Adolescentes confesaron el homicidio y tortura de un joven en Medellín: esta fue la decisión de las autoridades

Luego de que unos adolescentes, uno masculino de 16 años y una mujer de 17 años, confesaran haber torturado, asesinado y desmembrado a otro adolescente en el nororiente de Medellín, los presuntos homicidas permanecerán en internamiento preventivo en un centro especial para adolescentes mientras se toma la decisión judicial.

La medida fue solicitada por el fiscal y concedida por un juez de control de garantías. Cabe resaltar que los presuntos responsables se presentaron en la estación de Policía de Manrique el pasado 18 de junio, donde confesaron el crimen a los uniformados, quienes no podía creer los detalles macabros que estaban escuchando.

Según los adolescentes no solamente asesinaron a un hombre, sino que detallaron cómo lo desmembraron para arrojar las partes del cuerpo en diferentes sitios de la ciudad, presuntamente, para dificultar la labor de las autoridades si se iniciaba una búsqueda.

Según el joven, el homicidio ocurrió porque el hombre de 19 años ingresó a su hogar para hacerle daño a él y a los demás ocupantes de la casa con un arma blanca, por lo que él habría cometido el crimen en defensa propia para evitar ser lesionado.

Luego, cuando las autoridades preguntaron acerca de los lugares a donde fueron arrojados los restos del cuerpo del hombre, el adolescente afirmó que en una zona boscosa del sector están los brazos, la cabeza y las piernas.

La joven de 17 años, pareja sentimental del presunto responsable, reconoció su coautoría en estos hechos delictivos. La víctima fue identificada después como Brayan Loaiza Salas, de 19 años, sin embargo, contrario a lo que confesaron los supuestos autores, la Fiscalía reportó en el expediente que sufrió el ataque en el momento en el que estaba dormido.

En el informe se señaló que “los elementos materiales probatorios recopilados permitieron establecer que la víctima habría recibido más de 28 lesiones con arma blanca en el cuello y la cara. Se evidenció además que mientras el menor de 16 años atacaba al hoy occiso, su pareja sentimental, de 17, sostenía a la víctima de los pies para facilitar el crimen”.

La investigación también reveló que la víctima fue desmembrada en el baño de la misma vivienda donde fue asesinado.

Por estos hechos criminales un fiscal de la Unidad de Responsabilidad Penal para Adolescentes, Urpa, les imputó cargos por los delitos de tortura y homicidio agravado. Ambos menores de edad aceptaron los cargos que se les imputaron.