“Si hay una tonelada de residuos, es mucho”: Dagma sobre las basuras alrededor de la Terminal de Transportes de Cali

Los problemas que aquejan a los alrededores de la Terminal de Transportes de Cali no dan tregua y siguen generando preocupación en los caleños. Uno de ellos es el arrojo clandestino de residuos en los andenes y demás espacio público.

En un recorrido realizado por El País se constató que en el sector aledaño a esta edificación hay algunos puntos en los que se concentran basuras, sin embargo, desde el Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente (Dagma) manifestaron que este problema está controlado y que ellos han reducido el arrojo clandestino en un porcentaje cercano al 80 %.

“Se ve, pero muy mínimo, se ha minimizado por el control que está haciendo la autoridad ambiental. Si hay una tonelada de residuos dispuesta de manera inadecuada en el entorno es mucho, porque semestralmente estamos haciendo los controles y verificando el manejo de los residuos”, manifestó Willis Izquierdo, líder del grupo de Residuos Sólidos.

Asimismo, el funcionario explicó que quienes más residuos generan para el entorno en ese sector de la ciudad son las personas que invaden el espacio público y los establecimientos de comercio. Con los primeros, continuó, la situación es complicada, pero con los negocios se está haciendo un trabajo articulado.

De hecho, aseguró que en esa zona se han impuesto cinco medidas preventivas por arrojo clandestino en lo corrido de este año, mientras en toda la ciudad van más de 100.

Al preguntar si los controles una vez cada seis meses son suficientes, el funcionario fue tajante al indicar que sí lo son.

“Lo que pasa es que yo no puedo ir cada ocho días a hacerle la visita al establecimiento de comercio para ver cómo está manejando los residuos, eso es una visita en la que queda un acta de visita técnica ambiental donde verificamos el cumplimiento de esa normatividad. ¿Qué es lo que verificamos? Que saquen sus residuos en las frecuencias y horarios establecidos por el operador, que tengan una unidad de almacenamiento para que almacenen sus residuos durante el día y no los estén sacando en los horarios no establecidos”, agregó Izquierdo.

Colaboración de la ciudadanía

Por último, señaló que también es importante la colaboración de la ciudadanía para evitar que se agrave la problemática, sin que tenga que estar vigilante todo el tiempo el Departamento de Gestión del Medio Ambiente.

“Se recomienda a la ciudadanía presentar los residuos en el horario prestablecido por el operador, y deben llamar a la línea 110 para que ellos corroboren los horarios de la prestación del servicio”, concluyó.

Cabe señalar que este no es el único problema que aqueja a la Terminal en su zona externa. Otro de ellos y que también inmiscuye al Dagma es el de lavado irregular de buses y vehículos en el espacio público.

Sobre esto, desde el organismo indicaron que esto ocurre porque hay individuos que ofrecen este servicio a muy bajo costo, por lo que los conductores de las empresas de transporte acceden a ellos.

“Estas personas empiezan a lavar los vehículos, pero el problema es de dónde se saca el agua. En Centralia (como se conoce coloquialmente la zona), el agua no se saca de pozos, sino de conexiones fraudulentas al acueducto de Emcali. Nosotros hemos encontrado cinco o seis conexiones ilegales en las que ellos rompen la tubería y empiezan a sacar agua; las conexiones las esconden debajo de piedras o en casetas de vigilancia, hay más o menos un grupo de 30 personas que hacen esta práctica”, detalló Mauricio Rodríguez, coordinador del Grupo de Recurso Hídrico del Dagma.

Agregó que la manera de combatir este flagelo es compleja. Se hacen intervenciones con la Secretaría de Movilidad y la Policía, mientras el Dagma impone medidas preventivas de amonestación ($ 744.000 pesos).