Economía
Estas son las dudas generadas tras cambio en el artículo 10 del TLC entre Colombia y Estados Unidos
Gremios y analistas aseguran que la firma de la nota aclaratoria podría afectar la inversión extranjera.
Colombia y Estados Unidos firmaron una aclaración sobre el Capítulo 10 del Tratado de Libre Comercio, TLC, vigente entre los dos países desde mayo de 2012, la cual ha suscitado diversas interpretaciones, pues hay quienes aseguran que podría generar una mayor incertidumbre para los inversionistas extranjeros o dejar expuesto al país a demandas judiciales.
Esta incertidumbre de la que hablan se debe a que el acuerdo, que fue firmado entre el ministro de Comercio, Industria y Turismo, Luis Carlos Reyes Hernández y la Representante Comercial de Estados Unidos, Katherine Tai, toca algunos aspectos del capítulo en mención , específicamente todo lo que hace referencia a las inversiones y las disputas entre las compañías y el Estado.
El ministro Luis Carlos Reyes explicó que esta aclaración es importante tanto para las expectativas de los inversionistas, como para los compromisos de los Estados y para la resolución de controversias por parte de jueces y autoridades nacionales, y árbitros internacionales.
“La declaración, lejos de destruir los incentivos a la llegada de inversión extranjera, los refuerza para aquellas inversiones que tienen vocación de beneficiar tanto a los inversionistas como a la sociedad colombiana que las acoge”, aclaró.
Reyes agregó que, dicha modificación se hizo porque se identificaron términos que pueden llevar a malas interpretaciones de los compromisos pactados en el inicio del acuerdo, las cuales podrían derivar en demandas.
“La idea es que sea la justicia de cada país la que intervenga en caso de pleito entre los inversionistas, evitando la intromisión de terceros. Además cada país podrá emitir nuevas regulaciones, para proteger su política pública, sin que esto vulnere el TLC, y atente contra los privados”, dijo Reyes, quien reiteró que este ajuste nada tiene que ver con una renegociación del Tratado.
Las preocupaciones
Pese a que el ministro Reyes aseguró que no tienen por qué haber preocupaciones en torno a los cambios en el artículo 10, expertos en el tema como el rector de la Universidad EIA, José Manuel Restrepo, aseguran que esta modificación deja a Colombia “en la mitad de un debate político que se está dando en el interior de Estados Unidos, lo cual no es una buena estrategia”.
“Más estratégico hubiese sido esperar, no hacer esto faltando cuatro días a la transición de Gobierno, hacer las consultas a sector privado y congresos de lado y lado, para avanzar en el legítimo proceso de buscar equilibrios y superar ambigüedades en el capítulo de relación estado-inversionista”, señaló.
Para Restrepo, si bien hay que ser cuidadoso con los equilibrios en estos acuerdos de protección de inversión, “la razón que se está poniendo de presente es que hay que acabar con los modelos de dirimir diferencias a través de tribunales de esta naturaleza internacional, y poner en lugar de eso a actuar al sistema judicial interno colombiano, es equivocado”.
Entre tanto, María Claudia Lacouture, presidenta de la Cámara Colombo Americana, Amcham Colombia, se sumó a las críticas afirmando que Colombia representa un superávit para Estados Unidos de más de dos mil millones de dólares frente a un déficit de US$300 mil millones con China, y de US$ 152 mil millones a México.
“Hay una oportunidad enorme para presentar acciones de mejoramiento y revisión, no renegociación, del TLC, para hacer que los productos colombianos puedan complementar las necesidades y los procesos productivos en Estados Unidos”, señaló.
El empresario Carlos Andrés Pérez, dijo que las modificaciones a los acuerdos internacionales de comercio e inversión siempre generan preocupación, tanto a las empresas que ya operan en un país como a aquellas que están explorando la posibilidad de expandir su operación en otros mercados.
“En el caso del ajuste propuesto al TLC, la mayor preocupación radica en que se restringe el acceso al arbitraje internacional en los casos en los que las empresas quieran impugnar las sanciones o resoluciones expedidas por las autoridades nacionales. En este sentido, las empresas colombianas y estadounidenses no podrán apelar en tribunales o entidades internacionales las decisiones de las autoridades nacionales que les sean aplicadas. Estas decisiones podrían ser injustas o favorecer indebidamente a las empresas estadounidenses en Estados Unidos o a las colombianas en Colombia”, explicó.
Además, agregó que “deja expuestas a las empresas que ya operan o que llegarán a invertir a los cambios en regulaciones ambientales. En algunos sectores, este tipo de ajustes representan una incertidumbre jurídica que puede llegar a hacer inviables las inversiones. Por lo pronto, es previsible que en las próximas semanas tanto el Congreso de Estados Unidos como el de Colombia emitan sus conceptos sobre la forma en que se ha tramitado esta modificación y deba ser ajustada”.
Datos de interés
- Gracias al TLC, el 99% de la oferta industrial exportable de Colombia, tiene acceso inmediato a Estados Unidos, según datos de Procolombia.
- Datos entregados por a Analdex, señalan que a noviembre de 2024, las principales empresas exportadoras a Estados Unidos fueron Ecopetrol, C.I. Trafigura Petroleum Colombia, Refinería de Cartagena, C.I. Energía Solar S.A.S. E.S. Windows, Comercializadora Internacional Sunshine Bouquet Colombia y Frontera Energy Colombia.
- Las importaciones de productos estadounidenses registraron, entre enero y octubre de 2024, US$13.403 millones, con un aumento de 2%, de acuerdo con cifras del Dane.
- En 2024 las inversiones estadounidenses en Colombia crecieron un 15% gracias a proyectos estratégicos en infraestructura sostenible y cadenas de valor regionales, según datos entregados por el Ministerio de Comercio, que asegura que las relaciones comerciales entre los dos países se fortalecerán este 2025.