El impacto del consumo masivo en las dinámicas económicas del Valle del Cauca

Ir al supermercado y comprar los productos de cuidado personal o acudir a la plaza de mercado y adquirir frutas, verduras y alimentos en general son actividades que en nuestra cotidianidad no podemos obviar y que, al hacerlas, generan una dinámica de consumo que dinamiza y mueve todos los días la economía de miles de familias de la región.

Los productos y servicios que las personas necesitamos a diario tienen detrás una gran cadena logística y de producción que genera millones de empleos en el país. El consumo masivo, conformado por empresas de diferentes sectores industriales y agropecuarios, es de los que más aporta a las cifras económicas, debido a que los productos de este tipo son de alta demanda y requeridos por todos los estratos de la sociedad.

Según cifras del Reporte de Coyuntura Económica del año 2020 de la Gobernación del Valle, el comercio es el sector de mayor participación en el PIB departamental, con el 17.01%. Este sector está compuesto por actividades de ventas al por mayor y al menor y concentra el 30,6% del total de la población ocupada en el departamento. Además, es el que más crecimiento ha presentado, con una variación del 15.4% anual, de acuerdo con los datos de la Cámara de Comercio de Cali.

Por otro lado, tal como lo indica el DANE, en el sector de los alimentos el ingreso de estos productos a las centrales de abasto del suroccidente del país en el primer trimestre del 2021 presentó un aumento de 4,5%, frente al 2,9% registrado en igual periodo del año anterior cuando comenzó la pandemia. La región absorbió 186.466 toneladas de productos primarios de origen agropecuario, dominados por el grupo de tubérculos, raíces y plátanos que representó el 38,2% de los alimentos de la región.

La coyuntura vivida desde el inicio de la pandemia en el año 2020 afectó el comportamiento de todos los sectores de la economía, incluido el del consumo masivo. Sin embargo, este último fue el menos impactado, debido a que no podía frenar su producción y logística para garantizar el abastecimiento de todas las personas.

Más de 20 meses después del inicio de las primeras cuarentenas, la mayoría de negocios han podido reabrir sus puertas e ir aumentando progresivamente sus aforos, lo que ha permitido llegar a una mayor normalidad del consumo y empleo en la actualidad.

En el primer trimestre de este año se tuvo un incremento del 7,8% en la cantidad de personas ocupadas en el comercio de Cali. Además, también se impulsaron actividades como la industria, transporte y agropecuarias, esta última con un crecimiento del 45,6%, según cifras del Boletín Económico Regional del Banco de la República.

Hoy, es momento de que todos sigamos aportando al crecimiento y reactivación económica, fortaleciendo nuestras dinámicas de consumo en los diferentes sectores que dinamizan una

gran cadena logística y de producción que mueve miles de empleos y aporta al progreso de la región.