Entretenimiento
Esperanza Gómez habla sin tabú sobre los encuentros sexuales “sin amor” en su podcast con Flavia Dos Santos
La actriz de cine para adultos sigue hablando sin tapujos en su segmento radial.
Esperanza Gómez y Flavia Dos Santos se han convertido en dos mujeres muy importantes en el país, no solo porque cada una es muy talentosa en su área laboral, una como actriz de cine para adultos y la otra como terapeuta, sino porque ambas han ido demostrando su amplio conocimiento sobre la sexualidad y más que todo la femenina, empoderando a mujeres a ser dueñas de sus sentimientos, sensaciones, experiencias y obviamente de sus orgasmos.
Cada una se ha labrado su propio camino en la industria de la farándula y el entretenimiento y ahora unen esfuerzos en el podcast Del saber la hacer, donde pretenden hablar sin ningún tabú de temas relacionados con el sexo, sin dejar a un lado la parte pedagógica, pues tanto para Flavia como para Esperanza es importante que no solo la pornografía y las experiencias particulares de personas cercanas le enseñen a las personas cómo vivir su sexualidad en plenitud.
El podcast que se puede escuchar por plataformas como Spotify ya cuenta con dos capítulos y no le ha bastado más para ser uno de los más escuchados en toda la plataforma. Allí, en estas dos entregas, la brasileña y la caldense han hablado sobre dos temas específicos: el sexo con o sin amor y el preámbulo al encuentro sexual, siempre basadas en algunas teorías académicas y en sus mismas experiencias.
Lo primero que le indagó Flavia a Esperanza fue sobre si creía en el amor, concepto manejado desde muchos niveles, pero que sigue siendo tan subjetivo como el gusto por los colores. “No hay nada más bonito que tener una interacción sexual que alguien con quien tienes sentimientos. Las sensaciones son completamente diferentes”, declaró la actriz, dejando muy claro que también tiene muy presente que dentro de la equidad de género también entra la libertad sexual. “Si estamos luchando por la liberación femenina, en cuanto a la igualdad, ¿por qué el hombre puede tener sexo sin amor, y por qué la mujer solo puede tener sexo con amor?”.
Planteada la tesis de este capítulo del segmento radial por las dos famosas, es Esperanza quien empieza a desglosar su pensamiento y a contar algunas intimidades propias de sus relaciones de pareja. “La diferencia entre mi trabajo, que es tener sexo por placer frente a una cámara; y cuando yo tengo sexo con mi pareja, por amor”, añadió Gómez, planteando un escenario mucho más palpable para marcar la diferencia entre el sexo por placer y el sexo con amor.
Ahora, Flavia fue un poco más allá y quiso tocar el tema de la “agresividad” y la “pasión salvaje” en los encuentros sexuales y si esto solo se daba en los momentos en que se tenía intimidad solo por placer, un tópico que cautivo mucho la atención de la caldense, quien ha experimentado por cuenta propia las dos modalidades de relaciones sexuales con una pareja con la cual tiene sentimientos involucrados.
“Yo siento que uno tiene un objeto de placer cuando lo hace con la persona que está enamorada. Hay momentos. Está el sentimiento de ternura, de cuidado y de ser amable con su pareja. Pero en la cama de repente sale ese animal salvaje. Yo tengo sexo salvaje con mi pareja de la que estoy enamorada y que lo hago con ese sentimiento, con ese amor, pero al mismo tiempo con esa violencia, esa brusquedad”, añade Esperanza.
Finalmente, llega el momento de hablar de la duración de las relaciones sexuales y Flavia, con teóricos que la soportan, afirma que una relación sexual, en promedio, dura siete minutos y medios, siendo este el tiempo perfecto para una lubricación femenina natural, una penetración masculina constante y un orgasmo mutuo consumado.
Esto conmocionó a Esperanza, quien sorprendentemente reconoció que ese tiempo es “muy poquito” para lo que ella necesita cuando tiene intimidad con su pareja. “Me pongo a llorar con solo siete minutos, quedaría insatisfecha. Mi marido gringo, que es un gran amante, sabe que a los siete minutos apenas estoy empezando. Y yo no uso lubricantes químicos, mi pareja usa la saliva, que además es más especial y te conecta más con tu pareja”, añadió la actriz.