¿Inapetencia sexual? La falta de deseo puede estar relacionada con múltiples causas

La disminución del deseo sexual, tanto en hombres como en mujeres, es uno de los principales temas en la consulta con los sexólogos.

El bajo deseo sexual tiene mayor prevalencia en mujeres, en todas las edades, hay estudios que reportan que en Colombia hasta un 20 por ciento de la población femenina, entre los 20 y 49 años, ha pasado por etapas de deseo hipoactivo (disminución de interés por el sexo), esto ligado directamente a que la sexualidad femenina ha sido desde siempre restrictiva.

“Respecto a los hombres, pocos estudios se han realizado, pero esto puede ser más asociado a creencias culturales sobre que los hombres siempre tienen deseo sexual. Por último, en el caso de la comunidad Lgbtiq+, los estudios son muy escasos y cuando se han realizado, se focalizan en la población con VIH lo cual no nos da muchas luces en el presente”, indica Marcela Castro, sexóloga adscrita a la plataforma Doctoralia.

“Hay muchas causas que generan el deseo sexual o la falta de líbido, o la baja líbido, uno es que biológicamente venimos preparados para que entre más actividad sexual tengamos, más autoestimulación, más encuentros sexuales, más estímulos a través de pornografía y diferentes motivadores o incitadores, nuestro cuerpo va a pedir más, y se va a generar más líbido”, explica Paula Dávila, psicóloga caleña.

“Si se baja el ritmo de la sexualidad, precisamente la masturbación permite que la persona mantenga un ritmo constante así no se tenga pareja, esto hará que haya un mayor deseo y habrá más posibilidad de que se mantenga un mejor nivel”, agrega la especialista.

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“La inapetencia sexual también puede deberse a la relación en sí; a no entenderme con el otro, o que como pareja no disfrutamos mucho, no se están fomentando espacios dentro de la rutina o no se dan las condiciones apropiadas, entonces si el sexo no está siendo placentero, es probable que cada vez se quiera repetir menos. Esto hace, por ende, que se tengan menos encuentros sexuales, y debido a la falta de repetición es fácil caer en una muy baja frecuencia sexual”, asegura Dávila.

Indagando sobre las causas, se deben tener en cuenta muchos factores. “Partamos de que las personas somos complejas y el deseo es muy variable y subjetivo, cambios en diferentes ámbitos de la vida, pueden llegar a afectar el deseo sexual en las personas”, afirma la especialista Marcela Castro, sexóloga adscrita a Doctoralia.

Entre lo que se analiza en la consulta están los factores fisiológicos, como la fatiga, el climaterio o embarazo, que inciden en la inapetencia sexual.

La baja líbido también puede deberse a causas médicas como menopausia, diabetes, depresión, ansiedad. Incluso al uso de algunos medicamentos, en especial antidepresivos o ansiolíticos.

Otros factores que inciden en la inapetencia sexual son los psicológicos o emocionales. Es decir, si la persona tuvo una educación sexual restrictiva, o tiene baja autoestima, estrés, creencias culturales, experiencias traumáticas como situaciones de abuso, en fin, esto inhibirá su deseo.

También cabe analizar el estado de la relación de pareja: si hay constantes conflictos, algún tipo de abuso, han caído en la rutina o hay un gran déficit en la comunicación sexual, esto puede estar disminuyendo las ganas. También es importante ver si no hay otra disfunción sexual, en ese caso hay que consultar al médico.

“Debemos entender que la sexualidad no va aparte del resto de nuestra vida, sino que según lo que va ocurriéndonos a lo largo de esta, nuestra sexualidad también se verá afectada. Esto lo digo porque muchas personas, al primer cambio en su sexualidad, asumen que algo está pasando y que ya tienen problemas sexuales y no debe ser así necesariamente, puede ser porque se está cansado, esté pasando por un momento de estrés o dificultad en su vida, o solo es que no se concentra”, indica la sexóloga Castro.

En consulta con el especialista se suele analizar si esta ausencia de deseo se está presentando de forma recurrente y si la excitación, las fantasías, y hasta el auto tocamiento erótico han tenido disminución.

La disminución del deseo sexual generalmente se vuelve problemática cuando la persona con bajo deseo se encuentra en una relación de pareja, “estas discrepancias también se deben analizar, porque también veo personas con deseo sexual, pero en contraste con su pareja creen que tienen bajo deseo y no”, agrega la sexóloga adscrita a Doctoralia.

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Consejos

• Busque inductores de deseo, como lecturas, películas, materiales eróticos, para fortificar las fantasías eróticas, trabajar en el autoerotismo.
• Favorezca las experiencias sensoriales, mejore la comunicación sexual y promueva las conductas agradables entre la pareja que fortalezcan la intimidad. Permítase momentos de descanso. Tenga otros contactos íntimos con la pareja como masajes, hablar o ver películas en el sofá.
• Busque ayuda de un profesional en caso tal de que esto tenga origen en pensamientos negativos, creencias, crianza y experiencias traumáticas.