Juan Pablo Raba en Distrito Salvaje: "con esta serie tuvimos la oportunidad de aportar al país"

Distrito Salvaje, primera serie original de Netflix producida en Colombia y protagonizada por Juan Pablo Raba, cuenta la historia de Jhon Jeiver, un guerrillero que deja la selva luego de firmarse un acuerdo de paz entre la guerrilla y el gobierno colombiano. Una vez en Bogotá, alias Yei Yei intenta integrarse a la sociedad para ganarse la vida honestamente y reconectarse con su familia, pero su antigua vida lo alcanza.

¿Qué tan familiarizado estaba con el área rural de donde proviene el personaje de Yei Yei?

Realmente no lo estaba, fue todo basado en investigación, pero también hubo mucho de mi imaginación, nunca me quise casar con una región de Colombia, cuando me entrevisté con algunos desmovilizados, muchos no tenían acentos muy marcados y no podía identificar de dónde eran. Y es que si una persona lleva 30 años mezclada con otras desde niño, itinerante, no tiene un acento tan marcado. Decidí que tuviera una esencia rural sin que se supiera su origen. No quise casarme con un sentido del humor, ni con dichos de una región sino ser más ambiguo.

¿Cuál ha sido su mayor reto con su personaje de Yei, Yei?

En primer lugar, crearlo. Todo lo que se había visto de mi trabajo hasta entonces había sido muy diferente, así que el reto era hacer que la gente creyera que yo era ese personaje. Y en segundo lugar, cómo hacer que un personaje con esta historia de vida, con ese pasado y ese presente, pudiera generar empatía en las personas, cómo hacer para que un guerrillero que no es ningún santo pudiera generar algún tipo de empatía en el público y en nuestro equipo de trabajo. Es el personaje más complicado que me ha tocado interpretar y, sin duda, el más satisfactorio.

¿Qué mensaje siente que deja Distrito Salvaje en los colombianos?

Siempre funciona hacia los dos lados, los cambios son hacia lo positivo, una visión positiva, esperanzadora, de que las cosas pueden mejorar, de que podemos perdonar, de que la paz es viable. La serie también te deja muchos pensamientos desafortunadamente negativos. La serie nunca pretendió ser un espejo de la realidad social del país, tipo documental, sino una serie de ficción de mero entretenimiento que utilizando el marco actual sociopolítico del país creó una historia. Claramente se encuentran similitudes entre la historia de Distrito Salvaje y la realidad del país, pero también hay muchos parecidos con la realidad de la región; y es que cuando ves las noticias todos los países tienen problemas de corrupción, de violencia, de incumplimiento. Como estamos hablando de Colombia y nuestro público principal es colombiano, es más fácil sentir esa similitud.

¿A usted qué mensaje le deja?

A mí la serie me deja la esperanza de que podamos hacer las cosas mejor, que entendamos que en un país con los niveles de impunidad y corrupción es viable. Ojalá que la gente con nuestras historias, no solo la de Yei Yei sino la de nuestra fiscal y de los demás personajes puedan entender eso. Eso es lo más bonito, sabes, que un proyecto audiovisual que nunca pretendió ser espejo ni aleccionador para nadie, la gente sí lo esté tomando de esa forma y haya cambiado, incluso, muchas de las formas de pensar que la gente tenía.

Lea también: Así es 'Litigante', la película que explora las complejas relaciones familiares

¿Cómo se ha ido transformando Yei Yei? ¿Qué podemos esperar en esta nueva temporada del personaje?

Yei Yei empieza a progresar, a volver más el ciudadano que siempre fue, porque era lo que él quería. Fue muy interesante cuando termina la primera temporada y te trasladas seis meses en el tiempo y en ese ejercicio que hice yo para el personaje, te sentas a pensar cómo es el Yei Yei de ahora, el que está viviendo con su novia, cómo es su relación ahora con su trabajo, cómo lleva el tema de que su hijo no esté. Claramente como la situación de Yei Yei es tan extrema, su vida se torna muy interesante.

¿Cómo ha sido para usted, padre de dos hijos pequeños, personificar al papá de un hijo adolescente?

