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Familias indígenas se desplazaron al casco urbano de Totoró, tras fuertes combates entre el Ejército y disidencias de las Farc
Son alrededor de 100 comuneros que se vieron forzados a abandonar su territorio por el conflicto armado que se registra al interior de su resguardo.
Veinticinco familias indígenas se vieron obligadas a salir de sus territorios para después desplazarse hacia el casco urbano del municipio de Totoró, Cauca, a raíz de los intensos combates que se registraron en la zona rural de esta población del oriente del departamento entre el Ejército y disidencias de las Farc.
Como bien informaron representantes comuneros del pueblo totoreño, el pasado miércoles 4 de septiembre los integrantes de este grupo armado al margen de la ley buscaban realizar un retén ilegal en el sector de San Pedro de la vía que comunica este municipio con el departamento de Huila o Transversal de El Libertador.
“Estos sujetos pretendían instalar un retén ilegal sobre una de las vías de este municipio. La reacción de las tropas impidió este propósito criminal, permitiendo la captura de dos integrantes de esta disidencia y la recuperación de un menor de edad, quienes resultaron heridos tras los combates que propiciaron ante los soldados desplegados en esta zona”, informó el Ejército.
A raíz de estos enfrentamientos, que se extendieron por varias horas del día, las familias del resguardo de Totoró, ubicado en el municipio del mismo nombre, se vieron obligadas primero a esconderse en sus viviendas y luego, por el temor a nuevos combates, a salir de su territorio.
“Manifestamos nuestra más profunda indignación y rechazo ante los recientes hechos de violencia que han golpeado nuestro territorio ancestral, particularmente en la vereda San Pedro. Este lamentable suceso no solo convierte nuestro territorio en un campo de batalla, sino que coloca a nuestra comunidad de la parte alta en una situación de confinamiento forzado, restringiendo gravemente su movilidad y poniendo en riesgo su vida y su bienestar”, denunciaron los representantes de esta comunidad ancestral.
Aunque los choques armados terminaron, los pobladores de la zona aún se encuentran temerosos por la presencia de actores armados, especialmente de los integrantes del frente disidente Dagoberto Ramos de las Farc. Estos últimos, además, están en abierta confrontación con guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional, ELN, grupo armado que también llegó a esta zona del oriente caucano.
En contraste con esa denuncia, está la versión del Ejército. Los integrantes de esta institución indicaron que también se logró la incautación de dos fusiles, artefactos explosivos improvisados, municiones de diferentes calibres y material de intendencia. Los tres sujetos capturados quedaron a disposición de las autoridades competentes.
En relación con el menor, se iniciará el proceso de restablecimiento de sus derechos ante el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF, luego de recibir atención médica.
“El despliegue militar que mantiene la Tercera División a través de sus unidades militares continuará en todo el departamento, redoblando esfuerzos junto a la Fuerza Pública y las autoridades regionales en contra del accionar delictivo de grupos armados ilegales en la región”, agregó el Ejército.
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