Posible reapertura de mataderos genera controversia en sectores del país

Por: Adriana María Becerra Rui, redactora Activos

El anuncio dado por el presidente Gustavo Petro donde informó que se emitió el decreto para reabrir en ciertos municipios del país los llamados mataderos municipales, con el fin de conseguir mejores precios en la carne, provocó diferentes reacciones en algunos sectores.

Uno de los primeros en dar a conocer su posición fue José Félix Lafaurie Rivera, presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, quien aseguró que el Gobierno interpreta la necesidad de ciertos sectores populares de lugares apartados de Colombia, creyendo que flexibilizando las medidas en materia de mataderos municipales van a tener carne a buenos precios, cuando lo que importa verdaderamente es que las personas consuman carne con garantías en materia de sanidad y de inocuidad.

“Cuando se dictó el decreto 1500 que se ha venido aplazando y flexibilizando, se buscaba escoger mataderos de carácter regional que pudieran sacrificar con plena garantía para el consumidor, con buen tratamiento de las carnes, porque así se podría tener este producto con diferentes precios en distintos mercados”, dijo.

Agregó: “Siempre y cuando el ganado que se sacrifique no sea robado y cumpla con las normas sanitarias, como que esté presente un veterinario y haya quien garantice que esas carnes pueden ser consumidas, no habría ningún problema”, sostuvo.

Por su parte, el exministro de Agricultura, Andrés Valencia, a través de su cuenta de X, mostró su desacuerdo diciendo que el Decreto 2016 de 2023 emitido por el Gobierno “tiene varias perlas que significan un retroceso en materia de salud pública y podría poner en dificultades los mercados internacionales para la carne colombiana”. En otro de sus trinos argumentó que la reapertura de estos lugares puede poner en riesgo los mercados de exportación de carne, máxime ahora que se abrió el mercado de China.

Sin embargo, el ministro de Salud, Guillermo Jaramillo, explicó que “la reapertura de los mataderos municipales permite que los campesinos puedan volver a comercializar sus productos y competir con los monopolios de los frigoríficos, que han elevado el precio interno de la carne”.

Señaló que el decreto “no es una medida aplicable para las grandes ciudades, sino para los territorios más apartados del país”.

En estos lugares, dijo, los campesinos se ven obligados a sacrificar ganado en potreros y sin las condiciones sanitarias adecuadas, pues los centros de sacrificio son muy distantes y movilizar las reses implica enormes costos de transporte.

Sin embargo, advirtió también que estos centros de sacrificio deberán cumplir con las condiciones de salubridad exigidos por las autoridades sanitarias, tarea que deberán asumir las alcaldías.

Álvaro Urrea, presidente ejecutivo de la Asociación Frigoríficos de Colombia, Asofrico, aseguró que el impacto para el bolsillo de los habitantes de estas zonas no será mayor.

“El volumen de carne que se manejaría en estos mataderos es muy bajo comparado con lo que realmente se mueve en el país, por lo que el precio no tendría un impacto significativo a la baja que no superará el 3 %”, señaló.

El Decreto

• Decreto 2016 de 2023, reglamenta el funcionamiento de las plantas de beneficio animal, para brindar acceso a todas las regiones del país a un consumo de carne de calidad y buenas condiciones sanitarias. Además de reducir los precios del producto y disminuir el abigeato.
• Según el Invima, de 1062 municipios con vocación de ganadería bovina, solo 168 tienen plantas de beneficio.
• Solo los municipios que pertenezcan a las categorías 5 y 6, están autorizados para abrir los mataderos municipales y cumplir con las normas sanitarias y de inocuidad.