Esto podrían subir los arriendos en Colombia para 2024; habría golpe para inquilinos

Sin lugar a dudas, el aspecto más dolores de cabeza genera para el sustento de una familia es la vivienda, que causa preocupación entre quienes pagan arriendo debido a la posibilidad de un aumento en las tarifas para el próximo año.

Dado que el 35% de la población del país vive en arriendo, cerca de 17 millones de personas no poseen vivienda propia.

Sin embargo, las perspectivas no son alentadoras para estos colombianos, según el análisis de Fedelonjas, la Federación Colombiana de Lonjas de Propiedad Raíz, ya que anticipan que el valor del arriendo no debería superar el índice de inflación. La confirmación de estos datos precisos se espera en los primeros días del próximo año.

Sin embargo, el Gobierno Nacional estima que esta cifra terminará el año en el 9,7 %, lo que indicaría que el valor de los arriendos subiría para 2024.

Esto significa que si una familia paga un arriendo de $1.000.000, con el incremento, pasaría a pagar $1.097.000.

Esto es lo que debe recibir si le terminan el contrato de arrendamiento sin causa justa

En la actualidad, muchas familias optan por vivir en alquiler debido a los elevados costos de adquisición de viviendas. A pesar de que existen subsidios en Colombia para la compra de propiedades, la clase media, por ejemplo, a menudo no cumple con todos los requisitos, lo que dificulta su acceso a las oportunidades de compra.

Según los datos proporcionados por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) en 2022, el 40,2 % de la población residía en una vivienda alquilada, mientras que el 34,9 % lo hacía en una vivienda propia totalmente pagada.

Es importante destacar que el arrendamiento de propiedades está regulado en Colombia. La Ley 820 de 2003 establece que un arrendador puede rescindir el contrato si el arrendatario no paga el alquiler o los servicios públicos, subarrienda la propiedad o cede el contrato sin la autorización del arrendador.

Además, el contrato de arrendamiento puede finalizarse por problemas de convivencia con la comunidad, por realizar mejoras, cambios o ampliaciones al inmueble sin la debida autorización del arrendador, si el arrendador necesita ocupar su propia propiedad, en caso de demolición del inmueble o si la propiedad ha sido vendida.

Es importante señalar que, para poner fin a este contrato, el arrendador debe notificar con tres meses de anticipación. Si, por otro lado, vive en alquiler y el arrendador rescinde el contrato antes de la fecha de vencimiento sin previo aviso, y además no se cumplen ninguna de estas condiciones, tiene derecho a una indemnización equivalente a tres meses de alquiler.