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“He recibido ayuda de ella”: prima de Karol G que está en la cárcel, reveló cómo fue su reencuentro
A Karol G la impulsa su familia.
Carolina Giraldo Navarro, conocida artísticamente como Karol G, es una de las mujeres más exitosas en la actualidad. Su destacada trayectoria le ha permitido a la colombiana ganarse el cariño, el amor y la admiración de millones de personas a nivel internacional.
A sus 33 años, esta mujer, también, ha sido catalogada como una de las artistas de moda e inclusive, su música se ha vuelto un himno en diferentes lugares del mundo. Pese al rotundo éxito, el camino de ‘La Bichota’, como la conocen sus fanáticos, ha estado rodeado de obstáculos, los que bien ha sido superar.
De hecho, la artista ha dejado claro en varias ocasiones que su familia es el motor y el impulso para desarrollar todos sus proyectos. Es por ese motivo que se le ha visto muy cercana a sus padres y a sus hermanas, al igual que al resto de familia.
Pero de lo poco que se habla es sobre otros familiares como Diana Giraldo, quien es prima de la famosa cantante.
La mujer se encuentra privada de la libertad, cumpliendo, además, una larga condena de 26 años por secuestro extorsivo. Y aunque le falta poco más de la mitad (16 años) para salir, la prima de ‘La Bichota’ ha encontrado un refugio en la música.
Hace algunos meses, Karol G visitó la cárcel de El Buen Pastor, lugar en el que la vida le dio la oportunidad de reencontrarse con su prima. Todo sucedió en medio de una presentación.
Diana Giraldo se encontraba en el patio al que llegó la paisa y su día cambió. “Fue un día muy especial porque llevábamos mucho tiempo sin hablar, sin vernos, más de 8 años”, recordó.
Agregó: “Pero una vez viene acá, yo me paré ahí en la reja en el patio donde yo estaba, cuando la gente dice: ahí viene Karol G; y yo a la primera que veo entrar es a Jessica, mi otra primita y la empiezo a llamar, ella mira para todos lados y cuando me ve se para ahí en la reja, se toca la carita y se pone a llorar, luego ella ya me ve (Karol G)”.
“Fue un momento muy bonito porque es un lugar donde uno no quiere ver a nadie, menos a un familiar, a un conocido, una persona que uno aprecia no lo quisiera ver nunca en la cárcel. La vida es de oportunidades y esa fue una para mí en su momento; poder tener ese encuentro con ella, manifestarle ciertas cosas, que yo estaba necesitando y que he recibido una ayuda por parte de ella”, se reveló en el Pódcast La Celda, de Johana Bahamón, en el periódico El Espectador (ver aquí)