Miércoles de Ceniza 2025: ¿es pecado borrarse la cruz de la frente? Lo que dice la Biblia al respecto

Durante el Miércoles de Ceniza, primer día de la cuaresma católica, los fieles acuden a las diferentes iglesias para recibir la imposición de la cruz, un ritual en el que un sacerdote, o su representante, dibuja una cruz de ceniza en la frente de las personas, mientras repite los versículos bíblicos: “Recuerda que polvo eres y en polvo te convertirás”.

Para el año 2025, el Miércoles de Ceniza se ubicó en el 5 de marzo, por lo que dentro de cuarenta días se celebrará la Semana Santa, que será entre el 13 y 20 de abril.

La cruz de ceniza es un símbolo externo de la mortalidad humana, con el que se invita a la reflexión, la abstención de los placeres mundanos y el arrepentimiento por los pecados cometidos, como una forma de penitencia y preparación para recordar la pasión y resurrección de Cristo en la Semana Santa.

Durante la homilía del Miércoles de Ceniza del año 2023, el Papa Francisco afirmó que “la ceniza nos recuerda quiénes somos y de dónde venimos, nos reconduce a la verdad fundamental de la vida: solo el Señor es Dios y nosotros somos obra de sus manos. (...) Nosotros venimos de la tierra y necesitamos del Cielo, de Él. Con Dios resurgiremos de nuestras cenizas, pero sin Él somos polvo”, expresó el pontífice.

Por lo general, durante este día millones de devotos católicos acuden a las iglesias para cumplir con el ritual de la cruz de ceniza, pero otros tantos no asisten por diferentes razones, desde laborales o porque tienen dificultad para movilizarse. Otras personas, por su parte, habiendo participado del ritual, terminan borrándose la cruz de ceniza, ya sea por decisión o accidente.

En estas circunstancias, surge la pregunta de si no realizarse o incluso borrarse la cruz de ceniza pueden considerarse pecados. Al respecto, vale recordar que el ritual del Miércoles de Ceniza no aparece descrito en la Biblia, sino que es creado durante la Edad Media por la Iglesia Católica, basándose en algunas referencias de la simbología que tiene la ceniza en pasajes bíblicos.

Por ejemplo, Génesis 3:19: “Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres y al polvo volverás”. Job 42:6: “Por tanto, me aborrezco y me arrepiento en polvo y ceniza”. Mateo 11:21: “¡Ay de ti, Corazón! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en vosotras, hace tiempo que en cilicio y en ceniza se habrían arrepentido”.

En tanto que la cruz de ceniza es una señal externa de la disposición de las personas al arrepentimiento y la penitencia, no constituye un sacramento, ni una obligación del católico. De hecho, algunos miembros de la iglesia han afirmado que lo importante del ritual no es la apariencia, sino el convencimiento y la actitud de las personas hacia la reflexión espiritual.

Salvador Barba, sacerdote de la Arquidiócesis de México, en entrevista con el medio Desde la Fe, manifestó que lo recomendable es dejar que la cruz se vaya borrando sola, “si se borra pronto no importa, pues lo que sirve es saber que el signo representa una intención interior de cambio”.