Visitarán unidades residenciales para verificar protocolos de bioseguridad

Con el fin de verificar la implementación de los protocolos de bioseguridad dispuestos en las unidades residenciales para contener la propagación del coronavirus, un grupo operativo de la Alcaldía de Cali empezará a visitar desde hoy diferentes condominios de la ciudad.

Según aseguró Jimmy Dranguet, subsecretario de Inspección, Vigilancia y Control Municipal, en esa dependencia se vienen recibiendo múltiples quejas relacionadas con el incumplimiento de las normas estipuladas para el sector inmobiliario en la Resolución 890 del 3 de junio de 2020.

Las violaciones van desde permitir que las personas usen las piscinas y zonas húmedas como turcos, saunas o jacuzzis hasta autorizar que en los espacios comunes y salones sociales se realicen fiestas, asambleas y reuniones.

“Además, hay algunas unidades residenciales que no tienen medidas de desinfección para los residentes y visitantes y en ellas tampoco se le está tomando la temperatura a las personas que ingresan. También hemos recibido denuncias de contratistas que están haciendo trabajos en estos lugares sin tener el pasaporte sanitario”, dijo Dranguet.

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El funcionario resaltó que las visitas que se harán “no son de carácter sancionatorio, sino más bien de tipo pedagógico”, pues con ellas se busca llevar la estrategia de ‘Guardianes de Vida’ a las propiedades horizontales e invitar al personal de vigilancia, administradores e integrantes de los concejos de administración para que asuman el rol de proteger a la comunidad.

“Sin embargo, si vemos la infracción, pues aplicaremos una sanción por el Código de Policía que vale $936.00. Este comparendo se le impondría al administrador o al representante legal de la propiedad horizontal”, indicó Dranguet.

El subsecretario de Inspección, Vigilancia y Control Municipal añadió que se comenzará visitando conjuntos cerrados en sectores del sur de la ciudad como Valle del Lili y Bochalema, así como “grandes condominios” tales como Pacará y la Unidad Residencial Santiago de Cali, que son algunas de las urbanizaciones de las que se han recibido quejas.

“No alcanzamos a ir a las más de 3000 unidades residenciales que hay en la capital del Valle, porque en estos tiempos de pandemia también tenemos otros frentes de trabajo como lo son la verificación de los protocolos de bioseguridad de las empresas que se han reactivado económicamente, el control del pico y cédula, del toque de queda, de la indisciplina social y, próximamente, el de la reglamentación con la que abrirán los restaurantes y gimnasios”, precisó Dranguet.

Se estima que en Cali una población de 1,2 millones personas reside en unos 3500 conjuntos multifamiliares en calidad de propietarios o arrendatarios.

Se estima que hoy el 70 % de las unidades residenciales no cuenta con sistemas de gestión de salud y seguridad, conforme al Decreto 1072 del 2015, para el manejo de situaciones como la actual pandemia por Covid.

La infectóloga María Virginia Villegas indicó que el principal mecanismo para reducir el riesgo de contraer el Covid-19 en las unidades residenciales es guardar un distanciamiento físico de dos metros.

“A los porteros también se les debe garantizar que puedan conservar esta distancia con las personas que entran a los conjuntos cerrados para que, en el caso de que estén infectadas, no los vayan a contagiar”, dijo Villegas.

La médica también subrayó que quienes viven en unidades residenciales también deben cuidarse de entrar a sus casas o apartamentos a familiares, trabajadores, clientes o cualquier persona con las que no puedan garantizar el distanciamiento físico de dos metros.

Asimismo, aseguró que otra forma clave de evitar el contagio del covid es disponer de jabón, alcohol o geles antibacteriales en los lugares de ingreso a los conjuntos cerrados para que las personas se puedan lavar o desinfectar las manos.

“No sirve que te echen alcohol en la ropa, porque mientras usted no frote el producto -o el jabón- en sus manos, este no le va a matar el virus. Recuerde que las manos son las que usted se las lleva a la boca, a los ojos o la nariz. Por otra parte, no hay una evidencia científica de que las alfombras y tapetes desinfectantes sirvan, porque uno no se mantiene tocando los zapatos”, señaló.

Finalmente, Jimmy Dranguet aseveró que otro elemento importante que se debe tener en cuenta es que todas las personas que entren o salgan de las unidades residenciales debe usar el tapabocas. “El visitante no puede entrar si no tiene el tapabocas. Es más, hasta se le puede prohibir el ingreso al mismo residente porque estaría poniendo en riesgo a las personas de la comunidad”.

Recuerde que en las unidades residenciales el uso de zonas comunes como piscinas, gimnasios y salones sociales está prohíbido.

“Las canchas se pueden usar en los horarios permitidos para hacer ejercicio, pero no para practicar deporte en grupo”, dijo Jimmy Dranguet.

3128338914 es la línea de atención al ciudadano en la que se pueden poner quejas hacer y consultas referentes a los protocolos de bioseguridad en unidades residenciales.