El legado musical que dejó Omar Geles, quien pasó de Diablito a ángel

Los caminos de la vida no son como yo pensaba, como los imaginaba; no son como yo creía. Los caminos de la vida son muy difícil de andarlos, difícil de caminarlos y no encuentro la salida”.

Así dice la composición cumbre de Omar Antonio Geles Suárez, la cual vio la luz hace 32 años y ha sonado en los lugares menos pensados del mundo. La han cantado artistas como Vicentico, de Argentina, o la mexicana Lila Downs, entre otros artistas que se enamoraron de su sentida letra.

El artista de Valledupar, fallecido el pasado 21 de mayo —a raíz de un paro cardiorrespiratorio en la tarde del 21 de mayo, a los 57 años—, escribió hace más de tres décadas, la sentida letra de Los Caminos de la Vida. En esta rememoró una niñez en la que su madre Hilda Suárez, fue la heroína, una mujer que levantó una familia sin el apoyo del padre. Ella recibió ese homenaje de su hijo en vida: “Porque mi viejita ya está cansada de trabajar pa’ mi hermano y pa’ mí. Y ahora con gusto me toca ayudarla, y por mi vieja lucharé hasta el fin”.

Existen 34 versiones de aquella canción, grabada en 1993 por Los Diablitos, Omar Geles y Jesús Manuel Estrada, siendo uno de los vallenatos más escuchados, al lado de ‘La gota fría’. Otros éxitos del vallenato que compuso fueron: ‘Y no voy a llorar’, ‘Cuatro rosas’ (Jimmy Zambrano y Jorge Celedón), ‘Tarde lo conocí’ (Patricia Terán), ‘El amor más grande del planeta’ (Pipe Peláez) y ‘La falla fue tuya’, ‘No intentes’ y ‘No puedo vivir sin ti’, para Diomedes Díaz.

Cuando Omar la presentó a su sello discográfico Los Caminos de la Vida, no querían grabarla porque era muy directa y personal, pero gracias a su insistencia, hoy en día es un clásico. Y Omar le cumplió la promesa a su madre; por más de tres décadas y media trabajó y trabajó, creando cerca de mil canciones del género vallenato.

El hijo de doña Hilda nació para la música. Desde los cinco años empezó a interpretar el acordeón, consolidándose como el Rey Vallenato Infantil, Rey Vallenato Aficionado, en 1987, Rey de Reyes en la misma categoría y Rey Vallenato en 1989. Desde la ejecución de este instrumento lideró por más de dos décadas la agrupación ‘Los Diablitos’, siendo su principal compositor y arquitecto del nuevo sonido en la música vallenata. “Lo que mejor hago es tocar el acordeón, pero luego descubro que Dios me dio el don de componer. En 1986 empiezo a escribir y me empiezan a grabar diferentes grupos vallenatos”, contaba.

Cuando aceptó el llamado de Dios aseguró que no podía continuar con una agrupación que llevara el nombre de ‘Los Diablitos’, la dejó y creó la suya: ‘La gente de Omar Geles’. Pero sus fans insistían en llamarles con el nombre original. Por eso, en diciembre de 2009 terminó ese proyecto musical y se lanzó como solista, dejando a un lado el acordeón, sólo en los escenarios. “El testimonio más bonito que le puedo dar a la gente es que cumplirle a Dios sí paga. Cuando decidí terminar de verdad con ‘Los Diablitos’ y lanzarme como intérprete, las cosas han salido mucho mejor de lo que esperábamos. Vale la pena cumplirle a Dios”, dijo. “Cuando tomo la decisión de terminar con ‘Los Diablitos’, y veo que compadres como Felipe Peláez, quien también es compositor, hizo su grupo y otros colegas seguían por ese camino, me dije: ‘Si tengo el repertorio, ¿por qué no canto yo mis propias canciones?’. Lo hice y se volvió un boom”.

Geles era uno de los artistas vallenatos que más tocaba por todo el país, y su agenda estaba colmada de presentaciones, por lo que muchos afirman que de ahí su descuido en su estado de salud. Dos centenares de sus composiciones fueron número uno en las emisoras vallenatas del país. Junto a ellas, el repertorio que por más de dos décadas construyó con ‘Los Diablitos’, ha cobrado relevancia en los últimos años.

Como cantautor, se desprendió de muchas de sus canciones, para que otros las interpretaran y aceptó que eso le costaba: “No pensé que fuera tan difícil, pero ahora lo es. La verdad es que no voy hacer desagradecido con ellos que por años han grabado mis canciones y las han convertido en éxito. Yo espero que Dios me regale una nueva canción para mis discos”.

‘Mi amor por ella’ fue la primera canción que le entregó a Silvestre Dangond hace 21 años, luego llegaron ‘A blanco y negro’, ‘Gracias’, ‘Me Gusta, me gusta’, ‘La Traga loca’ y ‘Las locuras mías’, entre otras. En el concierto de Dangond en el Campín, el pasado sábado este le dijo: “Media carrera mía está en tus manos, negro”. Y Geles expresó: “Si algo me llega a pasar en la vida quiero que me recuerden con esta canción, que me grabó mi compadre Silvestre” y cantó con varios colegas: “Y tú eres la que puede pintar con mil colores mi mundo a blanco y negro, borrar mis decepciones”. Once días antes de su deceso, lanzó: ‘Lo que vivió mamá’, dedicada a su mamá y Maren García, su esposa y madre de sus hijos: José Juan, José Mario e Isabella.

Algunos de sus temas

Los Caminos de la Vida (grabado por Los Diablitos).

‘Cómo le pago a mi Dios’, interpretada por ‘Los Diablitos’.

‘La aplanadora’, por Jorge Oñate.

‘Tarde lo conocí’, la compuso para Patricia Teherán.

‘El amor más grande del planeta’ (Felipe Peláez).

‘Cuatro Rosas’ (Jorge Celedón).

‘Duele’ (Daniel Calderón).

‘Como te pago’ (Iván Villazón).

‘No puedo’ (K-vras).

‘La aplanadora’, Jorge Oñate.

‘Por querer olvidarte’ (Nelson Velásquez).

‘Como le doy mi vida’ (Peter Manjarrés).

‘Pueda ser que no me extrañes’ (Diomedes Díaz & Juancho de la Espriella).

No Intentes, Con Mucho Gusto, Diomedes Díaz.

A Karen Lizarazo le iba a componer las canciones de su próximo álbum.

Duelo vallenato

HOMENAJES

Ayer en la mañana, el cuerpo de Omar Geles fue trasladado desde la clínica Erasmo hasta el auditorio de la biblioteca departamental Rafael Carrillo Lúquez, de Valledupar, adonde acudieron colegas, seguidores, familiares y amigos.

Las autoridades del departamento decretaron día de duelo por el inesperado fallecimiento del reconocido cantautor.

En la tarde de ayer, en la plaza Alfonso López se llevaron a cabo los homenajes musicales de sus colegas.

Hoy, a las 9:30 a.m., habrá allí una ceremonia religiosa. El sepelio será a las 11:00 a.m., en el cementerio Jardines del Ecce Homo.