Tolerancia: los ángeles que cuidan a los médicos de Cali

Si bien algunos trabajadores de la salud han estado expuestos a casos de intolerancia en los que muchas personas por miedo o ignorancia los discriminan y rechazan, cada día son más las iniciativas que buscan solidarizarse y agradecer a estas personas que están dejando a un lado sus familias, amigos e, inclusive, su propio bienestar, por preservar la salud de miles de colombianos.

“Tenemos que facilitarles las cosas a los doctores, enfermeros y demás equipo de salud. Ellos necesitan de nosotros, así como nosotros necesitamos de ellos”, afirma Idelfonso Baraja, un taxista caleño que junto a un grupo de colegas decidió ofrecer servicios de transporte para estos profesionales.

“Los primeros días de cuarentena brindamos el transporte totalmente gratis al sector salud en reconocimiento a su esfuerzo y buscando darles un mensaje de que no están solos y que cuentan con nosotros. No nos pudimos sostener dando el 100 % de la carrera gratis porque también tenemos gastos, pero les estamos otorgando el 50 % de descuento”, explica Idelfonso, quien siempre se ha destacado en el gremio de taxistas por su excelente labor, de hecho, el reconocido libro ‘Yellow’, del escritor David Gómez, está inspirado en su historia.

“Aún se siguen escuchando relatos muy tristes de personal médico. Conocí la historia de una enfermera con cinco meses de embarazo que salió a las 7:00 p.m. de su trabajo, tras doblar turnos, a buscar transporte para ir a casa y no encontró. Le tocó quedarse a dormir en el hospital”, narra este caleño que expresa su preocupación de que el número de este tipo de casos aumente con el ‘Pico y vida’ impuesto por el Gobierno Municipal.

“Tan solo el primer día que se aplicó el ‘Pico y vida’ nos quedaron 20 solicitudes de servicios médicos sin poder prestar. A los que realmente afecta esta medida es al grupo del sector salud porque no tienen cómo movilizarse. Las rutas del MÍO destinadas para su transporte no pasan por muchos sectores donde viven varios de estos médicos o enfermeros”, señala.

En este sentido, la empresa vallecaucana ‘Biciusuarios’, siendo conscientes de esta problemática en movilidad y pensando en reducir los espacios potenciales de contagio para los expertos en salud, dispuso de forma gratuita el uso de sus bicicletas para médicos y enfermeros.

“El personal de salud puede tomar de forma gratuita las bicicletas que están ubicadas a lo largo de las once biciestaciones que tenemos en la ciudad, como la de Holguines, o solicitarnos que se las llevemos sin ningún costo hasta sus lugares de trabajo a través del correo info@cisnesolutions.com, adjuntando copia del carné y carta de cuarentena”, afirman Paola y Fernando Zúñiga, creadores de este emprendimiento.

Este tipo de trasporte además de proporcionar espacios de dispersión para el personal de salud y permitirles realizar actividad física, disminuye el riesgo de que sean contagiados por terceros en transportes masivos y no puedan ejercer su labor. “Cada médico o enfermero puede quedarse con la bicicleta tanto tiempo como la necesite. Con esto buscamos que sea de uso personal y no compartido”, dicen.

Adicionalmente, Biciusuarios ofrece 90 minutos de uso gratuito de sus bicicletas a las personas que requieran salir a abastecerse de alimento. “En este momento estamos usando ahorros de cada socio para continuar prestando este servicio a quienes más lo necesitan. Esperamos encontrar apoyos para continuar esta labor”.

Inclusive, algunos doctores, auxiliares, camilleros, entre otros, están recibiendo ayuda de parte de sus vecinos con las tareas del hogar. “Me han dejado notas ofreciéndose a ayudarme a cuidar a mis mascotas, a hacer mercado o demás vueltas que requiera hacer y que por tener que estar todo el tiempo en la clínica no pueda realizar”, comenta Javier Betancourt, médico de la Universidad Libre.

El sector gastronómico no se queda atrás y también ha ideado iniciativas para apoyar a estos héroes con bata.

Tal es el caso de la hamburguesería El Paso, que ha regalado más de 400 combos a personal médico. Andrés Román, propietario de este establecimiento de comida rápida, siempre quiso ser médico y aunque su vida tomó otro rumbo nunca ha dejado de admirar a los valientes que decidieron arriesgar sus vidas diariamente para salvar a los demás. Por ello, en medio de esta pandemia, decidió homenajearlos. “Tomé la decisión de hacerlos sentir importantes, demostrarles nuestro agradecimiento y apoyo”.

Además de obsequiar los 400 combos, Román tomó la decisión de sacrificar los ingresos de la empresa para ofrecerle un descuento del 55 % al HUV luego de que este hospital lo buscara como opción para brindarle servicio de alimentación a su personal.

Asimismo, el restaurante Café del Sol decidió aportar a su manera a la lucha que vive día a día el personal de salud. “En estos momentos debemos unirnos, ser solidarios y apoyarnos entre todos. Nos pareció que a través de nuestra comida sería bonito poner un granito de arena”, subraya Danny Oszerowicz, dueño del lugar.

Café del Sol inició la entrega de platillos en la Fundación Valle de Lili y ha logrado replicar la misma acción en otras clínicas de la ciudad. “Estas personas están sacrificando muchas cosas de su vida personal para ayudar a la sociedad, debemos apoyarlas, agradecerles y mostrarles nuestro reconocimiento. Se están sacrificando por la sociedad y la ciudad”, expresa al hablar de las razones que lo llevaron a desarrollar este proyecto.

Sin duda, el contexto en el que se encuentra el mundo actual hace necesario que la tolerancia, la unión y la empatía por el otro lleguen para ayudarlo a sobrellevar los estragos de la pandemia. Sobre todo, con aquellas personas que día a día se juegan la vida en los hospitales para asegurar nuestro bienestar.