¿El nuevo Fiscal General de la Nación podrá trabajar con autonomía?, analistas opinan

En los pasillos del búnker y de los juzgados suelen referirse a los ‘expedientes chicharrón’ como aquellos de connotación nacional y que se componen de cientos de miles de folios, material de prueba tanto física como documental, dilaciones de las partes y toda suerte de entuertos jurídicos. Algunos de ellos son los que recibirá como herencia Francisco Roberto Barbosa, el nuevo fiscal de los colombianos.

Los más sonados de esta particular categoría en los últimos meses están relacionados con la investigación al abogado Diego Cadena, uno de los defensores del senador Álvaro Uribe, y el esclarecimiento de los asesinatos de los líderes sociales. Pero a estos procesos han de sumarse los escándalos de corrupción Odebrecht y el cartel de la toga, así como los relacionados con el proceso de paz.

Sin importar el caso, lo que más se le pide a Barbosa desde el país político es independencia y autonomía. La petición es en razón a que el nuevo jefe del búnker viene de trabajar en el Palacio de Nariño como asesor presidencial en materia de derechos humanos y es pública su amistad con el mandatario Iván Duque Márquez.

Francisco Bernate, abogado penalista, considera, sin embargo, que no sería acertado cuestionar esta elección hecha por la Corte Suprema de Justicia por la amistad o cercanía con el Jefe de Estado.

“No es problema de inicio sino algo que ha de evaluarse en el proceso de gestión, a la medida que se vayan ejecutoriando los procesos”, añadió.

Barbosa, en su primera visita al búnker al día siguiente de ser ungido como Fiscal, se confesó como “un hombre independiente” y se mostró orgulloso de que su votación haya sido unánime entre los magistrados y que ante esto, según él, ofrecerá “imparcialidad y justicia” y aseguró que “no es un candidato de partido alguno”.

El próximo 18 de febrero, de no ocurrir nada extraordinario, el abogado Diego Javier Cadena se sentará en el banquillo de los acusados. Fue citado por la Fiscalía General para ser imputado de los delitos relacionados con los aparentes pagos que le habría hecho a paramilitares para que entregaran una versión que favoreciera al expresidente Álvaro Uribe Vélez.

Ante esto, y por el origen del nuevo Fiscal, allegado a Iván Duque y a Uribe Vélez, cabe el cuestionamiento de si debe declararse impedido para conocer de las actuaciones que se surtan en este expediente, como en su momento lo hizo Néstor Humberto Martínez con el caso Odebrecht.

Barbosa aseguró que no tiene impedimento de ninguna clase y que por eso, según sus propias palabras, “le dará movilidad a muchos temas”.

El senador Iván Cepeda, por su parte, dice que no es una insensatez pedir desde ahora autonomía en el manejo del máximo ente investigador del país toda vez que Barbosa, primero ha sido funcionario del actual Gobierno y, segundo, ha sostenido una relación de amistad con el actual Presidente.

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En una declaración que levantó polvareda, el fiscal interino Fabio Espitia dijo que en lo corrido del año la oficina de Derechos Humanos de la ONU en Colombia, encargada de manejar las cifras de líderes sociales asesinados, solo ha podido verificar un caso de esta naturaleza.

Al venir Barbosa de la consejería que se encarga de esta materia en Palacio, se dice que puede continuar con esa misma línea en el ente investigador, es decir, que no haya una metodología que permita determinar con la realidad que amerita el caso de los asesinatos de defensores de derechos humanos en el país.

“Su desempeño en la consejería DDHH deja un balance que no es propiamente el mejor”, dice Kenneth Burbano, director del Observatorio Constitucional de la Universidad Libre. El académico plantea una preocupación con la elección de Barbosa como jefe del búnker y explica que esa inquietud radica en que las pesquisas para dar con los responsables de estos hechos se queden en nada.

“Tradicionalmente, la Fiscalía ha demostrado ineficiencia en el esclarecimiento de asesinatos de líderes, que para los defensores de DDHH es sistemático y selectivo. En esa misma lógica de ocultar la realidad ha estado el recién electo, Barbosa. Hay una preocupación enorme, porque el temor es que esas investigaciones no avancen y eso genera incertidumbre”, añade.

El nuevo jefe del búnker aseguró que la Fiscalía ha logrado un esclarecimiento del 53% en homicidios de líderes sociales y dijo que si se comparan con otro tipo de crímenes es un resultado importante. No obstante, no entregó cifras que respaldaran su argumento.

Francisco Barbosa aseguró que luchará contra la criminalidad y la corrupción.

Además, aclaró que el objetivo será enviar un mensaje de equilibrio a los colombianos, además de dejar las pugnas y las polarizaciones.
Aseguró, igualmente, que buscará una cercanía del ente acusador con la Jurisdicción Especial Para la Paz, JEP, para conseguir una relación armónica, y que acompañará al tribunal de paz “en todo lo que se requiera para entender la dinámica del cierre del conflicto en el país”.

Asimismo, dijo que busca imponer un mecanismo relativo a la defensa y prevención de las mujeres y los niños, para esclarecer el ciento por ciento de los feminicidios y actuaciones delictivas contra estas poblaciones.