La máquina de escribir de Andrés Caicedo y 36 libros suyos no reposarán más en Cali

En la tarde de este viernes, la máquina de escribir de Andrés Caicedo y 36 libros que le pertenecieron, objetos invaluables para la cultura caleña, los cuales habían sido donados a la Biblioteca del Centenario para su conservación, estudio y exhibición, fueron retirados de la institución por Rosario Caicedo, hermana del escritor y una de sus herederas, debido al estado en que se encontraban.

“Regresé de nuevo a la biblioteca de El Centenario a recoger la donación que obsequié hace ya más de un año. ¿Por qué? Porque la administración municipal de esta ciudad, es decir la alcaldía con todos sus títulos y oficinas, no tuvo interés en protegerla en forma apropiada. Ninguno”, publicó en su cuenta de Facebook, Rosario Caicedo, confirmando que tenía en su poder los objetos del escritor.

Cabe recordar que el 20 de febrero de 2022, la Secretaría de Cultura de Cali anunció que tenía en su poder la máquina de escribir y los libros de la biblioteca personal de Andrés Caicedo, donados precisamente por Rosario Caicedo a partir de una gestión realizada desde la Subsecretaría de Patrimonio, Bibliotecas e Infraestructura Cultural.

“Este archivo pasará a formar parte de la colección juvenil que se encuentra en la sala La Retreta, donde propios y turistas podrán disfrutar de los títulos de este escritor prolífico, quien en diez años de trabajo creativo dejó una gran obra que incluye cuentos, guiones, poemas y numerosos artículos sobre cine en diferentes periódicos de la ciudad”, informó la publicación oficial de la Secretaría de Cultura.

Al respecto, la hermana del escritor, afirmó que “nunca estuve de acuerdo con que se incluyera en la colección juvenil, la obra de Andrés Caicedo es para todos los públicos, me parece una simplificación de su literatura”.

Pero este no fue el problema de fondo para que decidiera recoger el legado de su hermano.

Como manifestó en la publicación de su perfil de Facebook, su donación “tenía unas condiciones simples y claras: proteger la máquina y los libros, exhibirlos en forma permanente, crear un espacio central con la máquina de escribir donde se exhibieran los 36 libros y afiches que yo había donado… Nada del otro mundo. Simplemente un cuidado y un respeto hacia el legado de un escritor. ¿Y qué me encuentro? Que la máquina está en un cuarto con llave —el cuarto de libros antiguos— en una urna no asegurada, que los libros están también sin protección, y que la razón principal de todo esto es que ‘no hay presupuesto’. Más de un año sin presupuesto en una administración municipal que se gastará $46 mil millones de pesos en la iluminación navideña. Pan y circo”.

Por estas razones, Rosario Caicedo, también escritora, en el transcurso de su visita a Cali esta semana para presentar el documental ‘Balada para niños muertos’ que el director Jorge Navas realizó sobre Andrés Caicedo, decidió visitar la Biblioteca del Centenario para comprobar si sus condiciones se habían llevado a cabo, y al comprobar que esto no había pasado, “fue muy triste para mí tener que sacar la máquina y los 36 libros, pero no podía dejarlos para que se deterioraran y se perdiera parte del legado de un escritor. Ante todas las personas que estaban presentes se realizó un acta de retiro que yo firmé”.

Sobre el lugar donde se encuentran ahora los objetos, Rosario Caicedo aseguró que están en un lugar seguro y cuidados, “estoy en conversaciones con otra entidad que tiene voluntad para recibir, conservar y hacer una curaduría sobre el archivo de Andrés Caicedo y que sean material de investigación y de consulta”.

“Yo no estoy criticando a una persona individual, critico a la Alcaldía de Cali, a un sistema que no le importa el legado literario de uno de sus mayores escritores, me parece muy triste que no sea Cali el destino del archivo de Andrés Caicedo”, agregó.