¿Qué significa la palabra Halloween según la Biblia?

Halloween, también conocido como el Día de Brujas, es una celebración que ha ganado popularidad en todo el mundo, pero su origen y simbolismo a menudo generan preguntas y controversias. Desde una perspectiva bíblica, muchos se cuestionan si esta festividad está en línea con los valores y principios cristianos.

En este artículo, podrá explorar qué significa la palabra Halloween desde la Biblia y cómo esta festividad se ha alejado de las enseñanzas religiosas.

¿Cuál es el significado de la palabra Halloween?

La palabra Halloween tiene sus raíces en la expresión inglesa “All Hallow’s Eve”, que traducida al español significa “Víspera de Todos los Santos”. Originalmente, esta celebración tenía vínculos con el final de la temporada de cosechas y las tradiciones de los celtas en Irlanda. Con el tiempo, se trasladó al Reino Unido y, desde allí, se extendió a los Estados Unidos y, más tarde, a Latinoamérica.

Símbolos y tradiciones de Halloween

Halloween está lleno de símbolos y tradiciones, algunos de los cuales tienen raíces antiguas. Las calabazas con expresiones malévolas y una luz en su interior, las brujas, los gatos negros, los fantasmas, las calaveras y los disfraces son elementos comunes en esta festividad. Además, la decoración tiende a ser tenebrosa, con velas, telas de araña, murciélagos, búhos y espantapájaros.

La razón principal detrás de la utilización de estos símbolos de terror es la creencia de que protegen a las personas de los espíritus malignos que se cree que visitan el mundo de los vivos durante esta época. Sin embargo, desde una perspectiva bíblica, estas prácticas pueden generar inquietudes.

¿Qué significa Halloween según la Biblia?

Cuando se busca la palabra “Halloween” en la Biblia, no se encuentra ninguna referencia directa a esta festividad. Esto se debe a que Halloween es una celebración pagana que existía mucho antes de la aparición del cristianismo y no forma parte de las festividades religiosas cristianas.

El Halloween se asocia en el imaginario cristiano a prácticas que la Biblia condena. La adivinación, la invocación a los muertos, los rituales satánicos y la hechicería son prácticas que se mencionan en la Biblia y que son claramente desaprobadas. Por ejemplo, en Deuteronomio 18: 10-12, se establece:

“No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos. Porque es abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas abominaciones Jehová tu Dios echa estas naciones de delante de ti”.

Esta condena de prácticas ocultas y paganas se encuentra en consonancia con las enseñanzas cristianas de evitar la idolatría y el contacto con fuerzas espirituales malignas. La celebración de Halloween, que a menudo involucra la representación de brujas, fantasmas y actividades relacionadas con la magia negra, puede entrar en conflicto con estos principios.

La advertencia de la Biblia relacionada con Halloween

En Gálatas 5: 19-21, la Biblia advierte sobre las obras de la carne, que incluyen hechicerías y prácticas similares:

“Y manifiestas son las obras de la carne, que son adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios”.

Desde esta perspectiva, se considera que la celebración de Halloween, que a menudo involucra disfraces que representan elementos asociados con la hechicería y lo oculto, va en contra de los valores y principios cristianos, y se desaconseja firmemente a quienes buscan vivir conforme a la fe cristiana.

En última instancia, la elección de participar en Halloween o no es personal y depende de las creencias y valores individuales. Algunos optan por abstenerse de la festividad debido a sus connotaciones paganas y potencialmente anticristianas, mientras que otros la ven como una oportunidad de diversión y disfrute sin implicaciones religiosas.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.