EPS en Colombia podrían tener problemas para el cierre fiscal, ¿afectará a los usuarios?

Las Entidades Promotoras de Salud (EPS) agremiadas en Acemi advierten de una grave crisis que afectará la atención de los usuarios en Colombia y por ello le pidieron al gobierno de Gustavo Petro 10 billones de pesos para subsanar la falta de recursos y no afectar el servicio que reciben los colombianos.

Acemi les envió una carta a los ministros de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, y Hacienda, Ricardo Bonilla, pidiéndoles que aumenten los recursos para el sector salud aprobados en la Ley de Adición Presupuestal hace unos días en el Congreso de la República.

El gremio argumentó que en el 2022 la situación del sector ya era preocupante, pues de cada $ 100 que recibieron las EPS del régimen contributivo, tuvieron que pagar alrededor de $ 102 en atenciones de salud.

Asimismo Acemi recalca: “Si a eso se suman los costos de operación, las pérdidas acumuladas de las EPS afiliadas a Acemi se elevan a $ 2,3 billones, con cargo al patrimonio de las aseguradoras”.

Además, Acemi estima que el dinero que se necesita para evitar que la salud del país quede desfinanciada son aproximadamente 10,45 billones de recursos, los cuales se dividen de la siguiente manera:

• 3,1 billones de pesos por la insuficiencia de la prima para 2023. Esto son los recursos que financian los cerca de 2,5 millones de atenciones diarias que se prestan en el sistema de salud, explicó el gremio.
• 3,9 billones es el dinero faltante estimado para este año y deudas que arrastran las Adres desde 2021 y 2022.
• Para las deudas de recobros, licencias e incapacidades y procesos de compensación pendientes se necesitan alrededor de 3,5 billones.

Ante esta problemática, Paula Acosta, presidente de la Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi), aseguró que tiene gran preocupación por la desfinanciación del sector salud y estima que son cerca de 10 billones los que se requieren para poder hacer el cierre de este año.

“Una preocupación muy especial con los recursos que financian las atenciones que van por fuera del plan de beneficios, que se conoce como presupuestos máximos, en donde lo que está hoy presupuestado solo alcanzará hasta el mes de julio”, aseguró Acosta.

La presidenta de Acemi agregó que a partir del mes de julio del presente año las EPS podrían mostrar problemas a la hora de hacer el pago a proveedores y prestadores.

Por su parte, la directora de GestarSalud, Carmen Dávila, aseguró que, de cara al cierre fiscal, el sector salud va a tener muchas dificultades tanto en el financiamiento ordinario como el reconocimiento de algunas deudas a cargo del Estado.

“Han demorado más de la cuenta en ser reconocidas, que tiene que ver con esos presupuestos máximos, que son recursos que financian las nuevas tecnologías y las tecnologías no incluidas en el plan de beneficios”, dijo.

Dávila informó que con respecto a la estrategia de punto final, que tiene que ver con el régimen subsidiado de salud, también hay cuentas pendientes de giro y ese flujo de recursos no se ha dado conforme a lo prometido, situación que va a generar un cierre financiero complejo por la demora en los pagos.

Esta situación genera gran preocupación entre los millones de personas por el futuro del sistema, puesto que varias personas padecen de enfermedades graves y necesitan de costosos tratamientos para tratarlas, y temen que sus tratamientos ya no puedan ser financiados por las EPS.