ATLÉTICO NACIONAL
Las barras bravas vuelven a poner en problemas al Atlético Nacional y la Alcaldía de Medellín
El fútbol colombiano se sigue rasgando las vestiduras por los bochornosos hechos sucedidos el domingo dentro del estadio Atanasio Girardot de Medellín.
El fútbol colombiano se sigue rasgando las vestiduras por los bochornosos hechos sucedidos el domingo dentro del estadio Atanasio Girardot de Medellín, previo al duelo entre Nacional y América por la fecha 14.
Los disturbios protagonizados por la barra más radical de Nacional, que ameritó la intervención de la Policía y que obligó al aplazamiento del juego, provocó reacciones, incluso del Gobierno, pero también del fútbol nacional, rechazando lo sucedido.
El detonante, según se conoció el mismo domingo, fue la decisión de Nacional de quitarles todos los beneficios (boletas y dinero) que siempre le daba a Los del Sur, la barra más recalcitrante.
Estos, de acuerdo con audios que reveló ayer la prensa, como represalia acordaron protagonizar desmanes al interior del estadio y sabotear así el inicio del partido.
Entre tanto, en lugar de enfriarse los ánimos, ayer se presentó un 'rifirrafe' entre el Alcalde de Medellín, Daniel Quintero, y el presidente de Nacional, Mauricio Navarro, por las responsabilidades de lo ocurrido.
Quintero aseguró que no le prestaría más el estadio al equipo verde, en tanto que Navarro respondió diciendo que jugarían en el exterior en caso de ser necesario.
Mientras los ánimos seguían caldeados, Dimayor y clubes respaldaron a Nacional en su propósito de desterrar a los violentos del fútbol, entendiendo que esta situación se podría presentar en otras plazas.
Por su parte, el Ministerio del Interior convocó para el próximo 27 de abril a la Comisión Nacional de Seguridad, Comodidad y Convivencia en el Fútbol, con el fin de trazar rutas, encontrar soluciones y tomar medidas sobre lo acontecido.
“Desde el Ministerio del Interior rechazamos, enérgica y contundentemente, cualquier tipo de violencia en el fútbol”, señaló el viceministro general, Gustavo García.
Fútbol, unido por una causa: no a los violentos
Erradicar a los violentos de los estadios para que no se presenten hechos como los del domingo en Medellín pidió el fútbol colombiano en cabeza de la Dimayor y dirigentes.
“Es inaceptable que se responsabilice a los clubes del fútbol profesional y a sus dirigentes por el actuar de vándalos que, por portar una camiseta, no representan los valores de una institución, ni poseen vinculación alguna con la misma”, dijo la Dimayor a través de un comunicado.
Agregó la entidad que organiza la Liga colombiana que “Admitir que los clubes deben ceder ante las manifestaciones de los violentos y permitir que incidan ilegítimamente para beneficio particular en las decisiones administrativas de un club profesional, sobre la base del temor, sería desconocer los fundamentos de nuestra Constitución Política y coadyuvar incluso en la realización de conductas que se catalogan con incidencia penal”.
Por su parte, Tulio Gómez, máximo accionista del América, señaló que hay que impedir el avance de las llamadas barras bravas en el fútbol.
“Debe haber mano dura contra los violentos, hay que sacarlos del fútbol porque lo están acabando. Por eso nos solidarizamos con Nacional, las instituciones se respetan y el partido lo vamos a jugar en la fecha que determine la Dimayor; no vamos a pedir los puntos en el escritorio como sugirieron algunos”, dijo el directivo del cuadro escarlata.
¿Todo planeado?
Unos audios de conversaciones entre hinchas de Los del Sur, revelados ayer por la prensa, indican que los desmanes que se produjeron en el estadio estaban debidamente acordados entre ellos.
En uno de los audios uno de los barristas dice: “salió ese cucho Benjamín (presidente de Nacional) y dijo que las cortesías de local ya no se van a dar más; básicamente cortaron todo con la barra, por eso Felipe Muñoz dijo que todo bien y la verdad es que nos están midiendo el aceite, entonces la orden es buscarles boletas a los que no tienen y la barra se va a ubicar en la parte baja, porque la idea es que uno solo tenga que tirarse a la cancha; vamos a llevar trapos de Coca Cola para eliminar a Postobón. Vamos a iniciar una guerra contra Nacional y sus dirigentes”.
Se escucha también en el audio cuando otro aficionado dice que si hay que enfrentar a la Policía, lo harán.
“Si nos toca meternos a la hp y agarrarnos con los ‘tombos’, lo vamos a hacer; tenemos autorización de todo, de cascar a los directivos o a los que nos encontremos, vamos a estar a lo barra brava de hace muchos años”.
En otro audio cuentan que estaban robando en un carro. “Hay luz verde para ir a robar la tienda y todo lo que quieran, la idea es tomarse todo el estadio hasta las vallas, porque le quitaron las boletas a la banda, logística a los de los trapos, y por eso vamos a meter presión y si perdemos la gente va y se mete en preferencia. En Conmebol la idea es tirar una bengala o alzar el trapo para que lo sancionen económicamente. Felipe dijo que se va a meter a preferencia a cascar a ese man y que quien lo quiera seguir, bienvenido”.
Una hora antes del compromiso, que estaba pactado para las 6:20 de la tarde, comenzaron los desórdenes en el sector sur de Atanasio.
Tan acalorada estaba la situación que fue necesario el ingreso del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) para controlar la protesta. En ese momento ya hinchas de la barra del Sur estaban en la gramilla.
Duro choque entre la Alcaldía y Nacional
Dos trinos del Alcalde de Medellín, uno el domingo después de los incidentes, y otro ayer pasadas unas horas de los hechos violentos, calentaron los ánimos con la dirigencia de Nacional.
El domingo, el Alcalde dijo: “No le prestaré más el estadio a Nacional hasta que no se acuerden condiciones mínimas de seguridad entre barra y directivas, y la vigilancia sea pagada por el equipo”.
El presidente de Nacional, Mauricio Navarro, respondió diciendo que “tenemos propuestas para jugar en Villavicencio, Cartagena y Pereira, y si es de jugar en el exterior, lo hacemos”.
Quintero no se quedó callado y dijo: “Si el presidente de Nacional cree que me va a tratar a mí como trata a sus hinchas, está muy equivocado. 1000 millones en daños, 89 heridos, 800 policías por partido y todavía tiene la conchudez de amenazar a la Alcaldía. No me conoce”.
Nacional ripostó con un claro mensaje: “Que el Alcalde saque el comunicado diciendo que expulsa a Nacional de Medellín”.
Ese choque ya produjo la primera reacción: no le prestarán el estadio a Nacional para su partido del jueves por Copa, ante Melgar de Perú.
Regístrate gratis a nuestro boletín de noticias
Recibe todos los días en tu correo electrónico contenido relevante para iniciar la jornada. ¡Hazlo ahora y mantente al día con la mejor información digital!