Fruko en su salsa: el maestro celebró sus 60 años de vida artística en el barrio Obrero de Cali

Por Johana Fiallo, periodista de el país

“Sonriente viene “el Fruko”, por las calles de un lugar. ¡Badaba da badaba da badaba pa! Galante luce su traje, por las calles de un lugar”, así, llegó este domingo, al barrio Obrero, el gran maestro salsero y leyenda viva de la salsa, Julio Ernesto Estrada Rincón, conocido como Fruko, en medio del jolgorio caleño.

Llegó con la ‘percha’ puesta, listo para el baile que en su honor se gestaba, como un gran homenaje a sus 60 años de vida musical.

Con un gran montaje escénico, y una amplia muestra comercial en torno a la salsa, el barrio Obrero se vistió de fiesta y guaguancó, desde horas previas a la llegada del maestro, en lo que fue también la activación de la ‘Ruta de la Salsa’, iniciativa gestada por parte de la Alcaldía de Cali.

‘Fruko: 60 años haciendo bailar al mundo’ fue el nombre de esta actividad que contó con un gran concierto de orquestas invitadas, shows de baile, encuentro de melómanos y también de melómanitos.

“Estas son acciones que enriquecen la identidad cultural del país, convirtiendo a Cali como referente salsero a nivel mundial. Gracias al respaldo de la Alcaldía de Santiago de Cali, la Secretaría de Cultura, la Secretaría de Turismo, la Secretaria de Desarrollo Económico, la EDRU y el Museo de la Salsa, se celebra el pasado, presente y futuro de la salsa caleña, reafirmando su lugar en el corazón de la cultura colombiana y en el escenario musical mundial”, destacó Leydi Higidio, secretaria de Cultura.

La jornada inició sobre las dos de la tarde del domingo, con la presentación musical de la ‘Orquesta Marea Brava’. Luego el Dj Marlong, puso a azotar baldosa hasta el más tímido de los presentes.

Allí, bailaoras y bailaores hicieron lo propio, se unieron al unísono salsero con sus pies, mientras el colorido de sus trajes hizo eco de la alegría de un género que se resiste a morir en Cali.

Así fue avanzando el homenaje a un hombre que junto a sus ‘Tesos’, Conformó una Fania Colombiana que le dio vida a grandes éxitos como El Preso, Los Charcos, A la memoria del muerto, entre otros temas musicales, siempre “zapateables”.

Y mientras la fiesta ganaba adeptos, y el maestro de origen antioqueño, calentaba motores, la cultura se tomaba el escenario.

Un conversatorio entre las secretarias de Turismo y Cultura, Mabel Lara y Leydi Higidio, con Fruko como protagonista de una jornada decidida a revivir la historia de la salsa, mantuvo atento a un público cada vez más joven.

“Vamos a contar una pequeña historia de lo que han sido 60 años de música. 60 años de historia sintiéndome muy orgulloso de estar en Cali, con gente siempre tan amable”, sostuvo el maestro Fruko, considerado por muchos un precursor de la salsa nacional y el primero que se atrevió a incursionar en el ritmo arrebatador que en los setentas sólo hacían los músicos puertoriqueños y newyorquinos.

Al respecto, Carlos Molina, Director del Museo de la Salsa, y uno de los hombres detrás de tan honroso homenaje al maestro Fruko, no tenía más que palabras de agradecimiento para quien hoy prende la rumba de manera oficial con la Ruta de la Salsa, un paso obligado en Cali para propios y visitantes.

“Gracias al maestro Fruko por aceptar la invitación para venir a celebrar sus 60 años en el Barrio Obrero. Cali es la capital de la salsa gracias a los sonidos de Fruko, y todos aquellos que han hecho parte de la historia musical salsera”, dijo Molina.

Y añadió, “la iniciativa surgió gracias al Museo de la Salsa, y a partir de ello, junto con la Alcaldía pudimos tener a este maestro ‘Fruko y sus Tesos’, en la ciudad de Cali. El maestro Fruko se dio cuenta de que, el barrio Obrero es el origen de todo lo que representa la historia de la salsa en Cali, y el mundo. Cuando me dijo: yo me voy para allá, quiero celebrar mis 60 años con el pueblo, con el barrio, en las calle, fue muy importante para nosotros. Sin Fruko, la salsa colombiana no hubiera existido. Así que, como dijo Guayacán: ‘el que viene al barrio Obrero, se vuelve rumbero’.

Y cómo dice la canción de Willie Rosario, “Del Barrio Obrero a la 15, un paso es. Cantando bajito, yo me iba a pie”. El barrio obrero está de moda vé.