Economía
Esta es la explicación de por qué los billetes de $2000 y $5000 son más pequeños que los demás
Detalles poco observados del papel moneda que circula en el país. Conozca cómo cuidar los billetes y monedas.
En Colombia todo el mundo conoce cada uno de los billetes que circulan en el mercado, pero pocos entran a detallar las características que los diferencian. Por ejemplo, pocos saben que la diferencia entre un billete de $2000 y uno de $100.000 , son 25 mm de ancho. De hecho, el primero es el que más se mueve en el país según lo dijo el propio gerente del Banco de la República, Leonardo Villar.
“Para los $20.000 pesos se producen planchas que sacan 50 billetes. Algo que se preguntaron los colombianos hace unos años es por qué estábamos haciendo más chiquitos los billetes de $2000 y de $5000: la razón es que es para economizar un poquito de papel. En esos billetes de baja denominación se sacan 60 en una plancha”, aseguró.
Señaló igualmente que “los sistemas de seguridad son complicados de hacer y por eso se hacen muchos más esquemas de seguridad para los billetes de alta denominación que para los pequeños”, aunque, desde su punto de vista, Colombia tiene buen respaldo en esta materia.
Por ejemplo, las ventanas transparentes y los cambios al exponer los billetes a cierto ángulo son algunas de esas mejoras que se hicieron desde el 2016, cuando empezaron a incorporarse al mercado colombiano los nuevos diseños.
¿Cuánto miden los billetes en Colombia?
En su página web el Banco de la República publicó estos dartos datos desconocidos y curiosos para los colombianos.
Así las cosas estos son los tamaños oficiales de los billetes en Colombia según el Emisor:
- Billetes de 2.000 pesos: 66 mm de alto × 128 mm de ancho.
- Billetes de 5.000 pesos: 66 mm de alto × 133 mm de ancho.
- Billetes de 10.000 pesos: 66 mm de alto × 138 mm de ancho.
- Billetes de 20.000 pesos: 66 mm de alto × 143 mm de ancho.
- Billetes de 50.000 pesos: 66 mm de alto × 148 mm de ancho.
- Billetes de 100.000 pesos: son 66 mm de alto x 153 mm de anho.
Cuidado de billetes
Cuidar los billetes previene su deterioro prematuro y facilita la verificación de su autenticidad, por eso es importante seguir los siguientes consejos que la misma entidad recomienda:
- No coserlos con grapas. Si necesita pegarle un papel o juntar varios billetes, hágalo utilizando bandas de caucho o clips.
- No marcarlos ni rayarlos. Si le dan ganas de dibujar, escribir o hacer una suma, nunca lo haga sobre los billetes, utilice un papel distinto.
- Evitar doblarlos en exceso o arrugarlos. Guárdelos en la billetera o en un lugar donde no se doblen demasiado.
- No estampar sellos, ni adicionar algún tipo de gráfico con tinta sobre la superficie de los billetes.
- Evitar el contacto con grasa, aceites, pintura, tinta o cualquier otra sustancia para que no se presenten manchas en los billetes.
- No rasgar, alterar o sustraer fracciones o partes de los billetes.
- No adicionar cintas adhesivas, stickers o cualquier elemento adhesivo sobre los billetes.
- Evitar su exposición a sustancias como detergentes, solventes, combustibles y productos químicos. Manténgalos siempre en un lugar seco porque el papel moneda, a pesar de ser resistente al contacto con líquidos, dura menos tiempo con la humedad.
- Evitar pruebas drásticas y equivocadas para confirmar su autenticidad como: frotarlos, rasgarlos con la uña, estirarlos, arrugarlos completamente o tratar de sacarles el hilo de seguridad, entre otras.
- Manténgalos siempre en un lugar seco porque el papel moneda, a pesar de ser resistente al contacto con líquidos, dura menos tiempo con la humedad.
Cuidado de monedas
- No exponer las monedas a sustancias químicas como ácidos, jabones líquidos, solventes, grasas, etc.
- No adicionar sustancias adhesivas, resinas, pegantes, pinturas o cualquier sustancia sobre la superficie de las monedas.
- No someter las monedas a alteraciones por acción del fuego o del calor.
- No alterar el tamaño o forma de las monedas por acciones mecánicas como: cortes, fricción, doblez, mutilación, perforación, etc.
- No emplear las monedas para usos o fines diferentes a los destinados como medio de pago.
- No cuidarlas genera oscurecimiento, óxidos, cambios de color, apariencia y textura de la superficie de las monedas.