Cómo hacer
La especia que se puede poner en el champú para acelerar el crecimiento del cabello
Esta hierba aromática es utilizada desde hace años en el mundo gastronómico.
Mantener un cabello saludable requiere de dedicación teniendo en cuenta que, a diario, son muchos factores los que pueden hacer que sufra daño. Entre estos están los efectos por la radiación UV, el viento, el agua del mar o el calor de los secadores y planchas que se utilizan para peinar y moldear el cabello. Aunque para evitar todo esto, existe una especia que ayuda a fortalecerlo y a que su crecimiento sea más evidente.
Se trata del clavo con olor. Esta hierba aromática es utilizada desde hace años en el mundo gastronómico. Gracias a su potente olor y sabor, se usa como una hierba aromática para condimentar toda clase de platos. Además, es parte de los ingredientes para preparar diferentes bebidas orientales, como el té chai.
Esta especia tiene varias propiedades que ayudan a mantener el cabello más suave, fuerte e hidratado y sobre todo evitar su caída, pues esta hierba obtiene vitaminas A, C, D, E, y minerales como el magnesio y el potasio.
¿Cómo preparar el clavo de olor para el cabello?
- Debe tener a la mano un par de clavos de olor, un poco de canela y dos tazas de agua.
- Busqué una olla y agregue todos los ingredientes a hervir por 10 minutos.
- Déjelo enfriar.
- Luego, de estar completamente frío, coloqué el líquido en un rociador.
- Colóquelo en el champú y agréguelo en la raíz del cabello.
- Lo ideal es dejarlo actuar durante toda la noche.
- Se enjuaga normalmente.
Es recomendable que lo use tres veces por semana para que comience a notar la diferencia. Es importante que tenga en cuenta que el proceso es lento, pero efectivo.
Consejos más frecuentes para el cuidado del cabello
¿Cada cuánto se debe lavar el pelo?
El cabello hay que lavarlo siempre que esté sucio. No pasa nada por lavarlo a diario, si se usan productos de cuidado frecuente y adecuados al tipo de cabello. La frecuencia del lavado depende, sobre todo, del tipo de cabello y del cuero cabelludo.
Si el cuero cabelludo es graso, se puede lavar a diario, porque dejar la grasa es más perjudicial. En cambio, si el cuero cabelludo es seco o sensible, es preferible espaciar los lavados. Además, la frecuencia de lavado también depende del estilo de vida: después de sudar mucho, tras bañarse en la piscina o en el mar, o si se utilizan productos de fijación como ceras, gominas, lacas; en este caso, hay que lavar el pelo siempre.
¿Sirve cualquier tipo de champú?
No, hay que elegir el mejor champú para cada persona, teniendo en cuenta tanto el cuero cabelludo como el cabello. El cuero cabelludo puede ser graso, seco o sensible. El cabello, en cambio, puede ser seco o muy seco, teñido, decolorado, canoso, fino y sin volumen, ondulado, rizado o normal.
Es recomendable lavar el cuero cabelludo con un champú específico, si se tiene alguno de los problemas indicados, y después elegir otro para el cabello, según sus características. El cabello no se frota, se lava suavemente masajeando con los dedos, y se enjuaga con agua tibia o fría.
¿Es mejor el acondicionador o la mascarilla?
Son productos diferentes. El acondicionador ayuda a desenredar el cabello. Hay diferentes tipos, algunos hay que eliminarlos con agua, otros, en cambio, no necesitan aclarado, y son muy prácticos para los cabellos que se enredan mucho, que suelen ser los que son muy finos, y los rizados. El acondicionador se aplica después del champú y no necesita tiempo de reposo.
La mascarilla, en cambio, es el producto que aporta hidratación y nutrición y necesita un tiempo de reposo (como mínimo entre 2 y 5 minutos), para que haga efecto. Se recomienda 1 o 2 veces a la semana. Esta es ideal para los cabellos secos, teñidos, rizados y frágiles.
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