Derecha o al revés, ¿cuál es la forma correcta de meter la ropa a la lavadora?

La forma en que se coloca la ropa en la lavadora puede afectar su durabilidad y apariencia. Por ello, la industria textil se ha encargado de poner instrucciones de lavado en cada prenda, con el fin de que estas perduren mucho tiempo.

Asimismo, debido a las telas, el color, los estampados, las decoraciones y demás, hay algunas indicaciones que recomiendan meter la ropa a la lavadora de un modo específico. Sin embargo, entre algunas personas aún suscita la duda sobre si las prendas se deben poner al derecho o al revés, al momento de lavarlas.

Ante ello, expertos recomiendan lavarla del lado del revés para proteger los tejidos y los colores. Al hacerlo por el derecho, la fricción con otras piezas y el movimiento en la lavadora pueden causar desgaste en la superficie visible de la tela, lo que resulta en la pérdida de color y en fibras más débiles.

Precisamente, debido a la exposición directa al agua y al movimiento de la lavadora, resulta ventajoso lavar la ropa al revés, para proteger los colores.

Esta técnica también ayuda a proteger los tejidos delicados de la fricción excesiva, lo que puede resultar en menos desgaste y una vida útil más prolongada de la prenda.

Entre otras cosas, los expertos recomiendan clasificar la ropa antes de introducirla a la lavadora, es decir, separarla por colores y tipos de tejidos, para evitar posibles daños.

Además, es indispensable no sobrecargar la lavadora, ya que esto puede dificultar que las prendas se laven correctamente y aumentar el riesgo de arrugas permanentes.

Finalmente, se recomienda también utilizar la temperatura de agua recomendada para cada tipo de tejido y nivel de suciedad de la ropa.

Aunque puede haber excepciones dependiendo del tipo de tejido y la suciedad de la prenda, en general lavar la ropa del lado del revés es una práctica recomendada por los expertos para preservar la calidad y la apariencia de las prendas.

Al seguir este consejo y adoptar buenas prácticas de lavado, se puede prolongar la vida útil de la ropa y mantenerla en óptimas condiciones por más tiempo.