¿Cómo entender a los ‘centennials’?: consejos de expertos para relacionarse con la ‘generación Z’

Por Isabel Peláez, editora de Vé y Juliana Londoño, reportera

En las recientes apariciones de Kylie Jenner —hermanita menor de las Kardashian— en la semana de la moda de París y en la gala de los Globos de Oro, no pasó desapercibido en redes sociales el nuevo look de la empresaria, quien aunque apuesta por una apariencia con menos maquillaje, su piel y facciones se tornan más adultas. Por ello, muchos internautas dicen que se ve mayor que sus hermanas, debido a los retoques estéticos.

Kylie, quien nació el 10 de agosto de 1997, pertenece a la generación Z, de la que hacen parte todos los nacidos en el periodo comprendido entre 1995 y 2010. Crecieron en medio del boom del internet, con un celular inteligente en la mano, exceso de información, la preocupación creciente por el impacto del cambio climático y la profesionalización de los influenciadores.

Saryth Valencia, MSc., psicóloga-directora del Programa de Psicología de la Universidad Icesi, explica que los integrantes de la generación Z son los denominados “nativos digitales”, porque su “normalidad” incluye la vida análoga y digital. Existen, interactúan, se relacionan, tanto en la realidad física como en la virtual. Quizás por esta forma de vida son tan sensibles a percibir la comunicación en doble vía y como ellos dirían, “literal” dos vías.

Según la experta, “la salud mental juega un papel prioritario en la vida de estos jóvenes, al punto que otras generaciones los voltean a ver con algo de incredulidad, tal vez, porque para nosotros la salud mental seguía en una realidad más íntima y menos visible”.

Ejemplo de ello, dice Saryth, fue el retiro de la gimnasta Simone Biles de los Juegos Olímpicos de Tokio en 2021, quien declaró públicamente que sufría de ansiedad.

“Nuestros jóvenes tienen una auténtica preocupación por la vida, la salud, el bienestar, la diversidad y son quizás estos temas los que más les fascinan para defenderlos en una suerte de activismo como forma de vida. Un rasgo muy marcado de cómo viven la rebeldía propia de la adolescencia y a su vez, nos da una pista para acompañarlos tanto en la familia como en el trabajo”, señala la psicóloga.

Ella invita a comprender su mundo interior, que muchas veces solo revelan en el plano virtual a través de sus cuentas en redes sociales, los videojuegos o los canales de streaming, donde consumen series y películas.

Respecto al futuro laboral, una de las preocupaciones de los padres de la generación Z, porque los ven dispersos, con baja tolerancia a la frustración o con intereses solo en las pantallas o con la inmediatez del mínimo esfuerzo, sin embargo, recientes investigaciones como la de Texas A&M University indican que la ‘Gen Z’ tiene un marcado interés por la generación de sus propios negocios o emprendimientos, alineados a sus causas personales, así como por desarrollar sus trayectorias laborales equilibrando su vida digital con la análoga, encontrando trabajos que impliquen dejar su huella en ellos, como en una suerte de personalización de su quehacer.

• “En el colegio sentía una gran presión por verme mayor. Mis compañeras se depilaban y maquillaban como profesionales desde que teníamos 12 años. Algunas querían que todas nos vieramos igual, como uniformadas. Pero en mi casa me decían que no se podía. Qué las niñas no se maquillan. Todos mis compañeros tenían celular, y mi papá decía que eso era consentirme, entonces siempre me sentía como excluía. Yo solo quería ser parte de algo”, María Camila García, estudiante de la Universidad Autónoma.

Gen Z Vs Millenials

Carolina Velásquez Montoya, coach y conferencista especialista en liderazgo, recomienda que hay que “tener claro cuál es la gran diferencia entre la generación Z y los millenials. Se cree que son una continuación el uno del otro, pero no, y en esto me baso en la investigación de Tim Elborne, uno de los grandes expertos hoy en día en el tema de las generaciones. Él dice que la gran diferencia es que los millenials crecieron con celular, pero la generación z lo hizo con un ‘smartphone’, un celular inteligente. Sienten que tienen todas las respuestas, que no necesitan a un tercero; mientras otras generaciones hacían las preguntas a los padres, ellos se las hacen a IA, Alexa y a Google”.

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Otro de los retos que enfrentan los Z, es tener que manejar la ansiedad y muchas veces no lo logran. “Se están viendo desórdenes, temas de salud mental, depresiones e incluso suicidios de gente muy joven, que en redes sociales se muestra muy feliz, y cuando vas a verla no hay tal felicidad sino un vacío muy grande. Cuando te enfrentes con la generación Z tienes que sentir y censar muy bien ese grupo; tener claro que el liderazgo tradicional de respirar en la nuca, el autoritario, el que nos tocó antes, no funciona con esta generación; hay que aprender a tomar distancia y darles el espacio suficiente, pero no quitarnos del todo, porque necesitan nuestra compañía, aunque no lo crean o no lo sientan, sí necesitan ese apoyo”.

“A pesar de que se vean muy atletas, internamente, emocionalmente y mentalmente están angustiados, ansiosos, con depresión y temen relacionarse con el otro, el deterioro va a verse en sus vidas y en sus cuerpos, haciéndolos ver mucho mayores”, argumenta la coach.

