Juan Carlos Formell, el heredero del son que se fue muy pronto

La noche del viernes, en la primera fecha por su gira en Estados Unidos, los Van Van de Cuba se quedaron sin bajo eléctrico. El corazón de Juan Carlos Formell, el bajista, heredero y guardián del son de su padre, y también su nombre, se detuvo cuando el público del Lehman Center for the Performing Arts, en El Bronx, apenas entraba en calor.

Juan Carlos Formell salió del escenario tras unos 45 minutos de haber comenzado el espectáculo. Tenía 59 años y murió a causa de un ataque cardíaco.

Juan Carlos hacía parte de la tercera generación de una de las familias musicales más importantes de Cuba. Nieto de Francisco Formell, arreglista de los Cuban Boys de Ernesto Lucuona, e hijo de Juan Formell, fundador y líder de Los Van Van, heredó claramente las dotes musicales de sus antepasados.

Estudió música en los conservatorios Alejandro García Caturla y Amadeo Roldán, de La Habana, y completó su formación en la Escuela Nacional de Arte de Cuba. Destacó por su peculiar estilo como instrumentista acompañante de varias figuras del jazz cubano como Emiliano Salvador, Guillermo Fragoso y Joseíto González, director de la emblemática Orquesta Rumbavana.

En 1993 se radicó en Nueva York, pero Cuba siempre latió en su música. En una entrevista de 1996, explicó: “Aunque mis canciones no hablan específicamente de política, reflejan la realidad de Cuba desde mi perspectiva y no desde la perspectiva del sistema.”

Al llegar a la gran manzana actuó como músico callejero en las estaciones de metro de la ciudad. Poco después de participar en el álbum de la banda sonora de Paul Simon, Capeman, formó una banda, Cubalibre, y firmó un contrato multiálbum con Paddy Maloney, del sello de los Chieftains, Wicklow.

Su álbum de debut, ‘Songs from a Little Blue House’, publicado en 1999, le señaló como un nuevo artista muy prometedor. Rhythm Magazine escribió: “Con una técnica brillante y una profunda originalidad, Formell ha dado la vuelta a las convenciones afrocubanas”. El Washington Post escribió: “(Las) composiciones de Formell se construyen sobre ritmos suaves y ondulantes, articulados por las figuras de la guitarra del cantante y amplificados por sus percusionistas de buen gusto... llenas de evocadoras imágenes de la naturaleza y recuerdos agridulces”.

Junto a su hermano Samuel (director y baterista) y su hermana y Vanessa (vocalista), cuidaba el legado de su padre, Juan Formell, quien tras cuarenta y cinco años de vida artística falleció en 2014, a los 71 años. El célebre músico, considerado como una de las figuras más importantes de la cultura musical cubana del siglo XX y XXI, formó a fines de 1969, Los Van Van, que se reconoce como “El tren de la música cubana”, la misma que la noche del viernes paró de tocar para dar atención a Juan Carlos, mientras el público seguía cantando, por su cuenta, sus canciones.

En el video publicado en el canal de Youtube de Martin Gómez, @pregonero75, se ve cómo el músico deja su instrumento y sale muy despacio del escenario.

Tras la alerta de que algo malo pasaba, todos los músicos salieron de la tarima y se bajó el telón. Cuatro ambulancias y dos camiones de bomberos llegaron hasta el teatro, pero los intentos por salvar la vida del músico fueron inútiles.

Media hora después de salir del escenario, los músicos regresaron a terminar espectáculo, con la ayuda de Sebastián, un bajista uruguayo radicado en Nueva York a quien presentó Robertón. Lele, otro de los cantantes, indicó que el músico ‘vino a bailar con Van Van y terminó tocando con nosotros’.

Rápidamente, músicos, instituciones culturales y usuarios en redes sociales lamentaron la muerte del bajista.

“Una vez más la muerte nos arrebata a uno de nuestros músicos. Nuestras condolencias a la familia y a la agrupación Van Van”, se lamentó la Empresa estatal de Grabaciones y Ediciones Musicales.

La agrupación cubana Havana D Primera también lamentó en sus redes la noticia y calificó a Formell como un “ser de luz” que “pasa a otra dimensión”, mientras que la orquesta Maykel Blanco y su Salsa Mayor reconoció al músico cubano como un “querido hermano y amigo”.

El estatal Instituto Cubano de la Música (ICM) también se sumó a las condolencias y en una nota de prensa resaltó el trabajo del músico cubano con Los Van Van.

“Durante su trabajo con esta orquesta insigne de la música popular cubana, desarrolló una encomiable labor, especialmente en los últimos años, bajo la dirección de su hermano Samuel Formell, y contribuyó decisivamente a mantener vivo el legado musical de su padre”, indicó el ICM.