Propuesta para acomodar a los ‘piratas’ generó polémica entre la ciudadanía

Ante la supuesta posibilidad de acomodar al transporte pirata dentro de un marco legal, según lo dicho por Alberto Hadad, quien hoy se desempeña como asesor de Movilidad para la Alcaldía, el gremio de taxistas ha manifestado su total preocupación.

Estas declaraciones se dieron en medio de los fuertes operativos que el exsecretario de Tránsito de Cali ha realizado en los últimos días, en compañía del alcalde Alejandro Eder.

“Hemos tenido dificultades, hemos tenido que recoger muchas motos en los andenes, carros mal parqueados, la gente ubicada donde quería, las motos andaban por donde querían, por los carriles del MÍO, yo creo que eso se acabó. Estamos haciendo un proceso de integración de todos los actores del modelo donde tiene que participar lógicamente la ciudadanía, para volver a sacar la ciudad adelante”, detalló.

Sin embargo, lo que ha atizado la polémica vino después, cuando añadió que “con los piratas me reuní, con los motorratones me reuní, no vamos a quitarles el empleo, no vamos a dejar la gente sin transporte, sino gradualmente nos vamos acomodando todos dentro de un marco legal”.

“Mientras el MÍO no funcione es muy difícil que dejen de operar los piratas, de eso es consciente el gobierno, el alcalde Eder está completamente claro sobre el mensaje, el cual es que no dejemos a la gente sin transporte, pero ubiquémosla estratégicamente. A los piratas del sur ya les dije: bueno vamos a escoger un lote, lo hicieron muy amablemente, colocamos tres carros aquí, lo mismo con los motorratones para subir la gente. Nosotros entendemos que en este momento tenemos un transporte débil que lo estamos fortaleciendo”, argumentó a los medios el Asesor de la Administración.

Sus palabras fueron complementadas por Wilmer Tabares, secretario de Movilidad de Cali, quien señaló que continuarían con “los operativos al transporte informal que arrebata muchos de los pasajeros del MÍO, pero debe haber un fortalecimiento por parte de los operarios (del sistema masivo), porque lo que no queremos es desplazar al transporte informal sin tener una opción formal de mejor servicio”.

Estas palabras de los funcionarios generaron gran confusión y malestar en la ciudadanía, la cual no entendió si se iba a combatir o coadyuvar a la ‘piratería’. Incluso hubo críticas por la postura flexible con la informalidad.

Los taxistas están preocupados

“Estamos de acuerdo con que Cali necesita orden sin ninguna excepción, lo que no compartimos son las declaraciones a favor del transporte pirata”, fueron las primeras palabras que ofreció Johnny Rangel, director del gremio de taxistas La Mancha Amarilla, luego de conocer el trabajo que se busca realizar con el transporte informal.

Manifestó que el gremio que representa, “por obvias razones, está totalmente en contra de cualquier permisividad que se le dé al transporte ilegal, porque eso es lo que ha pasado en nuestra ciudad, la cual es considerada un paraíso del transporte informal. Aquí vemos vehículos de todas las regiones del país haciendo esta actividad”, sostuvo.

Para el líder del gremio de taxis, las declaraciones de Hadad son bastante preocupantes, razón por la cual quieren conversar con él para que se realicen las aclaraciones pertinentes.

“Piratería es piratería, transporte ilegal es transporte ilegal en todas sus modalidades. Entonces lo que él ha dicho, que esperamos que lo aclare, es que los van a acomodar en ciertos lugares para que no obstruyan las vías públicas, lo cual nosotros seguimos cuestionando, su intervención puede ser mal comprendida y fomentar antes más el transporte ilegal, como pasó con la Administración de Rodrigo Guerrero, en ese entonces el señor Hadad era el secretario y en ese tiempo se iba a formalizar a los motorratones, lo que originó que estos se creyeran con más poder, salieran hasta con chalecos y mire hoy en día cómo los motorratones se han regado por toda la ciudad”, argumentó Rangel.

Puntualizando que “estamos en contra de que nuestra ciudad siga padeciendo el transporte pirata, que nos siga afectando como nos ha afectado en la historia al gremio de los taxistas y a todos los que hemos estado cumpliendo la norma y la Ley”.

Frente a toda esta polémica, el Secretario de Movilidad le aclaró a este medio que “hay una mala interpretación, nos corresponde ejercer ese control por mandato legal y vamos a continuar haciéndolo, eso hay que dejarlo claro”.

Señaló que con “formalización” se referían a incluir a los conductores de los vehículos ‘piratas’ en el personal de operadores para el MÍO, el transporte público colectivo o los taxis, pero no en sus vehículos particulares.

“Entendemos como Administración que tenemos unas dificultades en el transporte público, pero vuelvo y digo, por mandato legal, el control hay que hacerlo y lo continuaremos haciendo”, complementó Tabares.

El profesor de Transporte de la Universidad Javeriana, Darío Hidalgo, expresó que allí está la clave del asunto: que el transporte formal no presta un buen servicio.

“El problema (de la informalidad) está en que generan desorden, pérdidas para el sistema formal porque compiten con él, siniestralidad y en muchos casos no prestan servicio en determinadas horas. Llevar hacia la formalidad los servicios de transporte público es un esfuerzo gigante que requiere recursos públicos que muchas veces no están disponibles y los grandes ejemplos están en Cali y Bogotá”, dijo.