y 21, el espacio oscila ente 4,9 y 8,1 m².
Por otro lado, 13 comunas registraron un valor menor al promedio de la ciudad, los casos más complejos son los de las Comunas 20 (1,2 m² de zonas verdes por habitante), la Comuna 1 (1,3 m² de zonas verdes por habitante) y la Comuna 18 (1,7 m² de zonas verdes por habitante).
Carlos Llanos, arborista internacional, manifestó que este es un fenómeno que se presenta en todas las ciudades de América Latina e incluso del mundo en desarrollo, ya que el acceso a la tierra y su costo es diferencial.
“Generalmente, los barrios diseñados y pensados a futuro tienen vías amplias y suficientes y así mismo parques, alamedas y áreas verdes suficientes; lo que no ocurre en los barrios centrales de las ciudades o en los periféricos donde el desarrollo de la ciudad se ha dado de manera no planificada y más como un proceso de ocupación irregular de unas áreas limitadas o en condiciones incluso no aptas para la urbanización”, dijo Llanos.
De igual manera, el profesional ambiental resaltó que la salud humana está estrechamente relacionada con la presencia de áreas verdes asequibles y de calidad. Por lo cual, la OMS y otros organismos como la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, FAO, hacen llamados ingentes a los gobernantes municipales a preocuparse por diseñar más áreas verdes y árboles para sus habitantes.
“El disfrute de la infraestructura verde es fundamental para resolver problemas de todo tipo en aristas como la seguridad, la salud física y mental, la posibilidad de hacer ejercicio y también favorecer el disfrute de la biodiversidad”, sostuvo el experto ambiental.
Por lo anterior, Carlos Llanos considera que para darle una solución a esta problemática que aqueja la ciudad, es necesario diseñar planes de urbanismo para las zonas densamente pobladas, que implique comprar manzanas completas para hacer parques y ampliar las vías que los conecten.
Asimismo, involucrar en todas las acciones constructivas y la planeación, a expertos en infraestructura verde, arboristas y profesionales que entiendan los modelos urbanos modernos, además de las comunidades en la protección y cuidado de los árboles y zonas verdes en su entorno.
Respecto a este panorama, el DAGMA, junto con la CVC y el Departamento de Planeación, manifestaron que, en términos generales, los índices de Espacio Público Efectivo (EPE) más bajos de la ciudad no están relacionados con la menor cantidad de estas zonas verdes, sino con las más altas densidades de población.
“En el caso particular de la ciudad de Cali se conjugan mayoritariamente densidades de población altas con escasa área de EPE; trayendo esto como consecuencia la situación generalizada de índices de espacios verdes muy por debajo del objetivo de la vigencia del Presente POT de 6 m2 por habitante. Circunstancia que requiere atenderse con la intencionalidad, de un incremento de EPE orientado a las comunas con mayor densidad de población”, indicaron las entidades.
Entre los casos más críticos se encuentra el sector de la ladera, que tan solo tiene 0,9 m² de espacio verde por habitantes. En cuanto al sector del Oriente, las entidades encontraron que aunque cuenta con la mayor área de espacio público efectivo de la ciudad, allí se concentra el mayor número de habitantes de Cali, lo que quiere decir que cada ciudadano de la zona solo cuenta con 1,9 m² de zona verde.
Por lo anterior, el Dagma, resaltó la importancia de promover los espacios públicos para la calidad de vida de los caleños y caleñas, por lo que es necesario repensar qué características deben tener esos espacios y cómo lograr que las zonas verdes, las fuentes hídricas y las especies locales estén en condiciones ambientales favorables.
Sin embargo, también indicaron que el uso de las zonas verdes y el espacio público en general ha sido influenciado por dinámicas económicas, lo que plantea un desafío en términos de prioridades.
“Es fundamental cuestionarse, ¿hasta qué punto la generación de emprendimientos o la reactivación económica puede afectar la calidad ambiental y el espacio público? El ejercicio de derechos frente a los impactos y riesgos derivados del uso inadecuado del espacio público, como la inseguridad y la violencia, también debe ser considerado, ya que estos problemas afectan tanto el desarrollo sostenible como la calidad de vida de la población”, manifestó Diego Carvajal, jefe de Oficina de la Unidad de Apoyo a la Gestión del Dagma.
Agregó que las soluciones a estos problemas, deben pensarse no solo institucionalmente, sino y sobre todo, en diálogo con comunidades, ciudadanía, actores académicos, sector privado; porque se requiere apropiación y sentido de pertenencia frente al espacio público y su diversidad.
“Es tarea de todos educarnos frente a los bienes comunes: los ríos, los parques, los árboles, la calle. Desafortunadamente, aún hay muchos ciudadanos que no son cuidadosos en el uso de las zonas verdes, lo que se traduce en contaminación y presencia de basura que impacta negativamente la biodiversidad. Además, el acceso a estas áreas puede estar restringido debido a actividades comerciales o usos irregulares, ocupaciones inadecuadas que generan pérdida del carácter público de las zonas verdes”, dijo Carvajal.
De igual manera, manifestó que en muchos casos la comunidad ha intervenido en las zonas verdes sin tener en cuenta los requerimientos ambientales, lo que incrementa la fragmentación del paisaje y reduce la biodiversidad de fauna y de flora.
“En muchos arreglos paisajísticos se ha minimizado la cantidad de árboles y se ha aumentado el área dura, lo que ha disminuido las relaciones de número de árboles y de área verde por habitante”, puntualizó el funcionario.
Apadrinamiento de zonas verdes
Como estrategia para mejorar y mantener las zonas verdes ya existentes en la ciudad, el Dagma creo el programa de ‘apadrinamiento de zonas Verdes y parques’, el cual está diseñado para que organizaciones cívicas, clubes de jardinería, empresas privadas, dependencias gubernamentales y patrocinadores corporativos se apropien de estos espacios.
“Los padrinos deben invertir recursos económicos, humanos y naturales para el mantenimiento y mejoramiento de la zona escogida, las actividades incluyen: Riego de prendimiento, corte de prado, rebordeo, poda de rebrotes, deshierbe, reposición de plantas, recolección de residuos sólidos, riego de mantenimiento, reparación o ajuste de mobiliario, etc”, explicó Harrinson Cerón, coordinador Programa de Adopción de Parques y Zonas Verdes del Dagma.
Actualmente, el proyecto cuenta con 122 convenios, es decir, 700 metros cuadrados apadrinados. La mayoría se ubican en el norte y sur (comunas 2, 17, 19 y 22), por lo que el funcionario advirtió que se requiere un mayor apersonamiento en áreas del oriente y la ladera, con el fin de generar el embellecimiento de los sectores y generar entornos más seguros.
Parques para la vida
Actualmente, la Alcaldía de Cali desarrolla 5 proyectos que ha denominado ‘parques para la vida’.
Estos proyectos tienen como objetivo construir más de un millón de metros cuadrados de zonas verdes públicas. Sin embargo, a la fecha, ninguno esta terminado y algunos tienen menos del 50% de ejecución.
- Parque Pacífico: Busca resaltar las manifestaciones culturales del Pacífico colombiano.
- Cristo Rey: Corredor ambiental que conectará la zona alta del barrio San Fernando y el mirador de Cristo Rey.
- Parque ambiental Corazón de Pance: 92 hectáreas, hábitat de 250 especies de aves y 21 mil tipos de plantas, son algunas de sus características.
- Bulevar de Oriente: Este extenso parque busca impactar el entorno de la población en las comunas 13,14 y 15.
- Parque Tecnológico San Fernando: Proyecto busca fortalecer la generación de conocimiento.