Papás, entre canas y pañales. La tendencia de ser padre después de los 40

Como dos capos de la mafia italiana se presentan los dos actores que han compartido escena en las películas de Scorsese, hoy tienen el respeto del público por ser los padres más longevos del ‘star system’. Es el caso del aclamado actor Al Pacino, de 83 años, quien recientemente anunció que se convertirá en padre nuevamente junto a su novia Noor Alfallah, de 29 años. Aunque, dudoso, pidió la prueba de paternidad.

Pacino se une así a su ocasional compañero de reparto, Robert De Niro, quien a sus 79 años confirmó el mes pasado que pronto dará la bienvenida a su séptimo hijo. Sin embargo, no son los únicos padres famosos de edad avanzada, ya que otros actores, músicos, e incluso, presidentes de Estados Unidos han tenido hijos en etapas avanzadas de su vida.

De hecho, la edad promedio de los nuevos padres ha ido en aumento a lo largo de los años. Entre 1972 y 2015, la diferencia de edad promedio aumentó en 3,5 años.

Lo que dicen los expertos

Para la psicóloga Gloria Hurtado cada caso es único y las circunstancias individuales varían considerablemente. “Algunos padres de edad avanzada pueden tener una excelente salud y energía para criar a sus hijos, mientras que otros pueden requerir apoyo adicional debido a limitaciones físicas o de salud. Pero eso depende de la actitud de cada quien y de cual sea su propósito con sus hijos”, aclara la profesional.

En última instancia, la decisión de tener hijos a una edad avanzada es personal y depende de las circunstancias y deseos individuales de cada pareja. De acuerdo a esto, la psicóloga Hurtado manifiesta que “es fundamental que los padres mayores consideren cuidadosamente los aspectos médicos, emocionales y logísticos involucrados, así como planificar el apoyo y la crianza de sus hijos de manera adecuada para garantizar su bienestar y desarrollo óptimo”.

Por último, en las últimas décadas, ha habido una disminución del 27 % en el número de padres estadounidenses menores de 30 años, mientras que el número de padres de entre 45 y 49 años ha aumentado en un 52%. Si estas tendencias continúan, es probable que la medicina y las actitudes sociales deban adaptarse para satisfacer las necesidades de una población de padres cada vez más diversa en términos de edad.

Desafíos de ser padre

La pregunta que se deben hacer los padres que toman la decisión de tener hijos después de los 40 o más, es que modelo quiere ser para su hijo. Esta decisión puede deberse a diversos factores, como una carrera profesional establecida, prioridades personales, estabilidad económica o a la búsqueda de una pareja compatible.

Sin embargo, tener hijos a una edad avanzada conlleva ciertos desafíos y consideraciones, como la salud y vitalidad física de los padres, ya que pueden enfrentar mayores riesgos de complicaciones durante el embarazo y el parto. Y hay una mayor probabilidad de que los padres mayores desarrollen condiciones médicas crónicas que afectan su capacidad para cuidar a sus hijos de manera óptima.

Desde la óptica de los hijos, tener padres longevos conlleva tanto ventajas como desventajas. Los padres mayores pueden ofrecer una mayor madurez emocional, estabilidad financiera y una perspectiva de vida enriquecida por sus experiencias. Pero también los hijos pueden enfrentar, a edad temprana, la pérdida de sus padres, o chocar con ellos por el abismo generacional. ¿Pero cuántos chicos no fueron educados por sus abuelos?.

Clint Eastwood

A lo largo de sus 91 años, el actor de western siempre ha sido reconocido como uno de los grandes de la pantalla grande.

En su vida personal, el icónico actor y director de cine es padre de ocho hijos, de seis mujeres distintas, entre ellos cinco mujeres y tres hombres, pertenecientes a diferentes generaciones, quienes mantienen entre todos una estrecha relación y se consideran mutuamente hermanos.

A pesar de haber tenido a su última hija a la edad de 66 años, Morgan, quien se convirtió en la octava integrante de la familia Eastwood, siempre ha existido una especulación en el corazón de Hollywood sobre la posibilidad de que Clint, famoso por sus múltiples aventuras extramatrimoniales, tenga más de un hijo no reconocido. Así que puede ser que, según se vaya el actor acercando al siglo de vida, sorprenda con alguna nueva paternidad.

George Lucas

Everest Hobson Lucas es la última hija que llega a la vida del creador de la gran saga de ‘Star Wars’, llegó al mundo en 2013 mientras su padre contaba con 69 años. Su nacimiento fue posible gracias a un vientre de alquiler, convirtiéndose así en la primera hija biológica del renombrado director.

George Lucas ya era padre de tres hijos adoptados de 20, 25 y 32 años respectivamente en esa época. Con la llegada de Everest y acercándose a los 70 años, Lucas seguramente necesitó algo más que fuerza para afrontar noches de desvelo, cambios de pañales y biberones.

La familia Lucas es un ejemplo de cómo el talento y la creatividad pueden fluir a través de las generaciones. Con George Lucas como el patriarca visionario, y Amanda, Katie y Jett siguiendo sus pasos en sus propios campos, el legado de esta familia deja una huella indeleble en la industria del cine y más allá.

“¿Hijos? Más adelante”

En el 2020 el actor Richard Gere , de 70 años, tuvo con su esposa Alejandra Silva, de 37, su segundo hijo, otro caso de paternidad longeva. En tiempos en los que es común escuchar frases como “No quiero tener hijos” o “Los quiero, pero más adelante”, esto es más normal de lo que parece.

Los avances médicos y el aumento de la esperanza de vida han permitido un mayor control sobre el momento de concebir y retrasar la maternidad /paternidad. Para la psicóloga Annie de Acevedo “este cambio de perspectiva ha llevado a pensar que los hijos no llegan cuando la naturaleza o la voluntad divina así lo determinan, sino cuando se desean activamente. Incluso, ya no es necesario contar con una pareja para ello”.

El filósofo Ortega decía que “la vida es lo que hacemos y lo que nos sucede”. Antiguamente, los hijos ocurrían, llegaban y sucedían. Ahora estos se conciben por voluntad propia, lo que ha afectado la relación entre padres e hijos. “Al ser fruto de la búsqueda y deseo, se consideran sus propietarios y se espera que cumplan con sus anhelos. No se les deja explorar por sí solos, aún en situaciones cotidianas”.