¿Qué tan necesaria es la tercera dosis de vacuna contra el covid-19?

Pese a que Colombia aún no ha aprobado la tercera dosis en las vacunas contra el covid-19, este debate científico empieza a cobrar cada vez más vigencia por otros países que ya han dado su ‘visto bueno’, como Estados Unidos esta semana, pero también países latinoamericanos como Uruguay y Chile.

Para Leonardo Arregocés, director de Medicamentos y Tecnologías en Salud de Minsalud, estudios científicos a nivel internacional han demostrado que la inmunidad que otorga la vacuna podría durar máximo un año, dependiendo de la edad y población a la que pertenezca el beneficiado. Esto no significa que el biológico no sea efectivo: todo lo contrario, pues ha logrado reducir los niveles de ocupación de UCI y muertes de adultos mayores.

Sin embargo, algunos científicos dan a entender que la tercera dosis se podría convertir en una necesidad a futuro, pese a las recientes dudas manifestadas por la Organización Mundial de la Salud, OMS.

“Los estudios muestran que hay una asociación entre la edad y qué tan rápido bajan los anticuerpos. Las personas de edad - adultos mayores- pierden esa protección más rápido que los jóvenes. Lo mismo sucede con quienes han recibido trasplantes, tratamientos de cáncer o necesitan tratamientos de inmunosupresión”, aseguró Arregocés.

Frente a las dudas y mitos que se han dicho alrededor de la tercera dosis, El País realizó esta guía’ luego de reunir voces de expertos y reconocidas entidades de salud.

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¿Por qué una tercera dosis?
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Pese a que hay no hay un consenso mundial sobre el tema, el Centro de Prevención y Control de Enfermedades y Agencia de Medicamentos de Estados Unidos (FDA) dio una explicación el pasado miércoles: “Los datos disponibles muestran claramente que la protección contra la infección por Sars-CoV-2 comienza a declinar con el tiempo después de las primeras dosis de la vacuna”.

Las dos entidades agregaron: “Sumado al predominio de la variante Delta, estamos comenzando a ver evidencia de una protección reducida contra los casos leves y moderados de la enfermedad”. Por ende, los estadounidenses que recibieron los antídotos Pfizer y Moderna podrán recibir desde el 20 de septiembre una tercera dosis o bien luego de ocho meses después de la segunda dosis.

¿Qué países han dado su ‘visto bueno’ a esta decisión?
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Además de EE. UU., hasta la fecha un total de 13 países aprobaron el uso de la tercera dosis en su población: Israel, Alemania, Reino Unido, Austria, Serbia, Francia, Rusia, Chile, Uruguay, República Dominicana, Turquía, Emiratos Árabes Unidos y Bahréin.

¿Qué poblaciones han sido priorizadas en esos países?
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Aunque hay países como Rusia o EE. UU. que ya aprobaron el tercer ‘pinchazo’ sin barreras, el resto se ha concentrado en los más vulnerables. Por ejemplo, en Europa el refuerzo estará destinado a mayores entre 50 y 80 años, según cada país. En cambio, Chile dio ‘luz verde’ a los mayores de 55 años y República Dominicana, a los trabajadores de la salud.

¿Por qué la OMS ha cuestionado la decisión de estos países?
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Para la máxima entidad de salud, es más importante cubrir las coberturas de las poblaciones más vulnerables con el esquema convencional antes de proporcionar una tercera dosis de manera generalizada en países con mayor poder adquisitivo. “Me interesaría mucho saber más sobre los planes para esto que estamos recomendando a nivel global. Me refiero a que se trata de una pandemia global y tenemos que pensar en soluciones globales”, aseveró la líder técnica de la OMS, Maria van Kerkhove.

¿Es necesario suministrar la tercera dosis en Colombia?
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Para Lyda Osorio, epidemióloga de la Universidad del Valle, esto todavía no es una prioridad, en especial si cada tanto se presenta escasez de biológico en el Valle del Cauca y otras regiones del país.

“Las cantidad de vacunas actuales aún son insuficientes para lograr las coberturas de vacunación que se necesitan no solo en Colombia sino en el mundo. Es posible que si se requiera en algunos grupos específicos como inmunosuprimidos y adultos mayores que no hayan generado una adecuada respuesta inmune”, anotó.

Por su parte, Arregocés señaló que en el caso hipotético de nuestro país, los mayores de 60 años serían los primeros en recibir la tercera dosis. “¿Cuándo empezar a vacunarlos? Es una respuesta más difícil. Todo indica que seis meses después de la última dosis tiene un beneficio mayor que si se aplica antes”.

El retraso en los suministros de vacunas se ha convertido en uno de los mayores argumentos para investigar combinaciones en biológicos de diferentes farmacéuticas.

La Universidad de Oxford fue la primera en indagar en esta cuestión tras estudiar los efectos de combinar una primera dosis de AstraZeneca con una segunda de Pfizer en 850 voluntarios mayores de 50 años. En junio de este año fueron publicados los resultados, los cuales afirmaron que la segunda dosis generaba más anticuerpos y células T (las células inmunes que matan patógenos) en vez de aplicar dos dosis de AstraZeneca.

Para Pío López, director del Centro de Infectología Pediátrica de Cali, “lo ideal es que en estos momentos se completen los esquemas tal como están establecidos, pero también hay que pensar en momentos de escasez de biológico, por lo que podría hacerse la intercambiabilidad”.

Alemania ya ha sido uno de los primeros países en aplicar esta medida, empezando con AstraZeneca y luego con segunda dosis de Pfizer o Moderna.

Una tercera dosis en Sinovac o incluso una segunda en Janssen son otros biológicos que también hacen parte del debate de que la vacuna cuente con refuerzos.