Política
¿Por qué salió completamente desnudo John Cena en la ceremonia de los premios Oscar?
El luchador también cubrió su cuerpo con una cortina para hacer entrega el premio.
Mientras se preparaba para presentar el premio a mejor vestuario, el comediante Jimmy Kimmel señaló que habían pasado 50 años desde que David Niven fue interrumpido en el escenario de los Óscar. De pronto, un intruso apareció detrás de él.
“¿Se imaginan que un hombre desnudo cruzara el escenario hoy? He dicho, ¿os imagináis que un hombre desnudo corriera por el escenario hoy? ¿No sería loco?”, preguntó Kimmel tres veces, antes de que un tímido John Cena asomara la cabeza por el plató.
Kimmel convenció al también exluchador, aparentemente reacio, para que continuara con el espectáculo y saliera desnudo.
Al final, Cena, con un estado físico impresionante, se mostró llevando sólo sandalias y protegiéndose con el sobre del ganador, lo que provocó el delirio del público.
En respuesta, el luchador indicó: “He cambiado de opinión... No quiero correr desnudo. No me siento bien haciéndolo. Este es un evento elegante, debería darte vergüenza proponer una broma de tan mal gusto”
Para aquellos que se lo estén preguntando: realmente estaba completamente sin ropa, y tuvo que esperar de pie a que alguien le cubriera con lo que parecía una cortina del escenario cuando se terminó la emisión.
¿Por qué se desnudó John Cena en la gala de los Oscar 2024?
Las preguntas sobre lo que habías detrás de esa peculiar escena no se hicieron esperar, porque el desnudo de John Cena se hizo viral al instante. Según se pudo conocer, esta aparición se debió a un homenaje al día de los Oscar de 1974 en el que el ‘streaker’ Robert Opel saltó al escenario y corrió desnudo mientras David Niven presentaba a Elizabeth Taylor.
Como se recordará, Robert Opel, que era fotógrafo, cruzó el escenario totalmente desnudo mientras hacía el símbolo de la paz con su mano izquierda con el objetivo de realizar un acto de protesta para reivindicar los derechos de los homosexuales.
El humor de Kimmel estuvo presente en su cuarta vez al frente de los Óscar, estaba relajado y sus chistes cayeron bien en una audiencia receptiva.
Se burló de la extensión de la transmisión, que comenzó cinco minutos tarde, así como de la epopeya de tres horas y media de Martin Scorsese.
Y enalteció la actuación de la estrella canina del drama legal francés “Anatomía de una caída”.
“Tuvo una escena de sobredosis. No había visto un actor francés vomitar así desde Gérard Depardieu”, dijo.
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