Grandes deportistas que perdieron la partida con la justicia

Algunos deportistas famosos, la mayoría inmersos en vidas de película, en medio de lujos y dinero, a veces olvidan que ante la justicia no tienen ‘corona’ y deben responder como cualquier otro ciudadano.

La situación de Ronaldinho, actualmente acogido por prisión domiciliaria en Paraguay y quien afrontará un juicio que le puede acarrear varios años privado de la libertad, invita a recordar los casos más sonados.

‘Dinho’ apenas empieza a librar la batalla, pero hay otros quienes sí la perdieron.

Uno de los casos más recordados de la historia reciente es el del ala cerrada de los New England Patriots de la NFL Aaron Hernández.
Hernández fue acusado de homicidio calificado contra quien fuera su amigo Odin Lloyd.

Finalmente, Aarón fue condenado a cadena perpetua y en 2017 se suicidó en una prisión de Massachussets.
Su caso inspiró una serie documental en Netflix.

Además de Hernández, El País recuerda otros famosos atletas que han perdido la batalla con la justicia.

Un juez de Paraguay concedió prisión domiciliaria al exastro brasileño del fútbol Ronaldinho, quien deberá seguir su proceso por uso de pasaporte paraguayo adulterado en un hotel de Asunción.

“Corresponde la medida sustitutiva para Ronaldinho y su hermano, y la continuación de su arresto en un hotel. Tengo la constancia de la aceptación de los directivos del hotel para que ellos a su costa guarden arresto domiciliario allí”, dijo el juez Gustavo Amarilla.

Se trata del Hotel Palmaroga (la Casa de Palma), de estilo colonial, remodelado y recientemente inaugurado. El exastro del FC Barcelona cumplió el lunes un mes de cárcel en el cuartel Agrupación Especializada de la Policía. La medida también favorece a su hermano Roberto de Assis Moreira.

Ambos se exponen a una expectativa de pena de cinco años de cárcel por el hecho punible de uso de documento original de contenido falso.
Los abogados de la defensa presentaron garantías por valor de 1.600.000 dólares por ambos, la mitad por cada uno.

Amarilla, juez de garantías, aceptó la cantidad ofrecida y dispuso la salida de la cárcel del famoso ídolo del balompié mundial.

El jugador de fútbol americano OJ Simpson protagonizó uno de los casos criminales de la historia reciente. Fue acusado del doble homicidio de su exesposa y un amigo, pero al final el proceso judicial se dio por terminado por falta de pruebas.

Sin embargo, en 2007 fue arrestado por robo armado, secuestro y agresión.

OJ, armado junto a varios cómplices, retuvo a vendedores deportivos en un hotel de Las Vegas. La razón es que el también actor y presentador de televisión creía que ellos tenían objetos que le pertenecían.

En 2008 fue condenado a 33 años de prisión, con un mínimo de prisión efectiva de nueve años. En 2017 se le entregó el beneficio de libertad condicional.

El atleta sudafricano Óscar Pistorius entró a la historia en 2012, cuando se convirtió en el primer atleta en condición de discapacidad en participar en unos Juegos Olímpicos convencionales.

Sin embargo, su vida dio un giro dramático cuando fue acusado de asesinar a balazos a su novia, la modelo Reeva Steenkamp, la noche de San Valentín de 2013.

Pistorius fue considerado inocente de homicidio doloso, pues se determinó que no mató a su novia con premeditación, sino que pensó que era un intruso. En 2014 fue condenado a una pena de cinco años, más otros tres años por posesión ilegal de armas.

Tras ires y venires, en 2017 su pena fue endurecida a 13 años en prisión.

El campeón mundial de boxeo argentino Carlos Monzón fue condenado por el feminicidio de su esposa Alicia Muñiz, con quien tuvo un hijo. Siete años después de contraer matrimonio con ella, en 1988, la golpeó y la lanzó por el balcón de la casa en la que vivían en Mar del Plata.

Fue condenado a 11 años de prisión, pues la ley argentina no contemplaba la figura de feminicidio.

Otro caso es el del estadounidense Mike Tyson, que en 1992 fue condenado a seis años de prisión por abusar sexualmente de Desiree Washington, una joven de 18 años. Mientras estuvo preso, Tyson mostró un buen comportamiento y fue dejado en libertad tres años después.

El futbolista argentino nacionalizado paraguayo Jonathan Fabbro, quien tuvo paso por el fútbol colombiano con Once Caldas, fue condenado el año pasado a 14 años de prisión por abusar sexualmente de su ahijada, de 11 años, durante al menos cinco años.

Fabbro fue denunciado en 2017, y el mismo año fue extraditado desde México, donde jugaba en el club Lobos Buap, hacia Argentina.

Los abusos de Fabbro se habrían producido en el automóvil del futbolista y la casa de la abuela de su ahijada e incluían toqueteos, sometimiento a sexo oral y eyaculaciones en la boca.

Fabbro, de 38 años, jugó en 11 equipos distintos de siete países.

Jhon Viáfara, Diego Osorio y Freddy Rincón son algunos de los futbolistas colombianos que tienen o han tenido problemas con la justicia, todos ellos relacionados con el narcotráfico.

Viáfara fue extraditado este año a Estados Unidos, acusado de hacer parte del Clan del Golfo. Rincón, por su parte, fue puesto en situación de búsqueda y captura por la Interpol en 2007. Ese mismo año fue arrestado en Brasil, y a pesar de salir de la cárcel, aún está a la espera del fallo judicial.

Osorio fue condenado en 2019 a cinco años de prisión domiciliaria por reincidir en tráfico de estupefacientes. En 1993, René Higuita fue arrestado por mediar un secuestro, prohibido entonces por la justicia.