Margaret Thatcher y Lady Di llegan a Netflix en la esperada temporada de The Crown

Hasta los menos fanáticos de la corona inglesa han caído ante los encantos de la serie de Netflix ‘The Crown’, que novelando la realidad ha permitido a los ‘mortales’ conocer el lejano mundo de la oligarquía inglesa, que es todo menos el mundo de fantasías que Disney siempre mostró en sus películas de princesas.

A lo largo de tres temporadas, los seguidores de la familia real, y los que no sabían nada de ella, han podido descubrir el rostro humano de los reyes y su familia, y los dramas personales, políticos y sociales que se entremezclan en el diario vivir de una familia donde la privacidad es casi imposible.

Aunque en una reciente entrevista en el medio La Varguarda, Olivia Colman (quien interpreta a la reina) dijo que le tranquilizaba saber que “Isabel II no ve la serie ‘The Crown’, ni la verá”, cabe recordar que en 2017 se supo que la reina había visto la primera temporada y había dado su visto bueno a la misma, hasta el punto de hacer un comentario al respecto en su conocido mensaje de Navidad en dicho año.

Pese a que se desconoce si Isabel y su familia siguieron viendo la serie, quién sabe si querrán ponerse en sintonía con la cuarta temporada, donde se abordarán algunos de los momentos más difíciles de la reina con dos figuras femeninas poderosas: Margaret Thatcher (Gillian Anderson) y Diana Frances Spencer, luego conocida como Lady Di (Emma Corrin).

¿Qué esperar de esta cuarta entrega de ‘The Crown’, según los sucesos históricos de los años 80?

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Se podría decir que esta temporada, políticamente hablando, se centrará en la era de Margaret Thatcher, conocida como la dama de hierro, quien llegó al 10 de Downing Street en mayo de 1979 y se quedó allí 11 años, hasta que en 1990 su propio gabinete la derrocó.

Esto significa que, a diferencia de las anteriores temporadas, la reina tendrá la ‘dicha’ de mantener durante los 10 nuevos episodios a la misma primera ministra.

Por desgracia, pese a que ambas eran mujeres poderosas, tenían la misma edad, el mismo empuje e idéntica devoción por el legado de sus padres, si hay algo que fue conocido públicamente en Inglaterra, de la relación de las dos mujeres más poderosas del país en los años 80, era que ellas no se llevaron especialmente bien.

Según Colman, en la serie la reina busca entenderse con esa otra mujer, pero nunca surge esa amistad que debería de haber nacido y que históricamente podría haber llegado a ser muy benéfica para el mundo. “Probablemente fue una oportunidad malgastada”, dijo.

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Quizá uno de los momentos privados más complejos de la familia británica fue llegada de Diana Spencer (Emma Corrin) y no porque tuviera un pasado escandaloso (como ocurrió con los pretendientes de la princesa Margarita), sino porque no lograba entender ese mundo lleno de reglas y prohibiciones al que había sido arrastrada desde el día en que comenzó a cortejarla el príncipe Carlos (Josh O'Connor).

Esta temporada abarcará el noviazgo de la pareja, su mítica boda en 1981, la llegada de los hijos (William y Harry) al matrimonio y la decadencia del mismo. En los capítulos también se retratarán los extraños encuentros entre Lady Di y Camila Parker Bowles (Emerald Fennell), la amante de su marido, sus momentos de soledad en el palacio y el inevitable divorcio.

A lo largo de tres temporadas, los seguidores de la familia real, y los que no sabían nada de ella, han podido descubrir el rostro humano de los reyes y su familia.

En 1985 la princesa Margarita (Helena Bonham Carter) tuvo que pasar por el quirófano, para ser intervenida en un pulmón, a la vista de sus antecedentes familiares y su gusto por el cigarrillo. Estos problemas de salud se sumaron a la triste y desastrosa vida sentimental que tenía y a los problemas personales que le acarreaba su arrolladora personalidad.

Por otro lado el príncipe Eduardo, quien terminó sus estudios en Cambridge, por esos años decidió unirse a la Marina, la cual abandonó cuatro meses después para ser artista.

Posiblemente la serie aborde esta etapa de la vida del príncipe, quien trabajó como asistente de producción de musicales como ‘El Fantasma de la Ópera’ y Cats’, y en 1987 apareció en el programa de la BBC ‘It’s a Royal Knockout’ junto al Duque y la Duquesa de York y la princesa Ana, a pesar de la contundente negativa de la reina Isabel II.

Como si los dramas domésticos y de relaciones interpersonales no fueran suficientes, los años 80 en la casa real inglesa también estuvieron llenos de tensiones políticas, marcados por el terrorismo del IRA, una onda crisis económica y, por si fuera poco, el conflicto de las islas Malvinas.

Por un lado, la serie seguramente recreará la tarde en que Lord Mountbatten (Charles Dance), mentor del príncipe Carlos, falleció trágicamente en 1979 en un atentado del IRA, mientras pasaba sus vacaciones en las costas de Irlanda.

Probablemente también se abordará la crisis económica que sufrió el país, mientras se adentraba en un conflicto armado en las islas Malvinas, las cuales habían sido ocupadas por Argentina, en un tiempo en que la ONU consideraba al archipiélago como territorio en litigio entre el país latino y Reino Unido, aunque estaba bajo control de este último desde 1833.

Esta entrega igualmente mostrará las disputas políticas que tuvo que vivir Margaret Thatcher con los sindicatos, por motivo de las diversas protestas contra el cierre de pozos mineros, las cuales terminaron derivando en varias huelgas locales y finalmente llevó a que entre 1984 y 1985 se paralizara por completo la industria británica del
carbón. Será una temprada con muchas reinas poderosas y una sola corona.

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Actuaciones impecables: Seguramente ni Olivia Colman y Helena Bonham Carter se llevarán el aplauso mayor, por lo que seguramente será una actuación impecable, ya que en esta temporada Emma Corrin, quien dará vida a Lady Di, ha demostrado ser la que mejor reencarna a su personaje. La crítica ha dicho que sus gestos y expresiones faciales son extremadamente parecidas a las que hacía Diana de Gales y transmiten la soledad y tristeza del personaje.

El invitado inesperado: Tal vez en un capítulo aparezca Michael Fagan, un pintor y decorador londinense, que en 1982 escaló el muro perimetral del palacio de Buckingham y poco antes del amanecer logró colarse en el dormitorio de la reina, solo para hablar con ella.