Economía
Caída de importaciones y exportaciones en China genera preocupación, ¿cuáles son las razones?
Las cifras negativas en el comercio internacional de China durante julio pasado han encendido las alarmas a nivel mundial.
Las recientes cifras comerciales de China han generado inquietud en los círculos económicos, ya que las importaciones y exportaciones del país experimentaron una caída más pronunciada de lo previsto en el mes de julio. Estos datos alimentan el temor de que la economía china podría estar enfrentando un debilitamiento de la actividad económica en el tercer trimestre, afectando sectores como la construcción, la manufactura y los servicios, así como la inversión extranjera directa y las ganancias industriales.
Según los datos aduaneros publicados este martes, las importaciones cayeron un 12,4% en comparación con el mismo período del año anterior, una disminución mayor a la esperada y que no alcanzó las estimaciones de los analistas. Mientras tanto, las exportaciones registraron una contracción del 14,5%, superando las expectativas de caída y marcando la tasa más alta de disminución desde el inicio de la pandemia.
El deterioro de las exportaciones, junto con el descenso en los precios de las materias primas, ha acentuado la caída general en las cifras. Analistas señalan que, aunque el valor de las importaciones refleja una demanda debilitada, las fluctuaciones en los precios de las materias primas también están contribuyendo a la situación.
“La mayoría de las medidas de los pedidos de exportación apuntan a una caída mucho mayor en la demanda extranjera de lo que se ha reflejado hasta ahora en los datos de aduanas”, explicó Julian Evans-Pritchard, jefe de economía de China en Capital Economics.
La situación ha impactado en el valor del yuan, que alcanzó un mínimo de tres semanas. Además, las acciones en Asia y las monedas australiana y neozelandesa, consideradas como indicadores del crecimiento chino, se debilitaron como respuesta a los datos comerciales.
En el segundo trimestre, la economía china experimentó un crecimiento lento debido a la debilidad de la demanda tanto en el país como en el extranjero. Esto llevó a las autoridades a prometer un mayor apoyo político y a los analistas a ajustar a la baja sus pronósticos de crecimiento para el año.
El valor de las exportaciones chinas ha disminuido en la primera mitad del año, a pesar de que el rendimiento total de la carga ha aumentado en los últimos trimestres. Los expertos advierten que las cifras de importación podrían estar influenciadas por factores de precio subyacentes a las materias primas.
Las exportaciones a Estados Unidos y la Unión Europea han experimentado caídas significativas, mientras que los envíos de Corea del Sur a China, un indicador clave de la demanda china de bienes globales, también han registrado una fuerte disminución.
En este contexto, las autoridades chinas buscan impulsar el consumo interno sin recurrir a una política monetaria excesivamente laxa, que podría desencadenar salidas de capital. Aunque se han prometido estímulos, la respuesta del mercado ha sido mixta y los inversores siguen expectantes frente a las propuestas para expandir el consumo en sectores como automóviles, bienes raíces y servicios.
“Las perspectivas a corto plazo para el gasto de los consumidores en las economías desarrolladas siguen siendo desafiantes, y muchos aún corren el riesgo de sufrir recesiones a finales de este año, aunque leves”, señaló Julian Evans-Pritchard.
Regístrate gratis a nuestro boletín de noticias
Recibe todos los días en tu correo electrónico contenido relevante para iniciar la jornada. ¡Hazlo ahora y mantente al día con la mejor información digital!