Utilicé más que todo algunas emociones. Pero creo que yo tengo una vivencia sumamente diferente a la de Yei Yei en mi familia, en mi día a día, es difícil que pueda trasladar algún tipo de vivencia personal hacia esa paternidad de Yei Yei. Es más un tema de imaginación y de crear, artísticamente hablando, cómo ve la relación de un personaje de estas características con ese hijo que también tiene unas particularidades.

Distrito Salvaje se presenta en un momento de posconflicto en Colombia, ¿Qué le aporta la serie a la discusión en medio de ese proceso?

Siento que con Distrito Salvaje, no solo yo sino todos mis compañeros, tuvimos la oportunidad de aportar algo muy importante al país, generamos conversación con Distrito Salvaje, logramos que la gente realmente hablara de un tema, que pese a estar tan presente pareciera que fuera un poco tabú, y lo hubiéramos traído a la mesa y que las personas se preguntaran cosas como: “‘¿Oye, si yo conociera un personaje así yo lo podría perdonar?” “¿Lo contrataría para un trabajo?” Preguntas tan sencillas, que están ahí todos los días, pero que no nos hacemos, tal vez por lo complicado del tema.

Lea además: La serie 'Narcos' será emitida por el canal A&E en Colombia

En esta temporada se sabrá por qué Caldera volvió a llamar a Yei Yei, a dónde huyó Apache y cuáles son los intereses de Caldera con la candidatura de Daniela León.

¿Y a usted qué le ha aportado en particular esta serie en cuanto a su percepción del posconflicto?

Cuando veo los mensajes que me mandan los espectadores diciéndome que este proyecto les ha cambiado completamente su visión sobre lo que era un guerrillero, o sobre el perdón o las segundas oportunidades, más allá de las ideas o de lo que cada uno piense, todo es muy válido, porque para eso está el arte, para que nos veamos reflejados en ese espejo, para que podamos ver el mundo y a las personas de forma diferente, para que nos abramos a la experiencia de conocer cosas diferentes a lo que siempre hemos vivido o que damos por hecho.

Eso que está pasando para mí es muy emocionante y muy bonito. Por eso creo que lo que me ha dado esta serie es ese sentimiento de que realmente pusimos nuestro granito de arena en Colombia y en este proceso de paz que estamos viviendo.

En la serie se ve mucho que el bueno no es tan bueno y el malo no es tan malo, y en eso se refleja también la realidad...

Claramente. Y es que nuestro creador, Cristian Conti, se centró en mostrar esa realidad humana, que no tiene nada que ver con Colombia, sino que tiene que ver con la humanidad misma, con la esencia del ser humano, y es que nada es blanco o negro, todo tiene matices y Distrito Salvaje es una historia llena de matices en donde alguien que consideramos que es bueno terminó siendo alguien que no es bueno, pero que te pone a pensar que si no hacía eso entonces cómo iba a poder alcanzar algo que es muy bueno para él o para su familia.

Es fascinante escuchar los comentarios que hace la gente en torno al personaje, porque aunque Yei Yei nunca fue pensado como un héroe, todo lo contrario, está construido, concebido y escrito como un antihéroe, por las circunstancias de la historia la gente lo ha empezado a ver de otra manera y ha sido muy bonito leer los mensajes sobre lo que el personaje inspira.

Esta vez la historia se desarrolla seis meses después del ataque a Daniela (La fiscal, interpretada por Cristina Umaña), quien se embarca en una carrera presidencial donde los enemigos se esconden en cada esquina y su seguridad y la de su familia podría verse comprometida.

Yei Yei intenta continuar con su vida normal con Vero, pero su paz y tranquilidad se ven interrumpidas cuando es enviado una vez más a otra misión, pues la seguridad nacional y el futuro político están siendo manipulados por un titiritero invisible del cual no se conocen sus verdaderos intereses.

Juan Fernando Sánchez, Paula Castaño, Camila Sodi y Christian Tappan son otros de los actores que hacen parte del elenco de la serie de acción ‘Distrito Salvaje’, de Netflix.