Actriz francesa publica un libro en el que acusa de violación al cineasta Benoit Jacquot

En medio de los repetidos señalamientos que ha tenido la industria de cine francés por callar frente a los abusos sexuales contra menores de edad en la época dorada de esta industria, llega una nueva denuncia. Esta vez de una actriz, la francesa Isild Le Besco relató en una autobiografía publicada este miércoles 1 de mayo, que el director de cine, Benoit Jacquot, abusó física y sicológicamente de ella, cuando era adolescente.

Sin embargo, la mujer también aseguró que no está lista para iniciar un procedimiento legal. Las memorias de Le Besco fueron publicadas en un momento en que el cine francés está sacudido por acusaciones de haber mantenido durante muchos años un silencio sobre las agresiones sexuales en la industria, como es el caso de los señalamientos a Jacques Doillon y a Philippe Lioret.

Le Besco, de 41 años, acusó en febrero a Jacquot, de 77 años, de ejercer una dominación “destructiva” sobre ella hace décadas cuando la actriz tenía 16 años y él 52. En el libro, señaló que hubo violencia psicológica y física, pero no hizo mención a una violación.

Jacquot, director de películas como “Sade” y “Adiós a la reina”, negó cualquier abuso contra la actriz.

Le Besco señaló al director después de que la actriz Judith Godreche, de 52 años, acusara al conocido cineasta de violencia sexual en el marco de una relación cuando ella tenía 14 años y él era 25 años mayor. Godreche se querelló y hay una investigación en curso contra Jacquot, quien niega los cargos.

En sus memorias tituladas ‘Dire vrai’ (Contar la verdad) la actriz afirma que ella veía al director como su padre, y eso hizo que el abuso fuera más doloroso. “Es obvio afirmar que Benoît me violó (...) Yo era adolescente y confiaba plenamente en él. Ocupaba el lugar de mi padre, de mi madre y de cualquier otra figura de autoridad. En ese sentido, su violación también fue incestuosa”, escribió.

Además, Le Besco explicó en el libro por qué no quiere comparecer ante los investigadores. “No quiero verme confrontada de nuevo a estas instituciones vetustas, diseñadas y gobernadas por hombres”, afirmó.