Se complica la investigación de la muerte del esmeraldero ‘Pedro Aguilar’; los testigos, al parecer, no quieren hablar y la escena del crimen se habría modificado

El pasado 7 de agosto se cometió el asesinato del zar de las esmeraldas, ‘Pedro Aguilar’, quien fue jefe de seguridad del fallecido Víctor Carranza. Lo llamativo del homicidio fue la forma en la que se cometió, ya que es posible que haya actuado un francotirador escondido desde los cerros orientales de Bogotá.

No obstante, ahora las autoridades cuentan con dos grandes desafíos, lo primero es que varios testigos presenciales del hecho se niegan a declarar por temor a represalias. Asimismo, fuentes le confesaron a SEMANA, que Aguilar no tenía la ropa con la que recibió el disparo que lo mató, lo que complica las pesquisas.

Esto ha llevado a levantar un manto de dudas sobre la primera hipótesis que se manejó sobre un posible francotirador ubicado en la espesa vegetación de los cerros oriénteles, a unos 200 metros de la residencia del esmeraldero.

Según el dictamen de Medicina Legal, fue una muerte violenta, de tipo homicidio, con el impacto de arma de fuego como causa principal; sin embargo, no se encontró huellas o rastros que indicaran que el disparo ocurrió a corta distancia.

Cabe resaltar que el proyectil, después de tocar un muro en la entrada de la casa, literalmente atravesó al esmeraldero y terminó en un espejo de la vivienda, por lo cual se asume que se trataba de un arma de gran potencia que disparó el cartucho de 9 mm.

En medio del barrio de la zona, las autoridades encontraron un tendido militar y un trípode de madera improvisado, desde donde se habría disparado.

Según pudo establecer SEMANA, varios testigos presenciales del asesinato han decidido no declarar ante las autoridades, por temor a represalias de los criminales. A esto se le suma que los investigadores establecieron que la ropa con la que fue llevado Aguilar al centro asistencial, no es la misma con la que recibió el disparo.

Esto ha generado ciertas dudas en la claridad de las versiones preliminares y ha entorpecido el proceso investigativo.

De esta manera, un informe que SEMANA conoció detalla el delito y cómo las versiones iniciales no coinciden, por lo que no se descarta que el francotirador tenía ayuda de alguien cercano a Aguilar.

Por ahora, el CTI realizará una recreación del delito, usando como punto de partida la estera y el trípode que fue encontrado. Se espera que con el paso de los días se conocen más detalles de este crimen.