Sin pelos en la lengua, Luisa Fernanda W habló de los procedimientos estéticos que cambiaron radicalmente su cara

A través de sus redes sociales, la generadora de contenido Luisa Fernanda W no tiene ningún inconveniente en contestar las preguntas de sus seguidores o aclarar rumores que circulan en las plataformas.

Recientemente, y a través de un video, la pareja del cantante Pipe Bueno habló en un video sobre los procedimientos estéticos a los que se ha sometido en su rostro, debido a la circulación de fotos de hace varios años en los que su apariencia, era diferente.

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La influencer no tuvo problema en compartir una antigua fotografía de cuando no se había realizado ningún tipo de procedimiento para tomarla como referencia al confesar que lo primero que se hizo fue una rinoplastia, luego un procedimiento para levantar sus cejas “y un perfilamiento de labios que salió mal”, y tuvo que ser retirado.

Igualmente, señaló que “hace poco me puse unos puntos de bótox en las cejas para levantarlas un poco” y asegura que algo que la hace ver muy distinta es que se retiró un diseño de sonrisa que, considera, no iba muy acorde con su rostro.

Sin embargo, Luisa Fernanda, quien es madre de dos niños, dio el mayor crédito a los cambios en su rostro, a los populares ejercicios de yoga facial que practica a diaria.

“Yo creo que a mí una de las cosas que me tiene el rostro tan bonito es porque hago mucho yoga facial, todos los días sin falta”.

¿Qué es el yoga facial?

El yoga facial es una práctica que consiste en realizar una serie de estiramientos, ejercicios y masajes faciales que ayudan a tonificar y relajar los músculos del rostro, aportando elasticidad y fortaleza a la piel para lucir una tez sana y bonita.

¿Cómo ponerlo en práctica?

Lifting total: Respirar hondo y hacer con la boca una “O” larga y fina. Sostener esta pose por unos segundos, respirar y sentir cómo se estiran los músculos. Poner el labio inferior y superior hacia adentro, sobre los dientes y sostener la pose. Ahora, elevar las mejillas como cuando se sonríe.

Para reducir la papada y trabajar la retención de líquidos: Colocar las manos sobre el pecho, elevar el mentón, cuidando de no presionar cervicales. Mantener esta posición, realizar el gesto de un beso bien pronunciado hacia adelante, alternando contracción y relajación, durante diez repeticiones. Luego, relajar el cuello y repetir el ejercicio completo nuevamente. La mirada permanece relajada.

Realzar las mejillas y pómulos: Realizar con los labios el gesto de la vocal O, introducir el dedo pulgar en la boca y succionar. Realizar tres series de diez repeticiones. Es importante realizar cada ejercicio con plena presencia y consciencia para evitar arrugar la cara y contraer los músculos. Se recomienda tomar profundas respiraciones entre cada uno y recordar que la práctica diaria favorece la salud física y emocional a largo plazo.

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