Alivio para los caleños: precios de la canasta familiar aumentaron menos en la ciudad que en Colombia

La variación de los precios de los productos y servicios de la canasta familiar en Cali sigue en descenso. En junio, la inflación fue de 0,18 %, menor a la de Colombia, que se situó en 0,30 %.

Asimismo, en el primer semestre del año, la capital del Valle reportó un Índice de Precios al Consumidor (IPC) de 5,87 %, también menor que el promedio nacional que llegó a 6,15 %.

Los resultados son mejores a lo que esperaba el mercado, que había proyectado, en promedio, un alza de los precios para Colombia por encima de ese 0,30 %, evidenciando que se mantiene la tendencia a la baja de indicador.

Sin embargo, los resultados presentados por el Dane también muestran una preocupación, pues se percibe ya el impacto del alza en el precio de la gasolina, que ha tenido un incremento entre 400 y 600 pesos mensual desde el año pasado.

Es así como el rubro de transporte es uno de los que más impacta el resultado de la inflación para el mes de junio y en lo corrido del año, de acuerdo con Piedad Urdinola, directora del Dane.

Eso no solo sucede a nivel nacional, sino también en ciudades como Cali. En la capital del Valle, en junio, la variación de los precios en el grupo de gastos del transporte fue la más alta con 1,14 y 11 % para el primer semestre del año.

Estos datos superaron ampliamente el alza en el costo de los alimentos en la ciudad que para el sexto mes del año tuvo una inflación negativa (-0,56 %) y 4,03 % para el primer semestre del año.

Los datos del Dane muestran que en Colombia la inflación del transporte fue de 11,36 % en el primer semestre de 2023. “Los combustibles para vehículos variaron 23,67 %, el transporte urbano 10,43 %; vehículo particular nuevo o usado, 7,48 %”, explicó la directora del Dane.

Un segundo factor que influyó en el IPC en Cali fue el de restaurantes y hoteles con un incremento de 9,72 %, durante los primeros seis meses del año.

Harold Londoño, gerente de Analítica y Estudios Económicos de la Cámara de Comercio de Cali, comentó que la inflación mensual y anual, en la capital del Valle, fue la más baja entre las cinco principales ciudades, y en renglones como el de la electricidad registró la variación anual más baja entre las 23 principales ciudades del país.

“Las cifras muestran que se ha dado un quiebre de tendencia en la inflación, que se ha favorecido por un peso que se ha revaluado en los últimos meses; sin embargo, hay que seguir monitoreado los datos, debido a que los ajustes en el precios de los combustibles y la intensificación del fenómeno de El Niño impactarán los precios en el segundo semestre”, comentó.

Agregó que debido a que los alimentos ya no son los que más jalonan los precios, el IPC para los hogares pobres y vulnerables no es el más alto entre los grupos poblacionales, sino la de ingresos altos y clase media.

“Si bien la inflación anual de alimentos sigue estando por encima del 10 %, ya no es el rubro que más jalona los precios; transporte, restaurantes y hoteles y muebles para el hogar son las que más la impulsaron”, añadió el analista.

Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank Colpatria, coincidó en que los datos revelados por el Dane son buenas noticias, ya que la inflación se sigue desacelerando, “en este caso ya está en 12,13 % en términos anuales. Ha bajado 120 puntos básicos, es decir, 1,2 puntos porcentuales desde su máximo en marzo de 2023″.

Agregó que todavía falta mucho camino por recorrer, “estamos lejos de la meta de inflación que es del 3 %, pero esto ratifica la idea de que el Banco de la República no va a subir sus tasas de interés a finales de este mes, y adicionalmente que este año el organismo puede bajar las tasas de interés”.

Coincidó Olarte en que la tasa de cambio ha ayudado a que los insumos importados bajen de precio, entre otras cosas.

¿Cómo arrancaron los precios de los alimentos en julio en Cali?

• Según el Sistema de Información de precios y Abastecimiento del Sector Agropecuario), en Cavasa, ayer 10 de julio, el kilo del pepino cohombro se ofreció a 1.000 pesos, es decir, un alza del 35 % en sus cotizaciones mayoristas, dada la menor oferta del producto.
• Asimismo, el precio de la cebolla cabezona blanca subió 21 %, ofreciéndose el kilogramo a 1.464 pesos, también por menor oferta.
• De igual forma, el kilo de fríjol verde se transó a 2.742 pesos, lo que representó 21 % menos.