Las generaciones anteriores, analiza ella, “crecieron con sus padres y un adulto referente al lado, equivocándose y apoyándolos, pero no bajo la lupa de las redes sociales. Hay que entender todo lo que implica para esta generación Z que el mundo entero los vea y con el nivel de contaminación de información que hay en los distintos medios, los lleva a creer que ‘si no cumples unos parámetros, tú no haces parte o no vas a ser aceptado en un espacio, un grupo, un momento, y estás solo’, porque has vendido la idea de que tú sabes todo y tienes todas las respuestas. Eso genera un impacto muy grande en la salud mental, porque no tienen con quién hablarlo, deben procesarlo solos, sin la tranquilidad de poder expresarlo”.

Según la experta, las generaciones anteriores, “crecieron con sus padres y un adulto referente al lado, equivocándose y apoyándolos, pero no bajo la lupa de las redes sociales, todo lo que implica que el mundo entero te vea y el nivel de contaminación de información que hay en el medio, que te hace creer que si no cumples unos parámetros, tú no haces parte o no vas a ser aceptado en un espacio, un grupo, un momento, y estás solo, porque has vendido la idea de que tú sabes todo y tienes todas las respuestas. Eso genera un impacto muy grande en la salud mental, porque no hay con quién hablarlo, se tiene que procesarlo solo, sin la tranquilidad de expresarlo”.

• “Dicen que soy generación Z combinada con Millenial. Dicen que estábamos atrapados en una línea generacional. Siento respeto por la figura de autoridad. Pero no respeto un jefe que no se ponga la camiseta, se muestre como superior y que se tenga que hacer lo que él diga. Para mí un líder deber ser más una guía. Me sensibilizan mucho los temas que tienen que ver con niños, ancianos, animales, abusos, hambre y abandono”, Paola Satizábal, universitaria caleña, madre de dos hijos.

Una vida en la inmediatez

“Siempre estamos comparando, y por lo general, todo aquello que sale de las creencias o el esquema conocido intentamos a veces descalificarlo. Todo lo que proviene de la Generación Z parece negativo, pero lo importante es mirar qué representan ellos para el mundo. Probablemente sus cuerpos son más maduros. Van a tener una proyección de vida mayor. Comparándolo con el pasado, tienen un cuerpo de 30 a sus 20 años, es una medida de comparación del pasado”, dice la psicóloga Gloria Hurtado.

Ella se cuestiona: ¿Quién dijo que lo nuestro era mejor a lo de ellos? Era distinto. “Pienso que cuando se miran esas generaciones se les suele critica mucho porque no son como las de antes”.

Lo más importante, dice la experta, es que son diferentes y tenemos que darles el espacio para que construyan su propia identidad. Están pegados a las redes, la necesidad de contacto es distinta. No van a ser personas estables donde duren 10 o 20 años en un trabajo, van a estar cambiando constantemente de empleo. Aún más, las mismas universidades no las van a satisfacer porque son personas de emprendimiento, no de estudio de cinco años. Van a vivir de la experiencia instantánea, en una inmediatez muy grande porque el mundo de ellos es diferente totalmente ante sus padres”.

Para Gloria H., la mirada más sana y equilibrada es el respeto por la diferencia, aceptarlos como son. Agrega que la ansiedad y la angustia que les genera la vida es precisamente “por la calidad del mundo que les estamos entregando. Entonces cómo les pedimos que no tengan ansiedad, ataques de pánico o depresión, si somos los mayores quienes les estamos entregando un mundo desequilibrado y les estamos diciendo ‘arréglenlo ustedes, se los damos mal, pero qué vaina si ustedes se deprimen’”.

Hay una responsabilidad de los adultos, agrega la psicóloga, “estos muchachos tienen que crear un nuevo mundo, y hay que dejarlos que ensayen. Van a tener crisis, fracasos, pero con seguridad, no van a querer repetir muchas de las cosas de nosotros: ni los matrimonios, ni tener hijos, ni estudiar en las universidades, ni trabajos para toda la vida, ni siquiera la obsesión material por tener una casa, por quedarse quietos, el mundo de ellos vive en continuo movimiento”.

Gloria H. advierte que algo que estamos en mora de entender las generaciones pasadas es que una característica propia de los Z, es que “no se enamoran de género, sino de personas. Pueden cambiar de pareja, tener hombres, mujeres o transgénero, porque lo importante es cómo se conectan con el interior, no con el empaque cuerpo, allí manejan una sexualidad muy diferente, eso para ellos no es preocupación”.

Los rastros del bisturí

Zoom boom y un rostro diferente

La Generación Z está optando por procedimientos de cirugía plástica en números récord, según la Academia Estadounidense de Cirugía Plástica y Reconstructiva Facial. El 75 % de los cirujanos informó un aumento en la demanda de clientes menores de 30 años, a medida que se incrementa la popularidad de los rellenos de Botox, las exfoliaciones químicas, las microagujas y otros procedimientos, mínimamente invasivos, entre la gente más joven. Los expertos dicen que la pandemia fue una de las razones de este aumento, citando el “Zoom Boom” como una fuerza impulsora.

¿Cómo acercarse a un Z?

Consejos

• Hacer preguntas, que les hagan sentir a ellos que realmente hay interés en conocerlos e ir más allá.
• Es importante escucharlos, no solo dedicarse a hablar y contar anédotas, como a hablar con las generaciones X y. Escuchar y sentir, para identificar lo que está pasando con esa persona.
• Empatizar, tratar de entender y ponerse en sus zapatos, ir al fondo de lo que están diciendo, desde la posición de ese otro, que es alguien muy joven.
• Guiar, llevar de la mano, acompañarlo, darle su espacio pero estando presente.

Consejos ofrecidos por Carolina Velásquez, coach.

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