Economía
Salario mínimo del 2025: este es el incremento en el que coinciden los analistas
Gremios económicos plantean aumento de un solo dígito, mientras centrales obreras apuntan a dos dígitos. ¿Se logrará un consenso?
El próximo martes, 3 de diciembre, inicia formalmente la discusión sobre el incremento del salario mínimo para 2025, tema que tiene opiniones divididas entre diferentes sectores, sobre cuál debe ser la cifra de aumento, teniendo en cuenta algunas variables económicas como la inflación causada, pero también el débil crecimiento económico en el tercer trimestre de 2024.
Por eso, algunos gremios, así como representantes del Gobierno Nacional, han planteado que el aumento sería de un solo dígito, algo que no caló muy bien entre las centrales obreras que, por el contrario, esperan llegue a los dos dígitos.
Fue justamente el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, quien encendió el debate esta semana al señalar que el salario mínimo comenzará a discutirse sobre la base del 6,2%, cifra que responde a la inflación y la productividad laboral, las dos variables que determinan el incremento, pero además reiteró que “nunca sería de dos dígitos”.
“La discusión del salario mínimo está normada. El salario mínimo no puede crecer por debajo de la inflación causada y se toma como punto de referencia la inflación al mes de septiembre. (…) Si se sigue la tradición colombiana, que el ajuste es IPC más 1, tendríamos un 6,2%, y si hay un ajuste mayor, nunca podría estar en un nivel de dos dígitos”, enfatizó Bonilla.
Sin embargo, la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, al establecer la agenda de trabajo para la negociación del incremento del salario mínimo, el pasado martes, aseguró que la idea es generar un diálogo tripartito: empleadores, trabajadores y Gobierno, para lograr una concertación.
Hablan las centrales
Percy Oyola Paloma, presidente de la CGT (Confederación General del Trabajo) coincidió con Mintrabajo en que su interés es fijar de manera concertada el salario mínimo entre empleadores, trabajadores y Gobierno.
No obstante, dijo que solo hasta el 11 de diciembre, una vez se conozcan las cifras de productividad y del mercado laboral, presentarían las partes las propuestas en materia de cifras para la búsqueda de ese acuerdo.
Anotó que el comando unitario integrado por la CUT, la CTC, la CGT y las Confederaciones de pensionados, están trabajando para llevar una propuesta unificada en la fecha citada, aunque no precisó cuál será la cifra que pondrán sobre la mesa de negociación.
El vocero sindical también desvirtuó que una posible alza por encima de la inflación aumente el desempleo. “Estos incrementos -refiriéndose al 2024 (12%) y 2023 (16%)- en ningún momento generaron desempleo, ni tampoco contribuyeron a la inflación, toda vez que hoy estamos en cifras de inflación bastante bajas respecto a lo que ha sido la situación en el año inmediatamente anterior”.
Por su parte, Wilson Sáenz, presidente de la CUT Valle, dijo que aún no hay una cifra oficial, pero aclaró que “en lo que sí hay consenso es en el tema de solicitud de aumento. La posición de la central es que sea dos dígitos, no uno, sino dos, aunque no sabemos es cuánto”.
Al igual que Oyola Paloma, afirmó que la posición de los gremios privados siempre va a ser la misma, que “no pueden aumentar porque va a haber desempleo, pero hay desempleo y no han aumentado lo que realmente Colombia necesita en el tema del salario mínimo; o sea es una gran falacia, porque para poder reactivar la economía se necesita consumo y, si hay un buen aumento, hay mucho más consumo porque se recupera el poder adquisitivo”.
Entre tanto, John Jairo Caicedo, presidente de la CTC, se mostró escéptico de que el salario mínimo cruce los dos dígitos. “Esperamos que haya una concertación, pero seguramente el salario mínimo va a estar alrededor de un dígito”, confesó.
¿Qué dicen los gremios?
Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, aseguró que “una cifra de aumento del salario mínimo cercano al 6% ($78.000) suena como algo razonable en el contexto de una inflación que viene reduciéndose desde marzo del año anterior y especialmente de una economía que, ratifico, sigue con un crecimiento débil y con unas cifras en el mercado laboral que distan de ser lo deseable”.
En esa misma línea, Jackeline Piraján, economista de Scotiabank Colpatria, opinó que “en una negociación razonable el salario mínimo debería más o menos ajustarse hacia el 6,5% ($84.500) máximo 7,0% ($91.000). Vamos a ver con qué propuesta llegan los trabajadores que buscan un incremento del 10% ($130.000), pero los empresarios probablemente no quieran por la coyuntura económica y debilidad de los negocios”.
De igual forma, La Federación Colombiana de Gestión Humana – ACRIP, propuso que el incremento del salario mínimo para el 2025 esté en línea con la capacidad de pago del sector empresarial, que apunta hacia un 7% como máximo, lo que sería $1.391.000.
Por su parte, José Ignacio López, presidente de Anif, calificó como “razonable” la posición de Minhacienda de fijar como base para el aumento un 6,2%, que “recompense ganancias de productividad, pero que no genere una nueva ronda de presión inflacionaria sobre todo en el sector servicios, y que ayude a que tengamos un mejor mercado laboral en términos de contratación formal en 2025″.
Para Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, entidad que hace parte de la mesa de negociación, el aumento deberá ser de un solo dígito, pues la inflación estará entre el 5% y el 5,5% anual, más la productividad laboral. Siendo así “no tiene ninguna presentación que el incremento sea de dos dígitos como pretenden las centrales obreras.
El Observatorio Laboral y el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana de Bogotá también tienen una posición. “A pesar de los incrementos en el salario mínimo legal, estos no se han traducido en una mejora significativa de los ingresos de los trabajadores ni han impactado positivamente la estructura salarial en el país. En tal sentido, se requieren medidas diferentes al incremento del salario mínimo para impactar positivamente en el ingreso de los trabajadores en Colombia”.
Añaden que la política salarial debe complementarse con un enfoque más regionalizado, que reconozca las diferencias económicas y sociales entre zonas urbanas, rurales y regiones específicas. Y proponen que el incremento del salario mínimo debería ser, al menos, equivalente al IPC proyectado en un 4%, más el aumento de la productividad.
Fechas de negociación
El pasado martes se reunió la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Salariales y Laborales del Ministerio de Trabajo, que estableció la agenda para la negociación del incremento del salario mínimo para 2025.
En ese orden de ideas, la instalación de la Subcomisión de Productividad quedó fijada para el próximo 3 de diciembre, así como el inicio formal de la Comisión Permanente el 4 de diciembre.
Durante estos dos días se discutirán las cifras de productividad que presentará el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane.
Asimismo, el día 9 de este mismo mes se conocerán las cifras del mercado laboral de octubre, el más cercano a la fecha.
Y desde el día 11 hasta el 15 de diciembre, se presentarán y discutirán las propuestas de incremento. Se espera que para esta última fecha quede definido cuál será el monto del incremento. Si no se llega a un acuerdo, se seguirán las sesiones para estudiar las salvedades con las partes, y el 30 de diciembre quedará fijado por decreto el salario mínimo.