Economía
Precio del dólar bajó de los $4500 en la jornada de hoy
La jornada en los mercados internacionales no presentó grandes cambios. Hay estabilidad en bolsas y en precios del petróleo.
El dólar arrancó la semana con tendencia a la baja y cerró por debajo de $4.500, cifra que no se veía hace más de una semana, pues durante cinco jornadas la moneda había mostrado leve repunte superando dicha barrera.
La divisa sorprendió de nuevo y cerró en $4.482,06, lo que la posicionó $41,58 abajo de la Tasa Representativa del Mercado, que para hoy estaba en $4.523,64 .
Para el cierre de la jornada, la moneda registró mínimos de $4.451,30 y máximos de $4.514,90. Además, se negociaron US$872,4 millones en 1.481 transacciones.
Con este comportamiento se mantiene la tendencia bajista de la divisa, que lleva un mes con relativa calma en los mercados.
Bolsas europeas
Las bolsas europeas cerraron prácticamente estables este lunes, en la primera jornada de una semana en que están previstos los anuncios de indicadores macroeconómicos y de los resultados de gigantes tecnológicos estadounidenses.
El mercado de Londres experimentó un ligero retroceso del 0,02%, una tendencia parecida en París (-0,04%), mientras que el de Fráncfort bajó un 0,11%, el de Madrid disminuyó un 0,10% y el de Milán subió un 0,43%.
Por su parte, Wall Street abrió ligeramente a la baja al comienzo de una semana muy ocupada en términos de resultados corporativos. En las primeras operaciones, el índice estrella, el industrial Dow Jones, cedió 0,04% al igual que el índice ampliado S&P 500 -de las mayores 500 empresas en bolsa-, mientras que el Nasdaq, de predominio tecnológico, cayó 0,17%.
Asimismo, los precios del petróleo operaban estables el lunes, ya que la preocupación por la subida de las tasas de interés, la economía mundial y las perspectivas de la demanda de combustible se equilibraban con la perspectiva de una reducción de la oferta.
Ambos contratos cayeron más de 5% la semana pasada, registrando sus primeros descensos semanales en cinco años, ya que la demanda implícita de gasolina en Estados Unidos se redujo con respecto al año anterior.