Las razones de la peor crisis a la que se ha enfrentado el sector de la construcción en Colombia

El 2023 no ha sido un año fácil para el sector de la construcción en el país. Las cifras evidencian un decrecimiento que tiene en alerta a gran parte de esta industria.

Entre enero y mayo se dejaron de vender 64.129 viviendas en el país, lo que representa una reducción de $13 billones en la inversión de vivienda nueva, según datos presentados por la Cámara Colombiana de la Construcción, Camacol. Eso equivale a una caída del 61 % en ventas y los lanzamientos de proyectos han disminuido en 68,6 %.

Guillermo Herrera, presidente ejecutivo de Camacol, señaló que ya se completan 15 meses de reducciones mensuales continuas en el ritmo de comercialización, principalmente, de la vivienda de interés social, VIS.

“Para el mes de mayo la reducción en las ventas fue del 66 % para las VIS y del 54 % para las No VIS”, dijo y agregó que desde marzo el promedio de las ventas se encuentra por debajo de las iniciaciones, es decir, que al sector se le “acaba el combustible para la generación de nuevos empleos”.

Precisamente en el tema de los empleos que genera este sector, en lo corrido de este año se han generado 2448; 44.119 menos que los que se ofertaron entre 2019 y 2022 cuando la cifra fue de 46.567.

La cartera de vivienda, según Asobancaria, aumentó 11,7 % a marzo de 2023, equivalentes a $101 billones. Sin embargo, el crecimiento se ha desacelerado.

De otro lado, el más reciente informe presentado por la Superintendencia de Sociedades dio a conocer que al menos 458 empresas constructoras en el país presentaron solicitudes para abrir procesos de reorganización, bajo la ley de insolvencia.

En el documento se evidencia que, aunque algunas ya enfrentaban problemas desde la pandemia, otras se afectaron debido a los cambios que el Gobierno implementó para acceder a los subsidios de vivienda, a través del programa Mi Casa Ya.

Asimismo, la Supersociedades reveló que el número de compañías de este sector que adelantan el trámite para su ejecución y liquidación representan alrededor de $14.900 millones en activos; $15.400 millones en pasivos, y en conjunto poseen una planta de personal de 16.322 trabajadores.

Los departamentos que registran el mayor número de procesos de insolvencia son Bogotá con 147 casos; Antioquia, con 80; Santander, con 57; Valle del Cauca, con 50; Atlántico, con 33 y Bolívar, con 15.

Según Camacol, de las 458 empresas del sector que están en proceso de insolvencia, al menos 150 tienen relación directa con el desarrollo de iniciativas habitacionales.

Para el gremio, las altas tasas de interés en los créditos afectan la operación de las pequeñas y medianas empresas al momento de desarrollar los proyectos de vivienda, ya que están pagando alrededor del 1,5 % mensual de las obligaciones financieras para ejecutar las obras, teniendo en cuenta que el margen de utilidad del negocio está entre el 7 % y 10 %.

Sumado a ello, están las cifras presentadas por Fedesarrollo que muestran que la disposición de los colombianos para comprar vivienda ha disminuido 51 % y los desistimientos de negocios como proporción de las ventas se ubicaron en un 22 %.

Panorama en el Valle del Cauca

El panorama poco alentador también se ha reflejado en las regiones. Por ejemplo, en el Valle del Cauca las ventas al mes de mayo bajaron 65,9 %.

Asimismo, las cifras presentadas por Camacol Valle muestran que los inicios de obra registraron una disminución del 8,6 %, pasando de 7864 en 2022 a 7184 unidades. Sin embargo, se observa una recuperación del volumen de unidades iniciadas en mayo frente al mes de abril.

Así las cosas, para el quinto mes del 2023, en el Valle, se habían vendido 4181 unidades de vivienda VIS; 1246 no VIS y 210 en el estrato alto.

Cali lidera las ventas con 3131 unidades, seguida de Jamundí con 929 y Candelaria con 828.

Alexandra Cañas, gerente de Camacol Valle, señaló que poco a poco se han venido lanzando nuevas unidades de vivienda en la región, recobrando la confianza del sector, para el desarrollo de nuevos proyectos.

“Entre enero y junio el decrecimiento en lanzamientos fue del 68 %, pero en mayo hubo una recuperación”, dijo.

Agregó que, durante 2023, a través del Censo de edificaciones de Coordenada Urbana, se han recibido reportes más de reestructuración de proyectos de vivienda nueva, que de cancelaciones de los mismos, sin embargo, se han reportado tres cancelaciones en lo corrido del año.

“La invitación para las familias vallecaucanas es para que sigan comprando vivienda nueva, teniendo en cuenta que lo que compren hoy, se entregará en uno o dos años, cuando seguramente las tasas de interés serán mucho más bajas a las actuales”, manifestó.

Para Juan Felipe Cadavid, arquitecto miembro de la Sociedad de Arquitectos del Valle y dueño de la constructora Cadavid Arquitectos, la difícil situación que atraviesa el sector de la construcción se debe a la falta de apoyo del Gobierno Nacional a la vivienda social, pues es este segmento el que ha resultado más golpeado por todos los inconvenientes que se han presentado con la entrega de subsidios.

“En la constructora se nos quedó detenido un proyecto de 90 viviendas sociales, que no pudo arrancar por la tardanza en la entrega de subsidios y la verdad no hay confianza para dar inicio a esta propuesta que se construiría entre Puerto Tejada y Villa Rica”, dijo.

Resaltó que la problemática del sector se evidencia principalmente en los proyectos de estrato bajo y medio, ya que en el alto no dependen de las ayudas del Gobierno.

De esta forma, mientras la política de subsidios del país se normaliza, y las tasas de interés bajan, la construcción de vivienda pasa un difícil momento que tendrá efectos en el 2024.

Más subsidios

1. Esta semana se sancionó la ley de adición al presupuesto que permitirá entregar 75.000 subsidios de vivienda, lo que aportará en el cumplimiento de la meta propuesta para el 2023.
2. La ministra Catalina Velasco informó que mientras se surte el trámite legal de la adición, que se estima sea en un mes, el Ministerio continuará haciendo el proceso de recepción y revisión de documentación solicitada.