Crisis migratoria: gobernador de Antioquia lanzó alerta por alto flujo de personas que buscan cruzar el Darién

Una nueva oleada de migrantes que buscan cruzar por el tapón del Darién y el Urabá antioqueño hacia Panamá y Centroamérica genera preocupación entre las autoridades migratorias y de gobierno en la región.

Particularmente uno de los que se pronunció en las últimas horas fue el gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria, quien lanzó un mensaje de emergencia a las instituciones colombianas y estadounidenses ante la grave crisis humanitaria que nuevamente, como en otras épocas de años anteriores, se avizora.

El mandatario seccional indicó que ya hay varios municipios que están colapsados por la presencia de miles de migrantes con sus familias que se encuentran varados a la espera de poder cruzar la frontera.

“Se ha incrementado en una forma increíble el número de migrantes al corte actual, ya van más de 310,000, siendo récord, comparativamente con cualquier año anterior, pero adicionalmente aumentado el número en el mes de julio y agosto sobre los promedios que venían anteriores”, dijo el gobernador.

Chigorodó, Mutatá, Turbo y Necoclí son las localidades antioqueñas más afectadas por esta situación que ya desborda las capacidades institucionales, como lo reiteró Aníbal Gaviria.

“Es un tema que desborda las capacidades de Turbo, desborda las capacidades del municipio de Necoclí desbordan las capacidades de la propia Gobernación de Antioquia y requiere una atención muy priorizada por parte del gobierno nacional y la propia embajada de los Estados Unidos”, puntualizó.

El panorama es mucho menos alentador si se tiene en cuenta que en la última semana el gobierno panameño anunció que evalúa la posibilidad de tomar medidas “contundentes”, entre ellas el cierre de sus fronteras, ante lo que han considerado “falta de cooperación internacional” para abordar las problemáticas que trae consigo la migración desbordada.

“Nosotros tratamos de buscar la cooperación internacional con los países de origen y de tránsito pero ha sido difícil, por ejemplo, cuando llegan los niños, ¿qué es más fácil?, evitar que esos niños inicien ese trayecto de Necoclí y Turbo en Colombia para que no vengan y se vean en riesgo en la selva porque cuando llegan acá vienen impactados, entonces el enfoque no es Panamá”, señaló el ministro de Seguridad Pública de Panamá, Juan Manuel Pino.

Desde el país vecino expresaron su malestar ante la negligencia en Colombia para regular el tránsito de migrantes. Desde Panamá manifestaron que han invertido más de 60 millones de dólares para atender la problemática que incluso ha generado afectaciones a ecosistemas como selvas y fuentes hídricas que abastecen a comunidades indígenas.

El drama es mucho más complejo al considerar las dificultades para poblaciones vulnerables como el caso de niños, niñas y adolescentes, situaciones sobre las que recientemente llamó la atención en Colombia la Defensoría del Pueblo.

De acuerdo con datos entregados por esa entidad del Ministerio Público, basados en los registros del Servicio Nacional de Fronteras, también conocido como Senafront, que forma parte del Gobierno de Panamá, durante el primer semestre de 2023 migraron 40.171 menores de edad, mientras que en el mismo periodo del 2022 cruzaron esa frontera 7.369, un incremento desbordado del 445%. La Defensoría incluso afirmó que ha conocido casos de niños realizando este trayecto sin sus familias, lo que aumenta aún más su condición de vulnerabilidad.

“Preocupa el aumento en el número de migrantes, lo que sin duda significa un riesgo mayor de vulneración de derechos de niñas, niños, adolescentes y jóvenes, por ejemplo, a ser víctimas de distintas formas de violencia, incluida la sexual, como también de hurtos, trata de personas y tráfico de migrantes y discriminación. Violencias que son ejercidas por las estructuras ilegales que delinquen en esos lugares irregulares de tránsito”, destacó el defensor del pueblo, Carlos Camargo Assis.

Ciudadanos venezolanos, ecuatorianos, haitianos y recientemente chinos son los que más intentan realizar esta travesía agravada por las actuales restricciones de ingreso a Estados Unidos impuestas por el gobierno del país norteamericano.