La banda Kraken celebra 40 años de historia con un concierto en Cali

Por L. C. Bermeo Gamboa, reportero de El País

Dice la leyenda que en el año 1984, en una Medellín sometida por la violencia del cartel y las convenciones sociales, un grupo de jóvenes rebeldes decidieron crear una banda de heavy metal con líricas en español, donde se reivindicara la libertad y la creencia sí mismos, para superar los prejuicios sociales y crear un mundo mejor.

Así nació Kraken, la banda más importante del metal en Colombia, que se convirtió en una institución del rock liderada por el legendario vocalista Elkin Ramírez “El Titán”, fallecido en 2017, pero que dejó el mandato a sus músicos de continuar su legado y seguir dejando huella.

Por esta razón, en 2018, con Roxana Restrepo como nueva vocalista, Kraken retomó con “un nuevo aliento” su camino musical que, para el 2024, alcanzó los 40 años de historia.

Para celebrar su cuadragésimo aniversario, Kraken realizará una gira nacional llamada “Los pasos del Titán”, que iniciará este sábado, 4 de mayo, en la Discoteca Praga de Cali. Antes de su concierto, Roxana Restrepo habla del privilegio y desafío que es ser la nueva voz de Kraken.

—¿Qué pasó por su mente cuando fue elegida para ser la nueva voz de Kraken?

En ese momento yo estaba haciendo teatro musical, de modo que fue una oportunidad para regresar al rock. Desde muy pequeña admiré a Elkin Ramírez y la música de Kraken, por lo que, para mí, fue un gran honor poder hacer parte de esta historia. Al principio no imaginé la magnitud de lo que estaba asumiendo, de la responsabilidad que se venía, pero creo que fue una buena decisión.

—¿Cómo fue la reacción del público al conocer la noticia?

Hubo bastante dualidad entre los seguidores cuando se enteraron de que una mujer sería la cantante de Kraken, unos estaban de acuerdo y otros no tanto. Pero creo que el mismo proceso que iniciamos, el gran trabajo que hemos hecho con la banda después del fallecimiento de Elkin Ramírez, demostró por sí solo que seguimos haciendo música con honestidad y con un amor por la historia de Kraken, no por un interés de por medio.

Además, como todos sabemos, Elkin siempre quiso que Kraken continuara así él ya no estuviera, por eso sus músicos se pusieron la mano en el corazón y tuvieron la convicción de seguir sus palabras.

—¿En qué momento descubrió la música de Kraken?

Tengo un recuerdo muy especial con ‘Lenguaje de mi piel’, porque cuando estaba niña, por el año 1998, sonaba mucho esa canción. Entonces, en mi colegio, el grupo musical de estudiantes la montó y, como yo era la vocalista, terminé cantándola en muchas presentaciones. Desde ahí también empecé a generar una identidad vocal muy rockera y, como muchos jóvenes rockeros, también soñaba que quería tener mi propia banda de rock y poder compartir escenario con Elkin Ramírez.

Desde niña siempre fui muy fanática del rock, en especial del rock latinoamericano y, entre esos, Kraken siempre estuvo en los primeros lugares de mi lista de reproducción.

—¿Logró conocer a Elkin Ramírez?

Ocurrió de una forma muy particular, yo estaba tocando con mi banda Hydrus en el bar que él tenía en Bogotá y, durante una pausa, Elkin llegó y se me acercó, yo estaba en shock, se quedó mirándome y empezó a hablarme, fue un momento inolvidable. Pero no tuve ninguna otra oportunidad de conocerlo mejor, algo que me hubiera gustado, porque mis compañeros de banda me cuentan que era un hombre maravilloso.

—¿Cuál es el mensaje que le transmite la música de Kraken?

Su música tiene una filosofía de vida muy auténtica, de no seguir un pensamiento dogmático, político o religioso, sino buscar el ser más profundo, el escucharse uno mismo y tener una propia identidad, formarse unas ideas y convicciones apartadas del ego y defender la libertad de expresión.

También transmite esa identidad latinoamericana, rescatando el valor de nuestra historia indígena, de la que tenemos mucho por aprender. Y es todo lo que hoy día seguimos manteniendo.

—¿Cómo sobrellevó las críticas de los rockeros más radicales?

En Kraken he tenido retos de todo tipo, musicales y emocionales. Pero ante el público y sus comentarios, antes de entrar a la banda, ya había tenido una experiencia muy grande cuando participé en La Voz Colombia. Durante este reality show tuve la oportunidad de enfrentarme con las críticas y aprendí a ponerme una armadura para que no me afectaran en mi vida personal. Sin embargo, la magnitud de lo que representa Elkin Ramírez y de lo que hoy día hacemos, generó dificultades al principio, realmente fue un cambio muy fuerte, pasar de una figura masculina a una femenina.

Creo que he sobrellevado de la mejor forma este proceso, con el tiempo uno se va como acostumbrando a que las críticas siempre van a estar, hace parte del arte y del artista. Uno sabe que no puede gustarle a todo el mundo, siempre habrá un detractor y eso es válido, por eso tenemos un montón de diferentes artistas.

También hubo momentos en los que quería tirar la toalla, que no me sentía capaz de afrontarlo, pero tuve un gran equipo de trabajo y mis compañeros de banda me apoyaron muchísimo. Todo eso me ha permitido crecer como persona y artista, creyendo en mí misma, es decir, siguiendo la filosofía de Kraken.

—Empiezan una gira por sus 40 años de historia y escogen a Cali como la primera ciudad, ¿qué importancia tiene el público caleño para Kraken?

Mucha importancia, en especial para mí. Cali fue la ciudad donde yo hice mi debut como la cantante principal de Kraken, de modo que no hay mejor lugar para empezar esta gira de conciertos. Siento mucho cariño por la ciudad que me apoyó desde la primera vez y donde me sentí muy bien recibida. He hecho muchos conciertos en Cali y la siento más como mi segundo hogar, además Kraken tiene un público fiel desde hace muchos años.