El truco que no conocía para afilar las cuchillas de la licuadora para que queden como nuevas

En todos los hogares, los electrodomésticos se han convertido en uno de los elementos más importantes e indispensables, ya que ayudan a que las tareas domésticas sean más fáciles de llevar a cabo y hace más flexible el tiempo de cada una de las personas. Uno de ellos es la licuadora, la cual permite mejorar el trabajo en la cocina del procesamiento de alimentos y bebidas, debido a su potencia del motor y del vaso de preparación.

Por lo general, estos electrodomésticos siempre tienen un vaso de vidrio o plástico, un motor eléctrico y unas aspas o cuchillas en forma de hélice que se encargan de triturar los alimentos.

A pesar de que en el mercado se puede encontrar una amplia variedad de licuadoras que varían en estilo, precio y tamaño, es importante tener en cuenta ciertos cuidados para prolongar su vida útil y así tener que evitar un gasto de dinero comprando una nueva.

Y es que con el transcurrir del tiempo, la máquina puede presentar fallas, especialmente al triturar alimentos, dado que las aspas pueden desgastarse y perder fuerza. Cuando esto sucede, las personas por lo general proceden a comprar una nueva cuchilla para reemplazar el elemento, pero esto no es necesario debido a que existe un método efectivo para afilarlas y hacer que funcionen como si fueran totalmente nuevas.

Paso a paso para afilar las cuchillas de la licuadora sin dañarla

Estos son los pasos para afilar las cuchillas y evitar lastimarlas o dañarlas:

1. Desmontar la licuadora: Para empezar se debe dar una buena limpieza a la licuadora. Para ello, desenchúfela y desmonte cada una de sus partes. Es importante retirar el cable de la toma para evitar accidentes graves. Una vez hecho esto, retire el vaso con cuidado para evitar cortarse.

2. Lavar las partes: Limpie cada una de las partes de la licuadora, eliminando cualquier residuo de comida atrapado entre las cuchillas. Asegúrese de que todo quede muy desinfectado, sobre todo en las grietas más pequeñas y espacios estrechos de la parte inferior. Maneje las aspas con precaución, porque que son filosas y pueden generar daños al retirar las hojas que se sostienen en la base.

3. Afile las cuchillas: Una vez asegurado que todo está completamente limpio, especialmente las cuchillas, afílelas con una piedra, un método tradicional usado para cuchillas, cuchillos, tijeras y otros. Tenga cuidado y mantenga la piedra lejos de su cuerpo. Afile por ambos lados para mejores resultados y, al final, lave de nuevo las cuchillas para retirar el exceso de material.

4. Usar cáscaras de huevo: Otra alternativa es afilar las cuchillas con cáscaras de huevo, dándoles un segundo uso. De acuerdo con el portal web Enséñame Ciencia, debe volver a montar la licuadora y verificar que ninguna pieza quede suelta. Introduzca un puñado de cáscaras de huevo dentro del vaso, cubriéndolas con agua. Tape y prenda la licuadora a alta velocidad alrededor de un minuto hasta que las cáscaras queden hechas polvo. Posteriormente, apague y retire el vaso para botar la mezcla. Si lo desea, puede echarla en sus plantas como abono.